Dolores de espalda y problemas de postura: cuáles son las consecuencias de tener senos muy grandes

Detrás de un pecho voluminoso hay mucho más que la posibilidad de lucir un escote envidiable. Especialistas advierten que el exceso de peso en las glándulas mamarias modifica la biomecánica en general y puede producir un desequilibrio en el eje del cuerpo. Ejercicios para fortalecer la musculatura y contrarrestar los efectos

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El peso de los senos grandes puede generar dolores y deformidades de la columna (Getty)
El peso de los senos grandes puede generar dolores y deformidades de la columna (Getty)

El tamaño de los senos suele ser un motivo de "preocupación" entre las mujeres. Que si son chicos no se luce la ropa o no es lo suficientemente sexy, si son grandes pueden ser motivo de vergüenza o complejo en la adolescencia. Pero si son muy grandes, ya puede afectar la salud lumbar, aunque muy pocas personas lo sepan.

Pero sí. "El peso de los senos grandes genera dolores, deformidades de la columna, dolores de espalda severos, lumbalgia, encorvamientos, escoliosis y otras patologías, todas asociadas al peso de las mamas". La afirmación corresponde al quiropráctico Marcelo Barroso Griffiths (matrícula 9784), quien enfatizó que "además, el excesivo peso de los senos puede producir un desequilibrio en el cuerpo, produciendo que el eje del peso esté echado hacia adelante, lo que provoca que la musculatura del cuello y la espalda se activen más, para mantener la postura, generándose una exagerada curva posterior, conocida como cifosis".

El peso de los senos grandes genera dolores, deformidades de la columna, dolores de espalda severos, lumbalgia, encorvamientos, escoliosis y otras patologías

Por otra parte, el experto resaltó que esta problemática está íntimamente relacionada con la obesidad. "Esto se debe a que toda la alteración postural trae aparejada alteraciones funcionales, como una disminución de la entrada y salida de aire con reducción de los volúmenes de oxígeno, generando así una fatiga general", señaló Barroso Griffiths, para quien "debido al cansancio, se deja de hacer actividad física, la columna se pone rígida y como consecuencia se aumenta de peso, causando lo que se conoce como hipertrofia mamaria".

Lo que se tiene que tener claro es que la causa de los dolores -según el especialista- "no es el mero tamaño, sino la tendencia a tirar de la espalda y hundir la zona cervical".

"Todo lo que signifique un peso o un sobrepeso a la altura de la espalda, de la columna dorsal, tanto sea anterior como posterior, así sea porque tenga un busto grande o por llevar una mochila pesada, va a generar una sobrecarga en la estructura en sí, porque hay todo un proceso de adaptación del mecanismo que tiene que hacer la columna vertebral para soportar el exagerado peso -amplió-. En las etapas de desarrollo como en el caso del busto de las adolescentes, se va generando una postura que se conoce como cifosis; se trata de una curvatura anormal, una desviación de la de la columna vertebral".

Este padecimiento se inicia frecuentemente en la pubertad, cuando los cambios físicos empiezan a hacerse evidentes (Getty)
Este padecimiento se inicia frecuentemente en la pubertad, cuando los cambios físicos empiezan a hacerse evidentes (Getty)

"Las mujeres con el pecho grande a menudo sufren complejos y rechazo hacia su propio cuerpo. Este padecimiento se inicia frecuentemente en la pubertad, cuando los cambios físicos empiezan a hacerse evidentes a la vista de todos y las niñas son objeto de burla", destacó Barroso Griffiths, y agregó: "El proceso de adaptación no debería llegar a mayores, pero en ocasiones estas situaciones se mantienen y de por vida y determinan una modificación en la biomecánica. Si a esto lo asociamos con que los bancos son bajos, esto hace que tengan que encorvar la espalda aun más y termina fijando una posición defectuosa".

Esto trae en resultado, el adelantamiento de los hombros y como consecuencia un cierre de la caja torácica del pecho. "Por lo tanto tenemos -profundizó el especialista- un busto exagerado, una caja torácica que se cierra y como consecuencia menos volumen de oxígeno (los pulmones se ven comprimidos, cerrados) y esto trae como consecuencia que a la forma afectada la curva de la columna, una cuestión funcional que tiene que ver con una marcada disminución de los volúmenes de oxígeno. Por lo tanto los pacientes se cansan, tienen un mal descanso, que afecta no solo la postura, sino también la salud mental".

La alteración postural trae aparejada alteraciones funcionales, como una disminución de la entrada y salida de aire con reducción de los volúmenes de oxígeno

Algunos ejercicios recomendados para contrarrestar la cifosis dorsal, así como para fortalecer la musculatura y poder soportar mejor el peso de unos pechos grandes, pueden ser:

Natación

Es el deporte más aconsejable para reforzar, ante todo la zona dorsal, dado que es la que soporta la mayor parte del peso de los pechos. El estilo más indicado es de espalda, para intentar abrir la cavidad torácica.

Potenciar pectorales

El ejercicio ideal son las flexiones de pecho que pueden comenzar a hacerse de pie frente a una pared, después en el suelo pero apoyando las rodillas y, finalmente, en el suelo sobre la punta de los pies.

La causa de los dolores no es el mero tamaño, sino la tendencia a tirar de la espalda y hundir la zona cervical (Getty)
La causa de los dolores no es el mero tamaño, sino la tendencia a tirar de la espalda y hundir la zona cervical (Getty)

Stretching

Tomar clases de stretching y estiramiento tiene el consabido beneficio del estiramiento en sí mismo. Un músculo estirado está más relajado, con mejor potencia, elasticidad y como consecuencia la postura también mejora.

Yoga

Es la actividad generalmente sugerida para cuidar la columna, por todos los beneficios que genera en la postura, la respiración y facilita movimiento articular.

Caminatas

El peso de los pechos puede tender a encorvar la espalda y favorecer una mala posición al caminar. Para evitar estos problemas, lo ideal es mantener la espalda erguida y así permitir que tenga la suficiente fuerza en su musculatura para soportar el peso de los senos.

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