Gastón Edul con María Laura Santillán: “Hay química con Nati Jota, es en serio”

El chico más serio del periodismo deportivo y el ida y vuelta en vivo cada vez más picante. Por qué todavía no la invito a salir. Cómo la presión de la gente aleja la posibilidad de un encuentro a solas. El más mamero: por qué cada vez que tiene un minuto se lo dedica a su mamá y dice que es su gran compañera. El deseo de tener hijos y la claustrofobia

Guardar

Nuevo

María Laura Santillán Con Gastón Edul

Las reglas básicas del periodismo audiovisual no están de moda por estas horas. Contar los hechos, qué pasó, dónde, cuándo y cómo pasó antes de opinar sobre lo que pasó, no es lo que se lleva. Gastón es periodista deportivo, lo conocimos todos los argentinos en el Mundial de fútbol y quedó inmortalizado en un momento único de Messi: “Anda pa’ allá, bobo”. Antes que nada él es cronista, cuenta la información, lo que es importante saber, ni lo accesorio ni lo incomprobable. Ése es hoy su gran mérito en tiempos de comunicación contaminada: ser profesional.

– El periodismo sigue funcionando de la misma manera que siempre. Ahora usamos diferentes lenguajes, estamos en otras plataformas, pero las reglas básicas son el lugar donde me siento más cómodo, haciendo periodismo.

– La gente te quiere mucho. Por los reportajes, por la información, pero también seguramente por tu actitud profesional, por nunca intentar ser el protagonista. ¿Vos qué creés?

– Es que no hay que sobrepasarse. Muchos creen que es un buen atajo querer tomar protagonismo en esos momentos, pero si uno está tranquilo, si te ponés en el lugar que tenés que estar y no te sobrepasás a la larga es más redituable y la gente te va a acompañar.

– ¿Ése es el secreto?

– Sí, absolutamente. Después uno tiene momentos donde puede tener otro protagonismo. Me estás entrevistando, para mí es un placer, un honor, voy a hablar un poco más de mí. Pero ese momento no es mi lugar, tenés que preguntar.

– Debe ser complejo estar cerca de la Selección argentina y tener que disimular las emociones en algunos momentos. Porque además tenés amigos en la selección

– Sí, uno termina haciendo amigos con tantos viajes porque son compañeros de laburo. Como sé que ese momento va a quedar para siempre quiero estar lo más centrado posible. Obviamente no soy un robot porque como periodista uno tiene que mostrarle al televidente lo que está sintiendo, algo de emoción. No quiero pasarme de rosca con eso, pero tenés que estar concentrado.

– No se ven tus emociones. Cuando hiciste el antimufa en el partido de la selección contra Colombia en la Copa América eras un tipo muy serio enunciando la cábala.

– Seguro, además era un dato que había que repetir.

– “Cinco goles de pelota parada”.

– “Cinco goles de pelota parada” porque Colombia había hecho muchos goles de pelota parada y todos creían que podía ser la vía por la que le iba a hacer un gol a Argentina. Por suerte no pasó.

"Obviamente no soy un robot, porque como periodista uno tiene que mostrarle al televidente lo que está sintiendo, algo de emoción. No quiero pasarme de rosca con eso, pero tenés que estar concentrado", expresó Gastón Edul (Fotos de Candela Teicheira y Gustavo Gavotti)
"Obviamente no soy un robot, porque como periodista uno tiene que mostrarle al televidente lo que está sintiendo, algo de emoción. No quiero pasarme de rosca con eso, pero tenés que estar concentrado", expresó Gastón Edul (Fotos de Candela Teicheira y Gustavo Gavotti)

– Lo decías una y otra vez junto a otros comentarios siempre con seriedad. Por suerte lo explicaste.

– A los 25 o 30 minutos del primer tiempo tuve la mala idea de agarrar el celular y me di cuenta que mucha gente no lo estaba entendiendo. Lo que hice fue dejar de ver el celular y seguir en el mismo tono, inmutable.

– ¿Que la cábala funcionara y que ganara Argentina era más importante que todo?

– Seguro. Eso es lo más importante.

– Igual fue tu cara de piedra con “Anda pa’ allá, bobo”. Felicitaciones. ¿Cómo hiciste?

– En realidad no disfruté mucho el momento. ¿Viste que ahí pasa todo rápido?

– Porque se puede calentar Messi, ponele.

