La triquinosis es una enfermedad zoonótica. La infección se contrae al comer las formas inmaduras (larvas) de los nematodos de Trichinella spiralis, un pequeño parásito que se aloja en los músculos de los animales. Se transmiten al ser humano de modo accidental, por el consumo de carne o derivados de carnes, crudas o mal cocidas, que contienen larvas viables.
En la provincia de Buenos Aires, durante 2023, se reportaron 219 casos confirmados de personas con triquinosis. También se notificaron 39 casos probables y 254 aún continúan en estudio. En ese sentido, el Ministerio de Salud bonaerense informó que se registraron 5 brotes de triquinosis que afectan a 21 municipios.
El primero fue en el municipio de Chivilcoy en la segunda quincena de junio. Mientras que en la segunda quincena de julio, se produjeron brotes en Coronel Dorrego, Ayacucho y Las Flores.
En tanto, en la última semana de julio, los municipios de Adolfo Alsina, Bahía Blanca, Coronel Suárez, Guaminí, Puán, Saavedra, Hipólito Yrigoyen, Rivadavia y Salliqueló registraron brotes. Al tiempo que el último de estos fenómenos epidemiológicos tuvo lugar en la ciudad de Olavarría, en la semana del 20 de agosto.
El brote que afectó a más personas fue el de Olavarría, con 187 casos reportados hasta el momento. Todos los afectados evolucionaron favorablemente y se proveyó el tratamiento correspondiente.
Hubo diferencias entre las situaciones epidemiológicas de 2023 y 2022. Para el mismo período del año pasado, se habían confirmado 63 casos de triquinosis, mientras que en este año se registraron 219 casos.
En cada brote se realizaron estudios epidemiológicos para averiguar por qué se habían producido. Es decir, se investigó cuál era el origen de la transmisión de triquinosis.
Los resultados de las fuentes de contaminación que generaron los 5 brotes de triquinosis:
1- En el municipio de Chivilcoy, se originó por el consumo de bondiola de cerdo de faena casera. La secretaría de Salud del municipio, junto a referentes de la Región Sanitaria X, coordinaron acciones de control de foco y bloqueo del brote.
2- En Coronel Dorrego, el brote se produjo en personas que consumieron carne de cerdo de faena casera.
3- En Ayacucho, se trató de un brote familiar por consumo de fiambres y chacinados caseros. Se llevaron a cabo acciones de control por parte del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), Zoonosis y Bromatología del Municipio.
4-El brote de triquinosis que comprendió a los municipios de Adolfo Alsina, Bahía Blanca, Coronel Suárez, Guaminí, Puán, Saavedra, Daireaux, Hipólito Irigoyen, Pehuajó, Rivadavia, Pellegrini, Rivadavia, Salliqueló y Trenque Lauquen tuvo su origen en alimentos que provenían de la Fábrica de Chacinados “Agroindustria Los Andrés S.R.L.”. Las acciones de control fueron hechas por funcionarios del Ministerio de Desarrollo Agrario, Dirección de Bromatología del municipio de Salliqueló y del Ministerio de Seguridad provincial.
5- En Olavarría hubo un brote familiar por consumo de carne de cerdo de faena casera. Las acciones de control de foco fueron llevadas a cabo por bromatología y epidemiología del municipio, también participaron autoridades de Desarrollo Agrario y Senasa.
Qué es la triquinosis y cuáles son sus síntomas
Es una enfermedad producida por un parásito con forma de gusano que se encuentra alojado en los músculos de los cerdos y otros animales salvajes, como el jabalí y el puma.
Los síntomas de la triquinosis son fiebre, dolores musculares, diarrea, vómitos, hinchazón de párpados y picazón. Ante estos signos, hay que acudir inmediatamente al centro de salud más cercano.
Hay medicamentos que se pueden usar para tratar la infección reciente, pero no hay un tratamiento específico para la triquinosis una vez que las larvas invaden los músculos. Los analgésicos pueden ayudar a aliviar el dolor muscular, pero los quistes perduran durante años.
Cómo se puede prevenir la triquinosis
Para evitar contraer triquinosis, solo se debe consumir carne de cerdo y derivados frescos y bien cocidos (es decir, cocinarlos hasta que desaparezca el color rosado). Tener en cuenta que salar o ahumar la carne no es suficiente para matar al parásito, según las recomendaciones del Ministerio de Salud de la Nación.
También se deben comprar los productos derivados, chacinados y embutidos (como jamón, panceta, longaniza, chorizos) solamente en comercios habilitados. Hay que verificar en la etiqueta que hayan sido elaborados por empresas autorizadas donde se especifique marca, identificación del lote, fecha de elaboración y vencimiento, identificación del establecimiento elaborador y registro ante la autoridad sanitaria. La venta callejera de estos alimentos está prohibida.
En zonas rurales y criaderos, se deben respetar las normas establecidas por los servicios veterinarios para la cría de cerdos. Todos los establecimientos que críen cerdos (en pequeña o gran escala) deben poseer su inscripción en el Registro Nacional Sanitario de Productores Agropecuarios otorgado por el SENASA.
Los cerdos deben ser criados en instalaciones adecuadas sin presencia de roedores y deben ser bien alimentados. Debe evitarse alimentarlos con basura, desperdicios de mataderos y/o residuos de casas de comida o restaurantes, ya que en ellos puede haber restos de alimentos contaminados con el parásito.
Asegurar una correcta disposición de los alimentos para los cerdos (condiciones de almacenamiento, condiciones edilicias del depósito de alimento), para prevenir la infestación de roedores y animales silvestres.
Al realizarse la faena de un animal (ya sea cerdo, jabalí o puma), incluso si se realiza de manera doméstica, es importante consultar al veterinario y pedir el análisis de una muestra de diafragma (entraña) de cada res para confirmar la ausencia del parásito que provoca la triquinosis.