Una mamografía es una imagen de la mama tomada con rayos X. Los médicos indican las mamografías para buscar signos de cáncer de mama en sus etapas iniciales. Pero ha estado en debate a qué edad y con qué frecuencia las mujeres deben empezar a hacerse ese examen para tener beneficios y reducir riesgos.
En los Estados Unidos, el Grupo de Trabajo sobre Servicios Preventivos recomendó que las mujeres de todos los orígenes raciales y étnicos con un riesgo medio de desarrollar cáncer de mama deberían empezar a someterse a mamografías periódicas a los 40 años.
Antes solo lo sugería como una decisión individual hasta los 50 años. Los expertos que forman ese Grupo de Trabajo son un grupo independiente de especialistas en atención primaria y prevención que revisa sistemáticamente las pruebas de eficacia y luego elabora recomendaciones sobre servicios clínicos preventivos.
Argumentaron que la nueva recomendación para que todas las mujeres se sometan a pruebas de detección del cáncer de mama cada dos años a partir de los 40 años busca “reducir el riesgo de morir por esta enfermedad”.
La recomendación basada en estudios científicos aporta más pruebas para derribar un mito relacionado con el cáncer de mama. El Instituto Nacional del Cáncer de la Argentina ha advertido que se suele creer que las mujeres menores de 50 años no tienen riesgo de tener cáncer de mama.
“Si bien es cierto que el riesgo de tener cáncer de mama aumenta con la edad (más del 70% de cánceres de mama se producen en mujeres mayores de 50 años) los tumores de mama pueden aparecer a cualquier edad. Por eso, ante la presencia de síntomas es importante consultar al médico”, aclaró el Instituto tiempo atrás.
A pesar de la recomendación, también reclamaron que se ponga en marcha más investigación sobre el desarrollo del cáncer a edades más tempranas.
“También pedimos urgentemente más investigación que nos permita basarnos en nuestras recomendaciones actuales y ayudar a todas las mujeres a vivir más tiempo y de forma más saludable”, afirmaron los expertos en un comunicado.
“En concreto, necesitamos saber cuál es la mejor manera de abordar las disparidades sanitarias en materia de tamizaje y tratamiento que sufren las mujeres negras, hispanas, latinas, asiáticas, de las islas del Pacífico, nativas americanas y nativas de Alaska”, expresaron.
Además, el panel de especialistas advirtió que se necesitan estudios que muestren cómo el tamizaje adicional con ecografía mamaria o resonancia magnética podría ayudar a las mujeres con mamas densas. También se requieres evidencias sobre los beneficios y perjuicios del tamizaje en mujeres mayores.
Informaron por qué salieron esta semana a hacer la nueva recomendación para las mamografías. “Los nuevos datos científicos, más completos, sobre el cáncer de mama en personas menores de 50 años nos han permitido ampliar nuestra recomendación anterior y animar a todas las mujeres a someterse al tamizaje a partir de los 40 años”, argumentaron.
También señalaron que “sabemos desde hace tiempo que el tamizaje del cáncer de mama salva vidas”. La ciencia apoya ahora que todas las mujeres se sometan a la mamografía, cada dos años, a partir de los 40 años.
Casi la mitad de las mujeres tienen mamas densas, resaltaron. Esa característica aumenta el riesgo de cáncer de mama y significa que las mamografías no funcionan tan bien en esas mujeres. “Por lo general, los médicos informan a las mujeres de que tienen mamas densas después de haberles hecho una mamografía”, afirmaron.
“Estas mujeres merecen saber si un tamizaje adicional podría ayudarlas a mantenerse sanas, y de qué manera. Desgraciadamente, todavía no hay pruebas suficientes para que el Grupo de Trabajo recomiende o no un tamizaje adicional con ecografía mamaria o resonancia magnética. Pedimos urgentemente que se investigue más sobre si el tamizaje adicional puede ayudar a las mujeres con mamas densas a detectar antes el cáncer, y de qué manera”,
Los expertos no recomendaron hacerse la mamografía anualmente sino cada 2 años. También justificaron esa recomendación: “Revisamos los datos científicos más sólidos disponibles sobre mamografía para analizar específicamente los beneficios y daños de las distintas estrategias de tamizaje, incluido anual o cada dos años”.
Tras una revisión exhaustiva, los últimos datos científicos siguen demostrando que, si se comparan las vidas salvadas con los daños, como el seguimiento y el tratamiento innecesarios, las mujeres se benefician más cuando el tamizaje con mamografías se realiza cada dos años.
Sostuvieron que no hay pruebas suficientes para recomendar o desaconsejar la mamografía en mujeres de 75 años o más. Las mujeres de esas edades “deberían decidir junto con sus médicos qué es lo mejor para sus necesidades sanitarias individuales, basándose en sus preferencias, valores e historias clínicas”, afirmaron.
Consultada por Infobae, la doctora en medicina Valeria Cáceres, jefa de la Unidad Oncología Clínica del Instituto “Ángel H. Roffo” y directora de la Carrera de Especialistas en Oncología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, comentó: “Está muy bien que el Grupo de Trabajo sobre Servicios Preventivos de los Estados Unidos hayan recomendado una mamografía cada dos años a partir de los 40 años para las mujeres”.
En países de América Latina, como la Argentina, “ya las sociedades médicas venían haciendo una recomendación similar. Es importante que las mujeres se hagan la mamografía. Porque hay cada vez más más casos de cáncer de mama a edades más jóvenes”, afirmó Cáceres.
En cambio, en su página web, el Ministerio de Salud de la Nación “recomienda que todas las mujeres de 50 a 69 años se realicen al menos una mamografía cada dos años junto a un examen físico de las mamas por parte de un profesional de la salud. Tanto las mujeres menores de 50 años como las mayores de 69, deben consultar con el médico acerca de la conveniencia de hacer o no una mamografía”.
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