– Claro, pasó todo tan rápido. A Leo nunca lo habíamos visto así. Estábamos en semifinales del Mundial, con la emoción y yo no sabía cómo iba a reaccionar la gente, ni la gente cercana a Leo, ni la Selección. Porque a veces se entrevera todo y ellos pueden pensar que yo tuve algo que ver o alguna malicia. Lo disfruté después, cuando ellos mismos se lo tomaron bien.

– El mismo Leo que quizás se iba de rosca, eso fue sorprendente.

– Además la FIFA también siempre está pendiente de las declaraciones. Era tan importante lo que él había logrado que yo quería que él contara la emoción que sentía como capitán al meter a Argentina en semifinales. Porque el objetivo interno de ellos era que Argentina llegara a semifinales. Cumplieron el objetivo, pensé, ahora se van a liberar o estarán mejor. Y se fue para otro lado por suerte, porque fue histórico y la gente tiene un lindo recuerdo.

– Un momento histórico donde estás para siempre.

– Todavía me sigue pasando todos los días de mi vida, que alguien en la calle, en alguna farmacia, en un colegio, en algún banco, me recuerda ese momento. Obviamente no es por mí, pero cuando la gente me ve se pone contenta, se traslada ese momento que fue feliz.

– Tenés 27 años y no parece. Sos muy serio, muy centrado, muy seguro.

– Eso me jugó a favor para mi trabajo. Pero también son importantes mis viejos. Mi hermano también es periodista.

– ¿Son todos serios en tu familia, decís?

– Sí, no tanto, mi viejo no es tan serio. Esteban sí, mi hermano más grande, mamaba mucho el periodismo de chico cuando lo veía trabajar.

– Difícil tener el hermano en lo mismo, aunque fue un placer que ese hermano más grande te abriera el camino. ¿Se chicanean a veces con la información?

– Te voy a decir una que pasó hoy. Yo estoy al aire en TyC Sports a la misma hora en que él está en ESPN, exactamente a la misma hora, canales que compiten. Y me enteré que él dio una información al aire que yo no había dado. Le escribí. ¿Che, diste esto? Sí, chequeá por acá. Como si fuese un colega más, y es mi hermano. Eso pasó hoy hace tres horas, para mí es hermoso, lo disfruto.

"No es por mí, pero cuando la gente me ve se pone contenta, se traslada ese momento que fue feliz", dijo Gastón Edul con entrevista con María Laura Santillán
"No es por mí, pero cuando la gente me ve se pone contenta, se traslada ese momento que fue feliz", dijo Gastón Edul con entrevista con María Laura Santillán

– ¿Todos los días están compitiendo?

– Todos los días estamos al aire, pero nosotros no competimos. Es gracioso cambiar de canal y que esté uno en cada lado.

– Además, al trabajar en lo mismo, seguramente te hablan de tu hermano todo el tiempo y a él también. “Decirle a tu hermano que…”

– Eso pasa todo el tiempo. Yo respondo por dos nombres en la calle: Gastón y Esteban (risas). En vez de luchar contra eso, me doy vuelta y respondo, le robo la personalidad. Yo sé que le gusta más a él del laburo y qué me gusta más a mí. A mí más los viajes y la Selección entonces lo chicaneo cuando se viene un viaje. “Ahora te paso por arriba’, él se ríe. Y en los programas, cuando él dice algo antes que yo me escribe “te primerié, te gané”.

– El problema es cuando alguna persona te pasa factura por algo que dijo tu hermano.

– Todo el tiempo. Manejo de fuentes, dirigentes, jugadores, técnicos, lo que engloba nuestro mundo. Hace poco me escribió un jugador, “che, qué pasa con tu hermano que dijo esto? ¿Por qué me mató?”. A veces les cuesta entender. Mirá, háblalo con mi hermano. No pienso como él en algunas cosas, eso pasa. O que los dos nos metemos en problemas por lo que dijo uno, pasa todo el tiempo también. A veces se ofende a alguien con los dos por algo que dijo él y después la tengo que remontar. Pero estamos acostumbrados.

– ¿Cuántos años te lleva Esteban?

– 12 años. Mis viejos tuvieron a Esteban y 12 años después a Guido, mi hermano mellizo, y a mí.

– ¿Se comporta como un padre?

– Sí, es un hermano muy mayor para mí, 12 años, que no se ofenda. Ahora ya la edad se pierde un poco. Él está en otra etapa de la vida. Pero sí, y en el laburo mucho más. Antes de cada decisión importante, es al primero al que le cuento y quiero saber qué piensa.

