COVID y embarazo: las mujeres no vacunadas pueden sufrir complicaciones en el parto

El coronavirus incrementa la probabilidad de nacimiento prematuro, enfermedades graves por trastornos hipertensivos, hemorragia posparto o infecciones

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La infección leve o asintomática no se asoció con mayores riesgos durante el embarazo (Getty)
La infección leve o asintomática no se asoció con mayores riesgos durante el embarazo (Getty)

Las mujeres embarazadas con COVID-19 corren un riesgo mayor aún durante un embarazo -además de los riesgos para la salud por el virus-, que aquellas mujeres gestantes sin COVID-19. Así lo sugiere un estudio del National Institutes of Health, en Reino Unido.

El estudio, que incluyó a casi 2400 embarazadas infectadas con SARS-CoV-2, encontró que las mujeres que tenían una infección de moderada a grave tenían más probabilidades de tener un parto por cesárea, un parto prematuro, morir cerca del momento del parto o sufrir enfermedades graves por trastornos hipertensivos del embarazo, hemorragia posparto o una infección distinta del SARS-CoV-2.

También tienen más probabilidades de perder el embarazo o de que el bebé muera durante el período neonatal. La infección leve o asintomática no se asoció con mayores riesgos durante el embarazo.

“Los hallazgos subrayan la necesidad de que las mujeres en edad fértil y las embarazadas se vacunen y tomen otras precauciones para no infectarse con el SARS-CoV-2″, explico Diana Bianchi, directora del NIH’s Eunice Kennedy Shriver National Institute of Child Health and Human Development (NICHD), quienes financiarón el estudio. “Esta es la mejor manera de proteger a las mujeres embarazadas y a sus bebés”.

La vacunación contra el COVID durante el embarazo ayuda a prevenir las hospitalizaciones en los bebés después de su nacimiento (Getty Images)
La vacunación contra el COVID durante el embarazo ayuda a prevenir las hospitalizaciones en los bebés después de su nacimiento (Getty Images)

El estudio incluyó a más de 13.000 embarazadas de 17 hospitales de EE. UU., aproximadamente 2400 de las cuales estaban infectadas con el SARS-CoV-2. Las participantes dieron a luz entre el 1 de marzo y el 31 de diciembre de 2020, antes de que estuviera disponible la vacunación contra el SARS-CoV-2.

Los investigadores compararon los resultados entre aquellos con COVID-19 con los de pacientes no infectados y tabularon los resultados del estudio como un resultado primario: si el paciente había muerto por cualquier causa o tenía una enfermedad o afección grave relacionada con complicaciones obstétricas comunes. También evaluaron los resultados en términos de varios resultados secundarios, incluido el parto por cesárea, el parto prematuro y la muerte fetal y neonatal.

En comparación con los pacientes no infectados, aquellos con COVID-19 de moderado a grave tenían más probabilidades de experimentar el resultado primario (26,1 frente a 9,2%). También tenían más probabilidades de dar a luz por cesárea (45,4 frente a 32,4%) o pretérmino (26,9 frente a 14,1%) o de tener una muerte fetal o neonatal (3,5 frente a 1,8%). El COVID-19 leve o asintomático no se asoció con ninguno de los resultados adversos.

las mujeres que tenían una infección de moderada a grave tenían más probabilidades de tener un parto por cesárea, un parto prematuro (REUTERS/Archivo)
las mujeres que tenían una infección de moderada a grave tenían más probabilidades de tener un parto por cesárea, un parto prematuro (REUTERS/Archivo)

Vacunar contra el coronavirus a las mujeres embarazadas podría ayudar a prevenir las hospitalizaciones en los bebés después de su nacimiento, especialmente si las futuras madres se inmunizan en una etapa avanzada del embarazo. Los investigadores creen que, a través de la placenta, se da una transferencia de anticuerpos contra el virus entre la madre embarazada y el bebé.

Otro estudio nos muestra la importancia de vacunarse durante el embarazo. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos realizaron un estudio con bebés de hasta seis meses hospitalizados entre julio de 2021 y enero de 2022.

El estudio analizó los datos de 379 bebés hospitalizados: 176 con COVID-19 y 203 que ingresaron por otros problemas. Descubrió que las vacunas contra el COVID-19 eran un 61% eficaces en general para prevenir las hospitalizaciones en los niños cuyas madres fueron inmunizadas durante el embarazo.

Esa protección aumentó al 80% cuando las madres fueron vacunadas entre las 21 semanas y los 14 días antes del parto. Esto parece coherente con el hecho de que los niveles de anticuerpos disminuyen en los meses posteriores a las inyecciones.

La eficacia se redujo al 32% en el caso de los bebés cuyas madres fueron inmunizadas en la primera parte del embarazo. La madre del único bebé que murió durante el estudio no estaba vacunada.

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