La última medición del Índice de Confianza del Productor Argentino “Ag Barometer Austral”, que elabora el Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, revela que, por la incertidumbre económica, el 65% de los productores no piensa invertir en activos fijos en los próximos 12 meses. Otros factores que se suman al poco incentivo en inversiones para el campo son la falta de financiamiento, o alto costo del mismo.
“A pesar de la significativa baja de la inflación y la estabilidad cambiaria, los productores en su mayoría piensan que aún no es momento para realizar inversiones en activos fijos y, por lo tanto, uno de los componentes de la Demanda Agregada (Inversión), no hará grandes aportes a la reactivación de la actividad económica, el gran desafío que enfrenta el gobierno”, detalla el informe.
La incertidumbre macroeconómica (20%), la falta de financiamiento (20 %), el alto costo del mismo (16 %), la falta de alternativas rentables de inversión (14 %) y la falta de confianza en el futuro del sector (12%) son las principales causas de las decisiones de no invertir durante los próximos 12 meses.
En ese contexto, Carlos Steiger, investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos y director de la encuesta, puntualizó que “si bien han bajado significativamente las tasas de interés activas en el sistema financiero bancario y están apareciendo créditos en dólares, la baja rentabilidad esperada para la campaña 2024/25 -en parte por los bajos precios internacionales- y la certeza que no habrá cambios en los derechos de exportación, hacen que las inversiones productivas estén desalentadas”.
Del 35% de los productores que realizarán inversiones, la gran mayoría lo hará de forma individual (29%) y los rubros elegidos son: maquinarias grandes (42%), hacienda vacuna (33% y principalmente de cría), tierra (23% porque los valores están relativamente bajos) y otras maquinarias (20% en sembradoras y pulverizadoras, entre otras).
Al mismo tiempo, la campaña 2024/25 se está desarrollando en condiciones climáticas más desfavorables que las transcurridas durante la campaña 2023/24, y un 55 % de los productores temen la presencia de problemas climáticos importantes. Otro de los datos que llaman la atención de la encuesta es que más de la mitad de los productores agropecuarios (51%) realiza sus actividades en campos arrendados, y la gran mayoría se pagan en una suma fija en quintales, aunque con distintos momentos de pago. Para el 76 % de los productores el pago de los arrendamientos representa el 40 % o más de sus costos totales, mientras que para un 48 % la incidencia es del 50 % o más.
El índice de confianza del campo cayó 5%
El Índice de Confianza del Productor Argentino “Ag Barometer Austral” marcó una caída del 5% durante septiembre de 2024, con relación a la medición pasada, siendo la primera baja que se registra desde noviembre 2022. Si se considera el Índice de Expectativas Futuras, se observa un descenso de 6%.
“Entre las causas de esta caída hay que mencionar, en primer lugar, la baja de los precios futuros de la soja en la posición para mayo 2025 producto de la gran oferta esperada de la campaña 2024/25, y un importante incremento en la relación stock/consumo a nivel mundial para la oleaginosa. En paralelo, en nuestro país se espera un incremento en la superficie sembrada de soja para la campaña 2024/25, que ocupará el área que no se implantará con maíz”, detalla el informe. Steiger agrega que, por lo señalado, “los productores esperan una campaña agrícola 2024/25 con márgenes muy ajustados, fundamentalmente para la soja”. De no mediar factores climáticos adversos, el “Ag Barometer Austral” pronostica que la producción total de granos del ciclo 2024/25 sería de 130 millones de toneladas, aunque con precios más bajos que en la campaña 2023/24, especialmente en soja.