En la búsqueda de garantizar la calidad de los productos pesqueros, un innovador proyecto se propone utilizar inteligencia artificial para detectar parásitos en la merluza y otros pescados. Este esfuerzo, llevado a cabo por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) junto a la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), busca modernizar y agilizar los controles en una industria clave para el país.
Innovación en control sanitario
Los parásitos en pescados, especialmente los nematodos del género Anisakis y Pseudoterranova, representan un riesgo significativo para la salud humana. Estos parásitos pueden encontrarse en especies como la merluza y, aunque suelen eliminarse en el procesamiento, aún se detectan en algunos productos. La IA permitirá agilizar los controles, facilitando la identificación temprana y segura de estas amenazas sin necesidad de una revisión manual exhaustiva, que es un proceso lento y costoso.
Para el desarrollo de esta herramienta, ya se analizaron más de 1.500 imágenes de filetes de merluza. Estas imágenes permiten entrenar el algoritmo, que podrá identificar la presencia o ausencia de parásitos en cada muestra con alta precisión. Además, el sistema tiene el potencial de detectar patrones de aparición de parásitos, ofreciendo una ventaja para predecir situaciones de riesgo en función de la procedencia del pescado. La tecnología busca estar disponible para fines de 2024, de modo que tanto Senasa como las empresas del sector pesquero puedan utilizarla para mejorar sus controles, asegurando la calidad de cada pieza.
Una herramienta clave para la industria
Mar del Plata, que concentra cerca del 49% de las capturas de pesca del país, podría ser una de las primeras beneficiadas con esta tecnología. La inteligencia artificial facilitará la inspección de grandes volúmenes de pescado, permitiendo a las empresas locales reducir tiempos y costos de control, mejorando la competitividad y seguridad de sus productos en el mercado nacional e internacional. Esta innovación responde a una necesidad urgente de agilizar los procesos sin comprometer la calidad, brindando productos más confiables y seguros para el consumidor.
Potencial para impulsar el consumo de pescado
En Argentina, el consumo de pescado es bajo comparado con otros países de la región: apenas entre cinco y siete kilos per cápita al año, según la FAO. Con la implementación de esta tecnología, se espera aumentar la confianza del consumidor, impulsando la inclusión de pescado en la dieta cotidiana, un alimento rico en proteínas, grasas saludables y nutrientes esenciales. La IA representa un avance hacia una industria pesquera más transparente y confiable.
Este sistema marca un antes y un después en el control de calidad de los productos pesqueros en Argentina. A medida que la IA se consolide en la industria, el país podría asegurar una oferta más confiable y libre de riesgos, promoviendo así un crecimiento sostenible del consumo de productos del mar y beneficiando a todos los actores de esta cadena productiva.