El procesamiento de soja crecería 44% este año

Para 2024 se prevé un crecimiento en la producción de soja, y el segundo mayor volumen de importación de la oleaginosa del que se tiene registro, reduciendo la capacidad ociosa de la industria aceitera del 54% al 36%

Un estudio de la Bolsa de Comercio de Rosario prevé que el procesamiento de soja en 2024 registrará un crecimiento del 37%, tras haber tocado su mínimo en más de 20 años (BCR)

El procesamiento de oleaginosas registraría en 2024 un crecimiento del 37%, tras haber registrado el menor crush en más de 20 años. En el caso de la soja, el procesamiento crecería un 44%, mientras que en el de girasol cerraría el año un 12% por debajo del 2023, según puntualiza un informe elaborado por los especialistas de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), Guido D’Angelo, Emilce Terré y Julio Calzada.

El mismo destaca que de cumplirse esta previsión, la capacidad ociosa de la industria aceitera argentina pasaría del récord de 54% registrado en 2023 como consecuencia de la sequía, al 36% este año.

En 2023 la industria de molienda de oleaginosas trabajó a menos de la mitad de su capacidad, lo que no sólo implicó la mayor capacidad no utilizada de la industria aceitera en su historia, sino que superó por más de 11 puntos al mayor nivel de subutilización previo, del 43% en el año 2020.

La BCR estima que este año se registrará el segundo mayor volumen histórico de importaciones de soja, logrando que 2024 cierre con más de 42 millones de toneladas procesadas (Revista Chacra)

La peor sequía de los últimos sesenta años impactó fuertemente en la cosecha de soja 2022/23, lo que llevó al crush de la oleaginosa a su menor nivel en 22 años en 2023, marcando una caída del 29% respecto al año 2022. Esta fue también la mayor baja relativa de la industria aceitera, superior a la merma del 19% en otro complicado para el campo: 2018, señala el informe de la BCR. Agrega que “si en lugar de tomar años midiéramos el procesamiento por campañas comerciales (abril-marzo), la merma se recorta al 21% comparando 2022/23 con 2021/22″.

No obstante, el recorte del crush en Argentina hubiera sido notablemente mayor en 2023 de no haber mediado un histórico volumen de importaciones de soja (principalmente desde Paraguay y Brasil), que pasó de 3,3 a más de 10 millones de tonelada. Sin estas compras externas, la capacidad ociosa de la industria aceitera argentina hubiera ascendido al 69% de la capacidad instalada, subraya el informe de la BCR. A ello debe sumarse el incremento productivo de la campaña 2022/23 de girasol que, desafiando la sequía, fue la más alta desde 1999/2000, lo que generó el mayor procesamiento de este cultivo más en la década y el segundo más alto en 20 años.

Los analistas de la BCR prevén que la recuperación productiva, así como la previsión de que este año se registrará el segundo mayor volumen histórico de importaciones de soja lograrán que, el 2024 cierre con más de 42 millones de toneladas procesadas (37% más que en 2023), reduciendo la capacidad ociosa de la industria aceitera del 54% del año pasado al 36%.