Los 6 niños más maquiavélicos del cine de terror

El género del terror es el ingrediente ideal para disfrutar una terrorífica noche de Halloween y qué mejor manera de recordarlo con películas del culto de las que, varias de ellas, han sido galardonadas por premios de alto renombre como los Oscar y los Globos de Oro.

A medida que pasan los años se van crean contenidos interesantes, versátiles e innovadores. Sin embargo, en la década del 70 varios de ellos superaron las expectativas por su calidad superior al generar efectos visuales. Y sin restar mérito: las actuaciones estelares. De los que lograban convencerte de que, en realidad, así era el mundo paranormal. Estremeciéndote del susto segundo por segundo.

Con taquillas que superaron su presupuesto, estos clásicos tuvieron muy en cuenta incluir en su fórmula de éxito a niños cuyos talentos quedaron inmaculados en los recuerdos ochenteros. Para varios de ellos, la maldición de la fama fue tan turbulenta que jamás volvieron a aparecer en las pantallas. Solo uno pudo sostenerse en los recuerdos constantes del público, de los medios y producciones.

Infobae te recuerda cuáles fueron los 6 hijos del terror, y qué fue de ellos.

Regan MacNeil, de El exorcista (1973)

Con Linda Blair, este filme es uno de los más populares del terror, siendo una de las más taquilleras de su época superando 440 millones de dólares de recaudación. La actuación de Linda le valió una nominación a los Oscar y un Globo de Oro a la mejor actriz de reparto. Su actuación fue tan magistral que su carrera no pudo despegar: después de este papel todos tenían altas expectativas en ella, por lo que Linda decidió renunciar a ese sueño.

Regan MacNeil fue una de las 100 mejores villanas del cine, ubicándose en la novena colocación, según American Film Institute. La actriz sufrió de acoso y amenazas de muerte por lo que Warner Bros. tuvo que asignarle un guardaespaldas. Hoy en día, alejada de las pantallas, Blair se dedica a su propia ONG que apoya a la preservación de animales.

Damien Thorn, en The Omen (1976)

Cuando se menciona el niño anticristo, inmediatamente se viene a la mente el personaje de Damien Thorn, interpretado por Harvey Stephens. Un niño que llegó a una familia diplomática, tras la muerte de su primogénito. Ese oscuro secreto empezará a ocasionar estragos, un poco espeluznantes, cuando Damien saca a relucir sus poderes diabólicos poniendo patas arriba a los Thorn. Un dato extra curioso. El director Richard Donner usaba un truco muy peculiar para desatar la ira del protagonista: burlarse de él. ¡Vaya que lo logró a la perfección!

La profecía es que, este niño –no tan niño– dejó de aparecer en las pantallas. Hoy en día es un analista del mercado bursátil y recientemente protagonizó un escándalo judicial al atacar gravemente a dos ciclistas tras una disputa callejera. ¿Se le salió el personaje anticristo en su realidad? Quién sabe…

Grady Twins, de El resplandor (1980)

Son las hermanas gemelas más siniestras de la industria del terror: Louise y Lisa Burns. Se convirtieron en uno de los íconos referentes del género. Esta producción basada en el libro de Stephen King fue dirigida por Stanley Kubrick y es considerada como una película de culto. Pero lo extraño de todo esto es que El resplandor terminaría siendo la única aparición de las hermanas. Después de ello, no regresarían a las pantallas. Parece que el deseo de Danny Torrance (Daniel Lloyd) se hizo realidad: él cerraba los ojos para no ver a las tenebrosas niñas al fondo del pasillo del hotel, mientras lo recorría con su bicicleta.

¿Qué ocurrió con estas famosas gemelas? Según un informe realizado por VH1, son profesionales -Louise es microbióloga y Lisa, docente de Literatura- y están alejadas por completo del mundo cinematográfico.

Toshio Saeki, en The Grudge (2004)

Poco se sabe sobre lo que pasó con Yūya Ozeki, quien interpretó a Toshio Saeki. Pero lo cierto es que hasta el momento The Grudge es una de las sagas japonesas de terror más importantes de la era y, quizás, la más recordada de su continente. Después de actuar en la saga, estuvo en otras producciones como El grito y en series de corta duración. Se dice que Yūya se dedicó a tocar el piano y a la natación. Desde allí, no ha aparecido más en las pantallas.

En The Grudge, que en japonés se traduce como La Maldición (Ju-on), la tenebrosa historia se desarrolla a partir de que el padre de Toshio estaba muy seguro de que su esposa lo había engañado con otro hombre, por lo que tuvo una ira incontrolable y, al morir, dejó una maldición difícil de afrontar.

Henry Evans, de El buen hijo (1993)

De todos los niños maquiavélicos de la lista, este es el más recordado, y no precisamente por su actuación estelar. Ello se debe a sus constantes escándalos, tanto personales como familiares. También es recordado por ser el pobre angelito. Lo cierto es que Macaulay Culkin fue de los pocos niños que aprovechó su auge de fama para seguir dando de qué hablar y continuar una carrera sólida a pesar de su corta edad. En el género del terror, estuvo en el filme El buen hijo (The Good Son).

Un dato curioso: su padre lo hacía dormir en el sofá en su propia mansión pagada con su dinero, bajo la excusa de que no se le subiera la fama. Esto teniendo en cuenta que sus ganancias, por película, ostentaban cerca de los 4,5 millones de dólares. Por ello, Culkin se emancipó a sus 14 años. Así que, ¿buen hijo? Sólo queda juzgarlo bajo tu propia perspectiva.

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