Desde el año pasado un episodio del fenómeno climático de El Niño/Oscilación del Sur (ENOS) se desarrolla en el planeta. Significa que la temperatura del mar en el Océano Pacífico oriental tropical aumentó por encima del promedio durante varios meses consecutivos y luego hubo otros cambios en la atmósfera y en los mares.
Ese fenómeno de El Niño podría influir en las condiciones climáticas que habrá en la Argentina durante los tres próximos meses, según el pronóstico trimestral que elaboró el Servicio Meteorológico Nacional.
El Niño es un evento natural. Puede tener efectos diferentes en el planeta, desde más lluvias e inundaciones en algunas zonas hasta sequías en otras, y afectar la salud humana, con más golpes de calor o más casos de infectados por virus transmitidos por mosquitos.
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) alertó que se prevé que el actual episodio de El Niño se prolongue, al menos, hasta abril de 2024. El fenómeno se produce con una frecuencia media de entre dos y siete años y su duración suele ser de entre 9 y 12 meses.
Para la Argentina, el SMN ya anticipó la probabilidad de que haya un nivel de lluvias superior al normal sobre la región del Litoral, Córdoba, oeste de Santa Fe y este de San Luis. Habrá una probabilidad normal o superior a la normal de lluvias en la región Norte, La Pampa y Buenos Aires.
“El Niño aumenta la recurrencia de eventos de lluvias en el Litoral y centro del país. Ya empezó a notarse claramente en agosto en el norte del Litoral y luego, a partir de octubre, en el resto de la región”, dijo a Infobae, el meteorólogo y licenciado en Ciencias de la Atmósfera en la Universidad de Buenos Aires, Christian Garavaglia, que forma parte del SMN. En cambio, en la región del Noroeste y oeste de Patagonia habrá un nivel normal o inferior a lo normal en enero, febrero y marzo. En el sur de la Patagonia (principalmente en Santa Cruz y Tierra del Fuego) habrá menos lluvias que el nivel normal.
Más allá de esas especificaciones, el SMN aclaró que “no se descarta la ocurrencia de eventos de precipitación localmente más intensa que lo normal, especialmente hacia el centro-este, norte y noreste del país”. Por eso, recomendó seguir los pronósticos diarios y semanales que publica ese organismo público:
Además, se prevé mayor probabilidad de ocurrencia de temperatura media superior a la normal en las provincias de Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca, y La Rioja. Es decir, allí haría más calor que lo normal.
“Las proyecciones para este verano en particular indican que la región del Noroeste tendrá en promedio temperaturas más altas que lo normal”, explicó Garavaglia. Aclaró: “No hay una conexión clara de El Niño con las temperaturas en el NOA”.
En tanto, el pronóstico señala que habría temperatura normales o superior a la normal sobre las regiones del Norte, Cuyo y Patagonia. En cambio, la temperatura media será normal en la región del Litoral, Santa Fé, Córdoba, La Pampa y Buenos Aires.
Las zonas de la costa atlántica de la provincia de Buenos Aires tendrían una temperatura media normal para el trimestre y el nivel de lluvias estaría en el rango de lo normal o superior al normal.
Los expertos del SMN plantearon la posibilidad de que también ocurran olas de calor. “No se descarta que hacia el extremo norte, noroeste y centro-oeste del país pueda observarse una mayor frecuencia de temperaturas máximas extremadamente altas”, alertaron. Esa situación podrían favorecer eventualmente la ocurrencia de olas de calor en esas zonas.
De acuerdo con Mauricio Saldívar, director de Hidrometeorología en la Municipalidad de La Plata y del Sistema de Alerta Temprana para el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, “los argentinos vamos a comenzar un 2024 muy diferente a lo que fue el comienzo de 2023, sometido a los últimos estertores de una sequía brutal, producto de tres años consecutivos donde el clima respondía a La Niña”.
El meteorólogo señaló en un artículo en Meteored que “existe una probabilidad razonable de que 2024 sea el primer año en el que la temperatura media de la superficie terrestre supere en más de 1,5 °C a la del periodo preindustrial, en una sumatoria de factores donde la presencia de El Niño es decisiva para motorizar años más calurosos a nivel global”.
Por lo general, el impacto de El Niño en las temperaturas medias globales se nota más al año siguiente de haberse declarado. Es por eso que es alta la chance de que 2024 sea un año récord, según Saldívar.
Cuando sube la temperatura, según el Ministerio de Salud de la Nación, hay grupos de personas que pueden ser más vulnerables: personas mayores, bebés, niños y niñas, personas embarazadas y en lactancia, personas con alguna enfermedad crónica o con sobrepeso, personas expuestas al calor en su ambiente laboral, quienes viven en situación de calle, y aquellas personas que consideren que pueden estar más expuestas por el impacto de la ola de calor.
Las recomendaciones en lugares cerrados (casa, trabajo, etc) para evitar un golpe de calor son: hidratarse, tomar agua con mayor frecuencia (aun cuando no se sienta sed), procurar siempre consumir agua segura, y evitar bebidas con cafeína o con azúcar en exceso, muy frías o muy calientes. También es recomendable incorporar frutas y verduras a la alimentación y evitar las comidas abundantes, así como la realización de actividad física intensa, de acuerdo con la cartera de Salud nacional.
Para el cuidado de la salud en la vía pública se sugiere evitar la exposición directa al sol en los horarios de mayor temperatura (de 10 a 16 horas), en especial bebés, niñas y niños pequeños. Además, es importante utilizar protección solar.