– De trabajo. ¿Y de la vida?

– De la vida menos, porque él tampoco es muy abierto, le cuesta más. ¿Viste esa gente que expresa sentimientos de otra manera? No es tanto del “te quiero”, es de los caen un domingo con facturas y así me dice te quiero. Eso lo tengo más con Guido, mi hermano mellizo, nos contamos todo.

– Estás gozando de una gran fama en los últimos tiempos, la fama deportiva como periodista deportivo y la otra fama mediática.

– Eso sí es nuevo, sabía que iba a venir en algún momento por el laburo, que hay que saber llevarla. Yo me divierto, no lo sufro.

– ¿Y por qué podrías sufrirlo?

– Hay gente que a veces se agobia un poco o quiere solamente concentrarse en lo laboral y que de lo otro no se sepa nada, lo esquiva. Yo, sin ser tampoco tan extrovertido, trato de disfrutarla porque no dejan de ser cosas en general inocentes, divertidas. Aparte, es un poco el precio de que la gente te siga también, no pueden ser todas a favor.

"Hay gente que a veces se agobia un poco o quiere solamente concentrarse en lo laboral y que de lo otro no se sepa nada, lo esquiva. Yo, sin ser tampoco tan extrovertido, trato de disfrutarla", aseguró Gastón Edul
"Hay gente que a veces se agobia un poco o quiere solamente concentrarse en lo laboral y que de lo otro no se sepa nada, lo esquiva. Yo, sin ser tampoco tan extrovertido, trato de disfrutarla", aseguró Gastón Edul

– Estamos hablando de la química que tienen con Nati Jota cuando trabajan.

– Esa química está. Es decir, en el trabajo se nota y ella lo sabe llevar muy bien. Eso, por ejemplo, me divierte.

“CON NATI EL SECRETO ES NO PONERSE REGLAS. ES LO QUE SURGE, ES NATURAL”

– ¿Cómo se hace para no pasar el límite? ¿O pasan el límite y no lo cuentan?

– Yo creo que justamente el secreto es no ponerse reglas. No es que nos ponemos reglas o nos limitamos. Es lo que surge, es natural.

– Que pase lo que tenga que pasar. ¿La invitaste a salir?

– No, no la invité a salir todavía. Pero viste que al aire le digo “bueno, se acerca el fin de semana… " A ella no le gusta tanto salir, no disfruta tanto la gastronomía, me parece. Después habría que preguntárselo, y a mí me gusta salir a comer. ¿A bailar? Nos hemos cruzado varias veces, pero….

– ¿Han salido juntos y solos?

– ¿Mano a mano? No, no, no. Viste que a veces cuanto más atención hay en algo y más presión más se aleja la posibilidad.

– Están todos esperando.

– Quizás cuando esté todo más tranquilo es diferente

– ¿De quiénes recibís más presión?

– La gente. Ahora me preguntan más por eso que por un 11 titular.

– ¿Qué quiere saber la gente?

– Y… Es el famoso shipeo. Si nos vimos, si pasó algo. Pero cuanto más ruido hay, más se aleja la chance, después es otra cosa.

– La gente está esperando que pase algo y ninguno de los dos se lo da.

– Por ahora, ninguno de los dos. Te lo voy a decir en idioma futbolero: muchas chances de gol y después, cuando queda mano a mano, uno siempre la tira afuera.

“AL AIRE A NATI LE GUSTA JUGAR MÁS FUERTE, PERO DESPUÉS ES UN POCO MÁS MEDIDA. YO SOY AL REVÉS.”

– Me da la impresión que ella se manda un poco más.

– No te creas, ¿eh? Quizás al aire sí, porque le gusta jugar más fuerte. Pero después… ¿La verdad dónde se ve? No se ve en el aire, es un poco más medida ella.

"Ahora hay una pregunta que me hacen más las mujeres. “¿Che, qué onda con Nati?” “Activá”. “Activá con Nati”", contó Gastón Edul
"Ahora hay una pregunta que me hacen más las mujeres. “¿Che, qué onda con Nati?” “Activá”. “Activá con Nati”", contó Gastón Edul

– ¿Cuándo se escriben?

– Claro, y yo soy al revés. En el aire, un poco más introvertido u otro perfil. Y después, cuando estoy hablando fuera del aire, es otra cosa.

