El coronavirus que causa la enfermedad COVID-19 sigue aún circulando en el mundo. Por eso, es clave estar al día con las dosis de vacunas y mantener la ventilación permanente en los espacios interiores.
El virus sigue cambiando constantemente y puede dar lugar a nuevas variantes y sublinajes que se propaguen con mayor rapidez o eficacia. Si eso ocurre, la subvariante puede volverse más común en relación con otras que estén circulando. Eso ocurrió con el sublinaje de Ómicron llamado JN.1.
A nivel mundial, JN.1 es actualmente la subvariante de interés más circulante y ha sido notificado por 71 países, según informó la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se la ha detectado en Colombia, Argentina, México, y Perú, entre otros países de América Latina.
Representaba alrededor del 66% de las secuencias realizadas a partir de muestras de pacientes con COVID durante la última semana de diciembre en comparación con alrededor del 25% en la última semana de noviembre.
Esa agencia sanitaria había difundido la evaluación inicial del riesgo de JN.1 el 19 de diciembre pasado. Indicó que había un bajo riesgo para la salud pública a nivel mundial basada en las pruebas disponibles.
También los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos estimaron JN.1 era responsable de alrededor del 85,7% de los casos registrados en ese país al 19 de enero.
1. Qué es la subvariante JN.1 del coronavirus
El sublinaje JN.1 es desciende de Ómicron BA.2.86. Es como si fuera una “nieta”, si se la “compara” con una relación familiar. Está a dos generaciones de distancia de BA.2.86, que había sido llamada coloquialmente Pirola.
Según la doctora Nicole Doria-Rose, jefa del Núcleo de Inmunología Humoral del Centro de Investigación de Vacunas del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de los Estados Unidos -en diálogo con la revista especializada JAMA- la subvariante JN.1 tiene una mutación, denominada L455S.
Esa mutación mejora la capacidad del virus para unirse al receptor de la enzima convertidora de angiotensina 2 (ACE2), que es la puerta de entrada del patógeno en las células.
El JN.1 parece ser muy contagioso, quizá más que cualquier otro miembro de la familia Ómicron, sostuvo William Schaffner, profesor de enfermedades infecciosas y política sanitaria de la Facultad de Medicina de la Universidad de Vanderbilt.
“Las personas que estamos viendo hospitalizadas hoy son generalmente personas en las categorías de alto riesgo que no han aprovechado la vacuna actualizada”, dijo Schaffner.
“Creo que JN.1 claramente está impulsando la transmisión”, dijo a JAMA el epidemiólogo Michael Osterholm, director del Centro de Investigación y Política de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Minnesota. “Afortunadamente, no hay pruebas de que esté produciendo una enfermedad más grave”, acotó.
Consultado por Infobae, el doctor Humberto Debat, investigador en virología del Conicet y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, comentó: “La subvariante JN.1 es la que está pasando a predominar en el mundo. Está relacionado con la cronología de las infecciones, el estatus inmunológico de la población y una baja frecuencia de aplicación de las dosis de refuerzo de vacunas. Esto facilita la posibilidad de nuevas infecciones”.
2. Cuáles son los síntomas de la subvariante JN.1
Los síntomas pueden ser fiebre o escalofríos, tos, sentir que le falta el aire, fatiga, dolores musculares y corporales, dolor de cabeza, pérdida reciente del olfato o el gusto, dolor de garganta,congestión o moqueo, náuseas o vómitos, y diarrea.
3. ¿Hay que usar mascarillas o barbijos?
Para los trabajadores sanitarios y los centros de salud, la OMS aconsejó el uso universal de mascarillas en estos establecimientos, un uso que también recomendó para los profesionales que atienden a pacientes sospechosos y confirmados de COVID. Incluso, recordó que se debe mejorar la ventilación en estos ámbitos.
Las tasas más elevadas de COVID y otras infecciones respiratorias han impulsado a los hospitales de Estados Unidos y España, entre otros países a reinstaurar el uso obligatorio de mascarillas.
4. Qué se sabe sobre JN.1 en Argentina
Según informó el Ministerio de Salud de la Nación en la Argentina, el 17 de enero pasado se detectaron 2 casos confirmados de la subvariante BA.2.86 (con residencia en la provincia de Santa Cruz) y 6 casos de la subvariante JN.1. Dos de esos pacientes tienen con residencia en la Ciudad de Buenos Aires, 1 en Chaco, 1 en Salta, 1 en Santa Cruz y 1 caso en Santa Fe.
Los casos fueron detectados por la Red Federal de Genómica y Bioinformática y por el Laboratorio de Salud Pública, Área Genómica y diagnóstico Molecular de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de La Plata.
5. Cuántos días dura el COVID
Los síntomas del COVID-19 pueden durar de 1 a 4 semanas, pero, en algunos casos, recuperarse puede llevar hasta 12 semanas. Si los síntomas duran más de 12 semanas, es posible que se haya desarrollado el COVID de larga duración o COVID prolongado.
6. Cuántos días hay que aislarse si se tiene COVID
Si tiene COVID-19, puede propagar el virus a otras personas. Hay precauciones que puede tomar para prevenir la propagación a otras personas: aislarse, usar mascarilla y evitar el contacto con personas que corren riesgo de enfermarse gravemente, según los CDC.
“Desde el día de inicio de los síntomas del COVID, las personas afectadas deberían aislarse 5 días para no transmitir el patógeno a otras personas”, afirmó Javier Farina, médico y miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) en diálogo con Infobae.
7. Cómo protegerse contra el coronavirus
La OMS también aconsejó se tomen esta medidas para prevenir infecciones:
- Usar mascarilla o barbijo cuando se encuentre en áreas concurridas, cerradas o mal ventiladas, y mantener una distancia segura de los demás, en la medida de lo posible.
- Mejorar la ventilación y cubrirse al toser y estornudar.
- Realizar un lavado de las manos regularmente
- Mantenerse al día con las vacunas contra el COVID-19 y la gripe, especialmente si la persona tiene un alto riesgo de padecer una enfermedad grave. Esta recomendación es para personas mayores, gestantes, o con enfermedades crónicas o inmunocomprometidas.
- Hay que aislarse si se tiene COVID.