La realidad es que los efectos nocivos de los rayos solares han llegado a tal punto que en la actualidad -para muchos- tomar sol dejó de ser una opción en pos de una vida más saludable. Predominan como tendencia las pieles pálidas o con bronceado ligero donde la característica más importante es la prevención.
Incluso cuando Febo parece no gozar por estos días de muy buena prensa, los especialistas insisten en que una exposición responsable puede resultar tan beneficiosa como recomendable. De esta manera es fundamental realizar rutinas previas para fortalecer las células antes de la llegada del verano.
La médica especialista en dermatología Lilian Demarchi comentó a Infobae cuáles son los recaudos a tener en cuenta ante los primeros rayos del sol: "Las mujeres tienden a ser más conscientes, sin embargo los hombres son una población de mayor riesgo debido a que realizan tareas al aire libre, ellos están más lejos de la prevención".
Por otra parte, la especialista en cuidado de belleza y piel María Grebol dijo a Infobae que durante esta época del año el rostro debe ser una de las zonas donde poner el foco. "Los labios y el contorno de ojos son los sectores más sensibles".
-Exfoliación suave: las especialistas recomendaron la aplicación casera de través de productos naturales con acción biolófica para eliminar la capa de células muertas, con "emulsiones en base a cítricos o semillas, son ideales para limpiar toda la zona", agregó Grebol.
Por otra parte, la dermatóloga Demarchi sugirió realizar esta rutina no más de dos veces a la semana. Aunque evaluando el caso de cada paciente, también se puede realizar un procedimiento más agresivo en un gabinete especializado.
Durante estos meses resulta contraproducente realizar tratamientos para disimular manchas y marcas, el láser, la depilación definitiva, el ácido retinoico y la luz pulsada intensa. Son métodos fotosensibilizantes que pueden tener efectos no deseados, como por ejemplo la aparición de manchas.
-Hidratación constante: una vez libre de impurezas, el segundo paso a seguir es la nutrición diaria. "El sol tiende a secar la piel y abrir los poros cutáneos quitándole lozanía", dijo Demarchi.
Para lograr un resultado óptimo sugirió aplicar a la mañana cremas con alto contenido nutritivo, pero bajas en oleosidad. Por la noche también repetir este ritual y optar por emulsiones que contengan compuestos químicos como el ácido mandélico para mantener una epidermis con mayor elasticidad y firmeza.
Para la zona específica del rostro, "las emulsiones humectantes con manteca de karité o con áloe vera" poseen propiedades reparadoras son ideales para estos sectores que requieren aumentar el cuidado. A su vez, Grebol destacó la aplicación de ampollas de zanahoria o con colágeno y elastina.
-Protección a toda hora: la exposición sin cuidado acelera el proceso de fotoenvejecimiento; en este sentido Demarchi señaló que "hay que usar protección todo el año, ya que es el mejor antiage en invierno, primavera y verano".
Las especialistas coinciden en que es importante elegir la crema y el índice de protección solar adecuado al tipo de piel. Cuanto más clara es la piel de la persona, mayor es el factor de protección que necesita.
Es importante aplicar el producto 30 minutos antes de salir a la calle, y también en la oficina ya que las luces y la pantalla de la computadora emiten rayos. "Las BB creams son una manera práctica de resolver los tres problemas femeninos ya que hidratan, maquillan y protegen el rostro", dijo Demarchi.
Los labios son la zona más sensible del rostro, debido a que "tienen 5 capas menos de piel" y de esta manera es fundamental reforzar con un bloqueador solar para evitar la deshidratación, agregó Grebol. Otra de las zonas vulnerables y que requieren mayor prevención son: el contorno de ojos, cuello, escote y manos.
-Alimentación rica en betacarotena: son el bronceador orgánico natural. Los alimentos que poseen vitaminas A, E Y C favorecen además las defensas de la piel. Actúan como antioxidante y evitan el envejecimiento de las células de nuestro organismo. Este pigmento natural se puede encontrar en las verduras de hojas verdes como: berro, acelga, espinaca y coles de Bruselas.
div>Cómo la alimentación puede mejorar la piel, por @mariaapilarrhttps://t.co/hmySl3tQgD pic.twitter.com/xpEx4LK9nL
— Tendencias (@InfobaeTrends) 15 de agosto de 2016
En las frutas destacan: duraznos, el mango, melones, frambuesa, arándano, níspero, sandía, uvas, guayaba, papaya, naranja, mandarina.
Por otra parte, las hierbas y plantas más ricas en betacarotenos son: té verde, hinojo, menta, cilantro, perejil, ortiga, diente de león, estragón, mejorana, cola de caballo, cardo mariano, orégano, ajedrea, escaramujo e hibisco.
-Exposición gradual: con la incipiente llegada de la primavera, acostumbrar de manera paulatina a los rayos solares es un opción saludable. Hasta 40 minutos expuestos al sol es la cantidad justa para no sufrir mayores riesgos.