“TENGO QUE ESTAR 100 % SEGURO DE QUE ME DIGA QUE SÍ PARA INVITARLA A SALIR”

– Pero nunca la invitaste a salir.

– Pero tengo que estar 100% seguro de que me diga que sí también para hacerlo.

– ¿Qué puede pasar si te dice que no? Nada.

– Qué sé yo, somos compañeros de laburo.

– Es un ida y vuelta muy picante. Cada vez más picante.

– Sí, ese juego le sale mejor a ella que a mí, definitivamente. Porque no me sentiría cómodo. Lo que hago es hasta donde llego.

“QUE HAY QUÍMICA ES EN SERIO”

– ¿Es en serio o es un chiste? Todavía no sabemos.

– No, no. Que hay química es en serio. Yo por lo menos me hago cargo de mi parte. Creo que ella respondería lo mismo, es en serio.

María Laura Santillán Con Gastón Edul - "HAY QUÍMICA CON NATI JOTA, ES EN SERIO"

– ¿Cuánto lleva este vínculo?

– Un año.

– De golpe me transformé en Ángel de Brito.

– (Risas) Peloteás fuerte, atajo penales. No nos conocíamos tanto antes de Olga. Desde que entré a Olga empezamos a vernos más seguido, a charlar, a compartir proyectos. Y es diferente, tener más vínculo.

– ¿Son como un matrimonio que ya estuvo?

– Creo que somos un matrimonio que nunca estuvo. Pero que está ahí, es de la gente.

– ¿Ganás más ahora en las conquistas por esto que por el trabajo?

– ¿Viste que una cosa trae la otra? La curiosidad. Tengo más gente. La pregunta del hombre que sale fácil cuando me ve con el fútbol. Y ahora hay una pregunta que me hacen más las mujeres. “¿Che, qué onda con Nati?” “Activá”. “Activá con Nati”. A mí me hace reír, ahora pasa esto.

– ¿Y qué les decís?

– Me río. No digo nada.

– ¿Te pone incómodo a veces lo picante en el aire?

– La verdad es que no. Me incomodaría si algún comentario externo hace sentir mal a la otra persona.

– Nati se manda mucho: los melones, las pechugas. A eso me refiero.

– No, no me incomoda, porque sé cómo es. No es algo que me haya sorprendido. Obviamente es algo que yo al aire no diría porque a mí no me sale y a ella le sale natural. Si a mí me saliese natural, lo diría.

"Lo que quizás generó un poco de ruido fue todo el debate posterior que incomodó un poco a Nati, le pegaron por demás", dijo Gastón Edul en el reportaje
"Lo que quizás generó un poco de ruido fue todo el debate posterior que incomodó un poco a Nati, le pegaron por demás", dijo Gastón Edul en el reportaje

– Vos muy serio y ella zarpada.

– Ése es el equilibrio, claro. Si los dos fuésemos zarpados… Igual a mí no me sale. Soy 100% sincero. Es más, a veces me dicen: “dale, jugá un poco más”.

– ¿Qué dicen tus viejos de todo esto?

– Se ríen. El día que pasó eso, por ejemplo, mi vieja me escribió y me dijo “Uy, che, pero vos estás bien? ¿Estás cómodo? ¿Está bueno?” Y le digo: mami, diez puntos estoy, me divierto, no pasa nada. Ella se divirtió con ese momento. Lo que quizás generó un poco de ruido fue todo el debate posterior que incomodó un poco a Nati, le pegaron por demás. Yo por eso salí a decir que en realidad es algo consensuado. No habría chance de que ella lo hiciera si no estuviese consensuado esto.

“HABLAR DE ACOSO EN ESTO ES UNA PAVADA, NO TIENE NI PIES NI CABEZA. TE DAS CUENTA EN MI CARA”

– Eso de que podría estar acosándote.

– Claro. No quiero subestimar ese tema porque es muy importante y sensible, pero hablar de acoso en esto es una pavada, porque no tiene pies ni cabeza. Te das cuenta en mi cara y en lo que te estoy diciendo. Si yo me sintiera acosado o incómodo a los dos minutos salgo del aire y lo cuento. Al otro día, lo hablo en el programa. Al revés, lo alimentamos, pero porque estamos los dos conformes con eso.

