Un nuevo capítulo en la producción arrocera de Santa Fe

Una nueva variedad de arroz santafesino destaca por su rendimiento, resistencia y calidad excepcionales

Una nueva variedad de arroz santafesino destaca por su rendimiento, resistencia y calidad excepcionales

La agricultura santafesina celebra un hito con la presentación de una variedad de arroz que promete revolucionar la producción local. Timbó SF, un arroz tipo largo fino de ciclo intermedio, ha sido desarrollado en el Centro Operativo Experimental de San Javier y busca responder a las demandas de un mercado cada vez más exigente, al tiempo que optimiza la producción en los campos del litoral argentino.

Durante el acto oficial, encabezado por el ministro de Desarrollo Productivo, Gustavo Puccini, se anunciaron dos avances clave: la inscripción del nuevo cultivar ante el Instituto Nacional de Semillas (Inase) y la consolidación formal de la Mesa Provincial de Arroz, un espacio que reúne a productores, técnicos del INTA, legisladores y gobiernos locales.

“El Timbó SF es la cuarta variedad de arroz creada en Santa Fe. Estas iniciativas son esenciales para mejorar la competitividad del sector, fortalecer la cadena productiva y agregar valor en la región”, afirmó Puccini. El secretario de Agricultura y Ganadería, Ignacio Mántaras, destacó que esta variedad es un símbolo del potencial productivo de la región costera, donde los suelos y la cercanía al río ofrecen condiciones ideales para el cultivo del cereal.

El Timbó SF es la cuarta variedad de arroz creada en Santa Fe

Timbó SF: innovación con raíces santafesinas

Este nuevo cultivar, desarrollado por el equipo liderado por el ingeniero Rodolfo Vicino, presenta características que lo destacan en el mercado. Con un excelente vigor inicial, resistencia al vuelco y alto potencial de rendimiento, el Timbó SF está adaptado a las condiciones de Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes y Chaco. Además, soporta herbicidas del grupo de las Imidazolinonas, lo que facilita su manejo y asegura su viabilidad en campos de mediana a baja aptitud.

Con esta apuesta, Santa Fe no solo reafirma su compromiso con la innovación agrícola, sino que también resalta la importancia de contar con cultivares que respondan a los desafíos específicos de cada región, mejorando tanto la calidad del grano como la sostenibilidad del sistema productivo.

¿Cuántas variedades hay de arroz?

El arroz es la semilla de la planta Oryza sativa (arroz asiático o simplemente arroz) o de Oryza glaberrima (arroz africano). Aunque existen solo dos subespecies principales de Oryza sativa —índica y japónica— dentro de cada subespecie hay una enorme diversidad genética. Esta diversidad se genera a través de:

  • Selección natural y adaptación local: en diferentes regiones del mundo, las poblaciones de arroz evolucionaron para adaptarse a condiciones ambientales específicas (suelo, temperatura, altitud, disponibilidad de agua). Esto dio lugar a variedades locales con características únicas.
  • Mejoramiento genético y cruces: los agricultores y científicos han trabajado durante milenios seleccionando plantas con rasgos deseables, como resistencia a enfermedades, mayor productividad o sabor mejorado. Esto ha llevado al desarrollo de miles de variedades adaptadas a diferentes necesidades.
  • Híbridos y nuevas técnicas: en los últimos siglos, se han desarrollado híbridos y variedades mediante cruzamientos específicos, técnicas modernas de genética y biotecnología, lo que ha acelerado la generación de nuevas variedades.
  • Diversidad fenotípica y de uso: algunas variedades se diferencian por características como el tamaño y la forma del grano, el contenido de amilosa, la textura, el color (arroz rojo, negro, morado), la tolerancia a inundaciones o sequías, y el tiempo de maduración. Cada uso culinario, industrial o agrícola requiere variedades diferentes.

Alimento básico en gran parte del mundo, este cultivo versátil se adapta a múltiples usos culinarios. Desde el clásico largo fino, muy popular en América Latina, hasta variedades más específicas como el basmati, el arborio o el arroz negro, cada tipo aporta características únicas que enriquecen las gastronomías regionales.

Entre los más consumidos destacan:

  • Largo fino: granos delgados que permanecen sueltos al cocinarse, ideales para platos tradicionales y guarniciones.
  • Corto o redondo: de textura más pegajosa, es la base de platos como sushi, paellas o postres.
  • Arborio y carnaroli: de granos ricos en almidón, perfectos para lograr la cremosidad del risotto.
  • Integral: rico en fibra y nutrientes, es una opción saludable para dietas equilibradas.
  • Negro y rojo: valorados por sus antioxidantes y sabores intensos, se están posicionando en la alta cocina.

Argentina, como productor de 1,6 millones de toneladas anuales, ha logrado incrementar su producción en un 121% en la última década. El 55% de sus exportaciones de arroz tienen como destino a Brasil, seguido por mercados como Chile, Irán, España y Haití.

Innovación para un futuro sostenible

El Timbó SF no solo enriquece el abanico de variedades disponibles, sino que se posiciona como una herramienta clave para afrontar las condiciones específicas del litoral argentino. En un contexto donde la adaptabilidad y la sostenibilidad son determinantes, este nuevo cultivar representa un avance que no solo beneficia a los productores, sino también al consumidor final, quien encuentra en cada grano un reflejo de la calidad y el compromiso del agro santafesino.

Con esta innovación, Santa Fe reafirma su lugar como pionera en la producción arrocera, destacando la importancia de integrar ciencia, tradición y sostenibilidad en el campo.