¿Te imaginas ver a un ser querido morir una y otra vez? Eso fue lo que hizo la cineasta Kirsten Johnson para el documental Dick Johnson Is Dead, el cual trabajó desde el momento en que conoció de la demencia de su padre y con el que retrató momentos divertidos, pero también muy conmovedores del deterioro físico y mental de su gran compañero hacia el final de sus días.
“Sólo la idea de que alguna vez podría perder a este hombre es demasiado para soportar: es mi papá”, explicó Johnson en el tráiler de la cinta original de Netflix y que será estrenada el próximo viernes 2 de octubre.
La realizadora de cine combinó las muertes accidentales y las escenas de la vida de su padre, para que el espectador entienda el proceso que inicia con la pérdida de memoria, para continuar con el deterioro cognitivo y concluir con la muerte inminente; pero sin descuidar el amor entre ambos, la diversión y el dolor por la llegada de la separación final.
En la cinta se muestra a un “padre resucitado” como una manera de desafiar a la muerte, aunque en el proceso se documenta de forma real la pérdida de los recuerdos y el desgaste familiar, como bien lo comentó el protagonista de este proyecto: “Lo que más odio de mi pérdida de memoria es que lastima los sentimientos de las personas”.
“Todo este proyecto surgió con un sentido de confianza de que, en primer lugar, fracasaré. Traté de hacer esta película para mantener vivo a mi padre para siempre. El fracaso era inevitable. Tal vez.”, comentó sus razones Kirsten Johnson en entrevista con The Guardian.
La misma realizadora aceptó que de esta forma pudo ver a su padre en lugares que jamás imaginó, pero también se percató de los riesgos que corrió al aceptar este ambicioso proyecto, ya que podía perder la memoria en plena escena o reaccionar de una manera no prevista en el guion ya estudiado con anterioridad.
Añadió que en más de una ocasión se cuestionó su reacción si durante el rodaje ocurriera algo fatal: “Hubo muchas ocasiones en las que pensé, ‘¿Qué voy a hacer?’... No sé qué haría si tropezara y se cayera, en el momento. ¿Dejaré la cámara? ¿Seguiré filmando? La escena de la ambulancia es un interrogatorio de eso, mirando lo que haría si me colocaran en un escenario de emergencia real como ese. ¿Lo dispararía? Claro que sí".
La madre de Kirsten Johnson también padeció un problema similar, ya que fue diagnosticada con Alzheimer, y este tipo de enfermedades le desarrollaron su interés por rodar los documentales Camarógrafo y ahora la basada en el deterioro mental de su padre.
“Camarógrafo es una investigación de la memoria y volver a todas estas imágenes que filmé durante 25 años como camarógrafo. Me interesé mucho en la memoria y cómo funciona la memoria debido a su Alzheimer, y luego me interesé mucho en el tiempo y cómo funciona el tiempo. Y luego relacioné eso con el cine”, declaró a Stat News.
“Y así fue como me propuse la idea de hacer esta película con mi papá, como una forma de desafiar la demencia, desafiar la muerte. Como si me fuera a reír esta vez, no voy a hacer el velo de lágrimas que hice la última vez”, añadió al mismo sitio web.
Dick Johnson Is Dead fue estrenada con éxito en el Festival de Cine de Sundance, donde recibió un premio especial a la innovación en la narración de historias de no ficción a inicios de este 2020, pero llegará finalmente a las pantallas de Netflix este viernes.
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