María Laura Santillán Con Gastón Edul - “QUE DIGAN QUE ES ACOSO EL CHISTE CON NATI ES UNA PAVADA, NO TIENE NI PIES NI CABEZA. ES ALGO CONSENSUADO”

– Sos muy joven, tenés mucho por delante y un montón de puertas para abrir. ¿Ahora vas a cocinar en Bake off?

– Voy a tratar de cocinar, es algo nuevo. No tengo mucha idea de repostería, pero estoy aprendiendo, estoy contento.

– ¿Por qué aceptaste participar?

– Porque me divierte. Me saca de mi zona de confort, me va a estresar. Cuando hacés algo que no sabés hacer te estresa un poco.

– ¿Eso está bueno? ¿Estresarse?

– Sí, por momentos sí, no todo el tiempo. Creo que no me desperfila, es un programa familiero. Me saca de lo de siempre. Es divertido.

– Esa es una de las puertas, también estás stremeando.

– Sí, yo venía con el periodismo hace tiempo. A los 17, 18 años arranqué a estudiar y siempre fue muy lineal lo que hice. Encontré redes sociales para expresarme de diferente manera con la misma información. Twitter es un lenguaje, Instagram es otro y el aire en TyC Sports es otro. El stream siempre me llamó la atención y no sabía bien cómo entrar. Cuando vi por dónde entrar me gustó. Twitch o Kik, me gustó estar con streamers y que me enseñen también. Los streamers en general son más chicos que yo.

“NO ME DA MIEDO MOSTRARME TAL CUAL SOY. NO ME DA MIEDO PERDER PRESTIGIO AL MOSTRAR LO QUE HAGO BIEN O LO QUE HAGO MAL”

– ¿Qué creés que tenés en particular más allá de lo periodístico?

– Trato es de no encerrarme en una coraza. Me muestro tal cual soy, no me da miedo mostrarme tal cual soy. No me da miedo perder prestigio por mostrar lo que hago bien o lo que hago mal. Trato de ser sincero y transparente tanto en las coberturas como en el streaming, creo que eso es lo mejor. Disfruto más sin caretear, disfruto mucho más.

– ¿Decís que no a muchas propuestas?

– Sí, no sé si a muchas cosas. No digo a todo que sí. Lo importante es no subirse a un pedestal. Lo que hago es imaginarme haciéndolo, si estaría cómodo o no, ése es el tema. Lo que generó Olga desde un principio fue impresionante. Tampoco me imaginé un crecimiento tan exponencial, generó una comunidad detrás de Olga.

– Vivís solo. ¿Te cocinás?

– Sí, cuesta en la repostería.

"Lo importante es no subirse a un pedestal", expresó Gastón Edul
"Lo importante es no subirse a un pedestal", expresó Gastón Edul

– ¿Hiciste repostería alguna vez?

– Hice panqueques, algún muffin cada tanto y brownies. En mi casa.

– ¿Antes de que te llamaran para cocinar en televisión?

– Sí, una idea tenés que tener, si no la pasás mal. Lo que estoy descubriendo es que la repostería es como un laboratorio, vos no la podés pifiar con algo porque lo arruinaste. En lo salado si te pasás de sal o de pimienta lo rearmás, acá no podés equivocarte.

– ¿Estás tomando clases de cocina?

– Sí, lo que puedo. No quiero decir que tomé muchas clases y que después me vaya mal.

– ¿Vas a poner en pausa todo lo demás?

– No, estoy organizándome para poder hacerlo. No puedo poner en pausa si juega la Selección argentina, tengo que cubrirlo. Pero sí me voy a dedicar un tiempo a esto, que es salir de la rutina básicamente. Ojalá dure mucho. Es lo que quiero.

– Estoy tratando de imaginarte descontracturado, porque vos te sostenés mucho en tu personaje de periodista. Borracho, ponele.

– Alcohol tomo, el vino me gusta. ¿Pero sabés qué me pasa? Tengo que estar en una casa de amigos. Tengo un grupo de nueve amigos de toda la vida, desde que tenemos cuatro años. Si nos juntamos a comer asado, se toma obviamente. Se disfruta. Si es en otro lugar… Fuera de casa me cuesta un poco más porque me inhibo, no por otra cosa. Tomo, pero no más que eso, sin hacer papelones.

– ¿Gastón, a dónde te gustaría llegar?

