La información disponible indica que los mercados mundiales de urea se han debilitado, ya que los compradores clave muestran escasa predisposición a concretar adquisiciones. Es difícil decir cuánto durará la quietud, ya que por otro lado las exportaciones chinas de urea se desplomaron un 86 % en el primer semestre de 2024, a medida que los esfuerzos de Beijing por controlar los precios internos restringen la oferta hacia el resto del planeta. El mayor productor de urea del mundo podría estar alejándose de la exportación del fertilizante.
Por cierto, el mercado mundial de la urea está experimentando otra transformación, y la India, que alguna vez fue un importador dominante, está mostrando sus atributos como productor de esta fuente nitrogenada. Este cambio estratégico, impulsado por un aumento de la producción nacional, está rediseñando el mapa del comercio de urea, a decir de los especialistas. Podría implicar un menor precio para este insumo.
En la otra vereda, el mercado mundial de DAP se mantiene firme apoyado por la falta de oferta de exportación por parte de China, y los impulsos de compra de Pakistán y Bangladesh, según consigna el reporte de IF. La escasez de oferta para la exportación de DAP chino hizo subir los precios hasta USD 575-585 FOB (+5). En este contexto, se espera que los compradores indios entren al mercado para asegurarse el abastecimiento.
¿Y Sudamérica? Los números de la soja en Brasil no son los más alentadores y juegan en la inversión y la compra de insumos de cara a la campaña 2024/25, a dos meses de su inicio. Esta semana los compradores del vecino país se mostraron más cautelosos a la hora de convalidar MAP en niveles de USD 640 CFR, debido la debilidad de los precios de la oleaginosa. La liquidez se encontró finalmente en USD 635 CFR para el producto ruso. Se espera que los importadores de Brasil continúen en el mercado por las próximas semanas.
En el caso particular de la Argentina, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) consigna que las importaciones de fertilizantes aumentaron un 70 % en los primeros cinco meses de 2024 en relación al año anterior. En el mismo lapso, los nitrogenados lideraron la movida, y sus importaciones se duplicaron con creces (+108 %). Para tomar dimensión, el 67% del consumo de fertilizantes de la Argentina provino de importaciones en el período 2018-2023. La BCR atribuye el incremento de las importaciones de este insumo a las perspectivas de recuperación productiva y la anunciada normalización de los pagos de importaciones.
Así como la urea lidera la importación de fertilizantes nitrogenados, entre los fosfatados mandan el monoamónico o MAP y el diamónico o DAP. Las importaciones de este grupo crecieron un 38% de enero a mayo de este año respecto al mismo período de 2023. Entre fosfatados y nitrogenados se explica más del 91% del volumen de importaciones de este año, lo cual tiene correlato con su utilización. De acuerdo con datos de Fertilizar y CIAFA, el 93% del consumo de fertilizantes en nuestro país se explica entre estos dos grupos. A los precios actuales de mercado, las importaciones de fertilizantes totalizarían más de USD 2.100 millones durante este año, un 55% más que el año pasado.
Pero la movida ha ido del vértigo a la cautela. Se habla de un mercado con menor actividad en las últimas semanas frente a los posibles cambios en el impuesto PAIS. Se espera que este gravamen sobre las transacciones de divisas se reduzca del 17,5% al 7,5% en septiembre, pero aún no se confirma una fecha oficial. Esta incertidumbre está provocando que los importadores de fertilizantes retrasen ahora las decisiones comerciales.
Hasta que la baja de impuestos no se haga efectiva, se espera una demanda de fertilizantes con pies de plomo. Otro inconveniente radica en que todavía hay stocks comprados para la actual cosecha fina que pagaron el 17,5%. El impacto de la rebaja anunciada tendrá efecto recién cuando se comercialicen estas existencias.
De todas maneras la postura hasta acá de los productores es un bálsamo luego de dos años seguidos de caída de consumo de fertilizantes en el país. En su reporte, IF considera que dadas las importaciones realizadas hay volumen suficiente para encarar el inicio de la temporada gruesa, a pesar de las dificultades comentadas.