Cada 30 de agosto, la Iglesia Católica celebra el día de Santa Rosa de Lima. Según la creencia popular, que se inició en Perú y se extiende a varios países de América Latina, alrededor de esa fecha suele desencadenarse una tormenta intensa, conocida como la “Tormenta de Santa Rosa”.
Esta tradición tiene su origen en un hecho ocurrido en 1615, cuando Lima se libró de un ataque de piratas holandeses gracias a una violenta tormenta. La leyenda narra que Isabel Flores de Oliva, más conocida como Santa Rosa de Lima, convocó a los limeños a rezar para pedir la protección divina. Las súplicas, según la historia, resultaron en una tormenta que dispersó la flota enemiga. Desde entonces, cualquier tormenta que acontece cerca del 30 de agosto se asocia con Santa Rosa.
Desde el punto de vista científico, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) aclaró que generalmente cada año se produce una tormenta intensa “alrededor” del 30 de agosto, pero ese lapso “alrededor” no es fijo: puede ocurrir “unos 3 o 4 días en torno al 30 de agosto o unos 15 días antes y después de esa fecha”, indicaron desde el SMN.
Paola Salio, especialista en tormentas y en ciencias de la atmósfera, investigadora UBA/Conicet en el Centro de Investigaciones del Mar y de la Atmósfera (CIMA) de la Universidad de Buenos Aires, explicó en un comunicado: “Lo que hace que hacia fines de agosto o principios de septiembre haya una tormenta importante en la zona del Río de la Plata, o de la provincia de Buenos Aires, es que en general en esta época del año, empieza a llegar el aire húmedo del norte, y entonces, la atmósfera se vuelve inestable”.
La experta agregó que “como los frentes todavía son muy habituales en esta época del año, cuando se combinan esas dos cosas, entonces se producen tormentas más intensas”.
¿A qué se debe la “tormenta de Santa Rosa” desde la ciencia?
La tormenta se debe a que en la zona este y centro de la Argentina y en Uruguay, suele ocurrir un cambio en el tipo de circulación general de la atmósfera a fines de agosto o a principios de septiembre, que da lugar a una tormenta.
“Desde mediados y finales de agosto, la atmósfera es sometida a cambios en su circulación debido a la proximidad de la primavera, lo que favorece la presencia de aire cálido, más humedad y condiciones propicias para su desarrollo. Eso sí, aunque popularmente se espera que la tormenta de Santa Rosa sea más fuerte que cualquier otra, no hay evidencia de que esto sea siempre así”, informó el SMN.
Las tormentas se dan cuando se generan descargas bruscas de electricidad en la atmósfera que se manifiestan en un resplandor -que se conoce como rayo- y un estruendo o trueno. Para que eso se produzca, antes se formó un tipo de nube que se llama cumulonimbus.
Son nubes caracterizadas por un gran desarrollo vertical que a menudo, superan los 10 kilómetro de altura, Dentro de esas nubes se encuentran fuertes corrientes de aire con temperaturas muy inferiores a la de congelación, cristales de hielo y granizo.
Las cumulonimbus generan precipitaciones intensas en forma de chaparrón de lluvia o, en ocasiones, de nieve o granizo, así como también vientos fuertes.
¿Con cuánta frecuencia hay una tormenta de Santa Rosa?
Para identificar si realmente hay más tormentas cerca del 30 de agosto, integrantes del Observatorio Central Buenos Aires (OCBA), que depende del SMN, revisaron una base de datos de más de 100 años. Buenos Aires se encuentra dentro de la región de la Argentina donde las tormentas son frecuentes.
Consideraron los datos desde el 25 de agosto al 4 de septiembre (5 días antes y después de Santa Rosa) desde 1906 hasta 2023. Luego, contabilizaron, para cada año, la cantidad de días consecutivos con precipitaciones y la lluvia acumulada. En caso de registrarse más de un evento de tormentas en los 10 días considerados, se contabilizó solo el que dio lugar a mayor cantidad de agua caída.
El resultado del análisis demostró que, en los 118 años de registro, en 67 oportunidades (57% de los casos) se produjeron tormentas en esas fechas, aunque no siempre estuvieron asociadas a precipitaciones intensas y/o abundantes.
En 2024, la llamada tormenta de Santa Rosa llegó a término, en el día de la efeméride religiosa, el 30 de agosto. Esto se debe al desarrollo de un sistema de baja presión (ciclogénesis) sobre la región pampeana, lo que da lugar a lluvias y algunas tormentas.
Por el momento, las provincias afectadas son Entre Ríos, Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, el este de La Pampa y la ciudad de Buenos Aires.
“Se termina la semana con abundantes lluvias y algunas tormentas en Cuyo y la región central. Se prevé viento del sudeste en el Río de la Plata y descenso de temperatura. Por la tarde se intensifica el viento en el Noroeste”, de acuerdo con el SMN.