– Es difícil sostenerte con laburo todo el tiempo y estar en coberturas tan importantes. Poder cubrir todos los mundiales me encantaría. Que me recuerden por la cobertura de los mundiales, eso me apasiona si me preguntás un sueño. Cubrí uno solo, gracias a Dios se dio la casualidad que justo Argentina salió Campeón del Mundo. Quiero hacer muchos, sostenerme y que pase el tiempo, poder reinventarme y estar cerca de la gente, a veces eso no es fácil. Y personalmente, algo que siempre jodo con mis amigos y con mis hermanos y que es real: quiero conocer todo el mundo, todos los países. No lo voy a poder lograr si no me tomo un año sabático.

– Pero tomarte un año sabático puede ser perder los lugares de trabajo, ¿no?

– Sí, pero en algún momento de mi vida quizás no me preocupe tanto. Ahora siento que es el momento de trabajar, seguir y no parar. Hay momentos donde se va a poder.

“PENSAR AHORA EN TENER HIJOS ME DA UN POCO DE CLAUSTROFOBIA Y ME DOY CUENTA QUE NO ES EL MOMENTO”

– ¿Y en la vida más privada ?

– Sí o sí formar una familia. Tener hijos, no ahora. Pensarlo ahora me da un poco de claustrofobia, entonces me doy cuenta que no es el momento. Pero en algún momento sí, tener familia, hijos, disfrutar de criarlos. Tengo amigos que empezaron a mirarlo con cariño. ¿Viste cuando mirás a los costados y ya todos van para un lugar? No, todavía no.

"Para mí te predisponés a enamorarte. Obviamente puede pasar algo, alguien que te rompió la cabeza. Pero te predisponés", planteó Gastón Edul
"Para mí te predisponés a enamorarte. Obviamente puede pasar algo, alguien que te rompió la cabeza. Pero te predisponés", planteó Gastón Edul

– ¿Cuando está preparado para eso se enamora de lo que se presenta?

– Para mí te predisponés a enamorarte. Obviamente puede pasar algo, alguien que te rompió la cabeza. Pero te predisponés. A veces más que amor es también coincidir en los tiempos, no es solamente enamorarse. Ahora es difícil, viajo tanto. Un garrón para la persona que esté conmigo, viajo todo el tiempo.

– ¿Hay tiempo para hacer terapia?

– Tendría que hacerme el tiempo. No hay, pero tendría que hacérmelo.

– ¿Para tener una mascota?

– No, para mascota no, se me muere, se me mueren las plantas. Se me murió una planta hace poco. No hay manera de que tenga una mascota.

– ¿No va nadie a regar?

– No, le dije a mi vieja. Pero ya estaba irremontable la situación. Dijo: Mirá, te doy el pésame, murió.

“VIAJAR TIENE CONTRAS. TE PERDÉS CUMPLEAÑOS, EL CAMPEONATO DE MI SOBRINO, NOTICIAS DE MIS AMIGOS. ESA PARTE LA SUFRO”

– Es la vida en el avión.

– Es mucho de eso, y también te hace perder oportunidades. A mis amigos les explico. Porque claro, te ven viajar todo el tiempo, te dicen “espectacular, qué bueno, soñado”. No quiero victimizarme al revés, es lo que busqué toda mi vida, pero tiene contras. Te perdés cumpleaños, te perdés sucesos. Mi sobrino Toto, el hijo Esteban, debutaba en un campeonato jugando al fútbol. Él siempre me habló de ese campeonato, “acompañame tío”. Y cuando debutó yo no estaba. No me gustó no estar. O de pronto llegás y te perdiste noticias de tus amigos, que alguno lo echaron, que el otro se compró el auto. Nosotros nos vamos acompañando. Enterarte cuando pasó todo mí no me gusta, porque también soy familiero y soy amiguero y esa parte la sufro. Los viajes no los disfruto tanto.

"Te ven viajar todo el tiempo, te dicen 'espectacular, qué bueno, soñado'. No quiero victimizarme al revés, es lo que busqué toda mi vida, pero tiene contras", explicó Gastón Edul
"Te ven viajar todo el tiempo, te dicen 'espectacular, qué bueno, soñado'. No quiero victimizarme al revés, es lo que busqué toda mi vida, pero tiene contras", explicó Gastón Edul

– Te pasa como a los jugadores.

– Eso pasa. Les pasa mucho, estar encerrados tanto tiempo en los hoteles.

– ¿Algún jugador es muy amigo tuyo?

