Vigor sexual es sinónimo de masculinidad, de hombría. Así al menos lo perciben los integrantes del sexo masculino que, por cuestiones relacionadas a la edad, la salud y muchas veces el estrés y las presiones de la vida diaria, ven afectado su "rendimiento" en la intimidad.
Asimismo, la prolongación de la expectativa de vida, de la mano con la promoción de hábitos saludables, llevó a que un hombre que antes era considerado "mayor" hoy se sienta joven y quiera mantener su energía sexual.
"El cuidado del cuerpo con dietas o ejercicio, así como el estar atento a la moda y a temas de actualidad, ayuda a que los hombres se sientan rejuvenecidos, aunque eso no es garantía de vigor sexual -analizó el médico psiquiatra y sexólogo Walter Ghedin-. Llevar en el bolsillo 'la pastillita azul' es un pasaporte de éxito cuando el varón está convencido de que esta ayuda externa mitiga la preocupación de 'fallar'".
Recuperar la erección cuando se perdió es motivo suficiente para que muchos varones se auto mediquen con citrato de sildenafil o sus derivados
El especialista consideró que "ellos saben que mientras el fármaco actúe su cabeza no estará librando la batalla entre 'podré o no podré' y muchos hombres maduros recurren a la pastillita azul como reaseguro de confianza".
En estos varones, el mito de que la erección es privativa del adulto joven, actúa como un factor predictivo de la impotencia. "Los sexólogos sabemos del poder que ejercen los mitos o creencias erróneas en la construcción de una idea inhibitoria. Para los hombres, ver, tocar, y sentir el pene erecto, será fuente de estima y seguridad personal", aseguró Ghedin, quien remarcó que "no importa si se logra naturalmente, o con la ayuda de un fármaco; recuperar la erección cuando se perdió (basta con un único, o unos pocos episodios de falta de erección) es motivo suficiente para que muchos varones se auto mediquen con citrato de sildenafil o sus derivados, sin pasar por la evaluación médica necesaria".
Y tras destacar que "la falta de erección puede ser un síntoma de una enfermedad vascular, que diagnosticada a tiempo, puede evitar complicaciones mayores", el especialista ahondó en que "en la actualidad se demostró el estrecho vínculo que existe entre la disfunción eréctil (DE) y la Disfunción endotelial (DEnd), considerándose a la DE como síntoma centinela de una probable enfermedad cardiovascular".
"Hoy sabemos que los factores de riesgo más importantes a tener en cuenta son la diabetes, el aumento de la presión arterial, el tabaquismo, la obesidad, el sedentarismo -explicó-. Y todos, y cada uno de ellos, son coadyuvantes en la producción de patologías del endotelio. La DE es una enfermedad que aumenta con la edad, observándose en aproximadamente un 50% de hombres entre los 40 y 70 años".
La falta de erección puede ser un síntoma de una enfermedad vascular, que, diagnosticada a tiempo, puede evitar complicaciones mayores
Y profundizó: "Si un hombre comienza con DE una de las posibles causas a evaluar es la disminución de la irrigación sanguínea en los cuerpos cavernosos del pene por aterosclerosis, lo cual sugiere que si esto sucede en el pene, podría estar afectando también otras arterias corporales, sobre todo las coronarias. Por lo tanto la pérdida de la erección podría ser el primer síntoma de una enfermedad cardíaca, que detectada a tiempo, podría evitar un infarto agudo de miocardio. La asociación, comprobada científicamente, entre ambas patologías obliga a los médicos a actuar en forma preventiva cuando un paciente consulta por DE, sobre todo si existen factores de riesgo. La realización de pruebas de laboratorio (glucemia, dosaje de insulina, hemoglobina glicosilada, colesterolemia total, HDL, LDL, triglicéridos) es indispensable, además de solicitar estudios cardiológicos específicos".
En ese sentido, Ghedin enumeró a Infobae cinco ítems que deben tenerse en cuenta antes de consumir este tipo de fármacos para tratar la disfunción eréctil.
1- Consultar al médico si el paciente está tomando drogas para bajar la presión arterial (ya que el sildenafilo interacciona con derivados de nitritos o nitratos) o presenta alguna enfermedad cardíaca subyacente (arritmias, infarto de miocardio, aumento de tamaño de corazón). "No se sabe si el esfuerzo físico del acto sexual puede provocar efectos graves en aquellos pacientes con enfermedad cardíaca previa o el sildenafil potencia el riesgo. Aún así, los efectos adversos comprobados ocurren cuando se usa el sildenafil (o sus derivados) junto a otros fármacos usados en el tratamiento de la hipertensión pudiendo ocasionar mareos, desmayos, etc., al bajar la presión arterial", explicó.
La DE es una enfermedad que aumenta con la edad, observándose en aproximadamente un 50 % de hombres entre los 40 y 70 años
2- No consumir el fármaco después de comer alimentos muy calóricos (con grasa) porque se retarda la absorción, la comida tiene que ser frugal.
3- No consumir con alcohol. Puede potenciar la hipotensión. "Tampoco se recomienda injerir en simultáneo con drogas de abuso ni con sustancias usadas para aumentar la excitación sexual (poppers)", sentenció Ghedin. .
4- Algunos efectos colaterales frecuentes que deben conocerse son calor y rubicundez (enrojecimiento) de la cara, cefaleas, mareos leves, visión borrosa, congestión nasal. "En pacientes por encima de los 65 años se debe reducir la dosis de inicio a la mitad", recomendó el experto.
5- El viagra no actúa sobre el deseo sexual, precisa del deseo para ejercer su acción vasodilatadora.
Finalmente agregó que "la frecuencia de uso no debe superar un comprimido al día, y siempre consumirse con prescripción médica".
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