– Muy amigo no sé, pero sí tengo relación. Cuando llegué a la Selección Argentina había un camino recorrido, fíjate como todo va tomando sentido. Yo pasé por equipos chicos, cubrí Defensa y Justicia, Argentinos Juniors. Después pasé a un equipo grande como Independiente. Pero conocí a Alexis Mac Allister en Argentinos Juniors cuando no era el campeón del mundo. Conocí a Nico González cuando jugaba en la B con Argentinos y lo dirigía a Heinze.

– Relaciones más largas.

– Y genuinas. Nos conocemos desde que empezamos los dos. En Defensa y Justicia estaba yo solo como periodista y estaban Lisandro Martínez, Nahuel Molina y Guido Rodríguez, era el único que hacía notas. Hay un recuerdo, hay un camino antes, no caí de la nada.

“LA HACEDORA DE MI PERSONALIDAD Y LA DE MIS HERMANOS ES MI VIEJA. POR ESO CADA VEZ QUE TENGO UN MINUTO SE LO DEDICO”

– ¿Qué hicieron bien tus viejos con vos? Eso que quizás quisieras repetir con tus hijos.

– Mirá, los dos son muy buenas personas. Lo que vi de mi viejo es la cultura del trabajo. Que mi viejo me perdone pero la hacedora de la personalidad, no solamente mía, sino de mis hermanos es mi vieja. Es ella. Por eso cada vez que tengo un minuto se lo dedico, porque es muy compañera. Es una persona que renunció a toda su vida para criarnos. Su proyecto fuimos nosotros. Dejó su trabajo, dejó hasta su vida social para criarnos. Me crucé ahora con ella en un viaje que le costó y que la ayudé a hacer, nos cruzamos trabajando. Estaba un poco emocionada. Le dije: mami, disfruta de todo esto porque lo sembraste vos. Es decir, ella a veces dice “qué suerte que tuve, todo lo que está pasando”. Y yo le digo: no, no es suerte, lo sembraste.

– ¿Le costó?

– Todo. Ella era profesora de inglés, cuando nació mi hermano más grande pudo sostenerlo, pero part time. Cuando nacimos Guido y yo, mellizos, dejó de trabajar definitivamente. Se encerró en una casa para criarnos. Se levantaba a las 06:00 para llevarnos al colegio. Volvía al colegio a las 12 del mediodía porque hacíamos doble turno, nos preparaba el almuerzo, nos volvía a llevar. Nos volvía a traer a la noche, nos hacía la cena. Yo me acuerdo de eso. Entonces todo ese cariño con el que nos criamos, con tanto amor, nos hizo crecer con buena autoestima, sin carencias, sin complejos. Y no todos tienen la suerte. Entonces todo eso es de ella, todo.

María Laura Santillán Con Gastón Edul - "YO SOY MUY MAMERO, LE ESCRIBO TODO EL TIEMPO. QUIERO SABER QUÉ HACE CADA MINUTO“

– ¿Todo esto se lo decís a ella?

– Sí, se lo digo cada vez que puedo. Soy expresivo con ella. Hace poco me tocó ir a lo de Mirtha Legrand por primera vez y estuvo buenísimo.

– Se lo habías prometido a tu mamá.

– Claro, fue así. La llevé. Ella nunca jamás me pide que la lleve a ningún lado. No le gusta, le da vergüenza. Yo jugaba con ella y se lo decía cuando mirábamos a Mirtha Legrand en casa: ma, mirá cuando esté ahí. “Cuando estés ahí me tenés que llevar”, jugando, no iba a pasar nunca. Y pasó.

“YO SOY MUY MAMERO. ELLA ES UN POCO MI CABLE A TIERRA”

– ¿Vos sos el más mamero?

– Yo soy muy mamero, muy mamero. Sí, Esteban es de otra manera, Guido también es cariñoso. Pero yo con mi vieja todo el tiempo, nos escribimos todo el tiempo. Ahora ella está de viaje y quiero saber qué hace. Ella es un poco mi cable a tierra también. Contarle las cosas a tu mamá es como terapéutico. Hablar con mi vieja es terapéutico.

– ¿Cuántos años tiene?

– 64. Con eso le hago chistes. Le digo. Le digo: vieja, mirá que hasta los 90 no te suelto, vos tenés que cumplir los 90. Y ella me dice “no Gastón, no sé qué va a pasar”. Le digo: hasta los 90 acá, después hacé lo que quieras.

Guardar

Nuevo