Noelia Marzol es una destacada actriz, bailarina y presentadora argentina. Comenzó su carrera en el mundo del teatro aunque también se transformó en una figura de la televisión y tuvo su paso por el cine.
Su presencia en obras como Sex le valió reconocimiento por su actuación audaz y su capacidad para manejar roles que exploran temas sexuales y provocativos. En la pantalla chica participó en programas, como Minuto para ganar, Hiperconectados, La Nave de Marley y Todo puede pasar, entre otros. También compitió en varias ediciones de Bailando por un Sueño en Showmatch.
Noelia tiene un perfil activo en redes sociales con una comunidad de más de 2 millones de seguidores. Allí comparte aspectos de su vida cotidiana y profesional. Casada con el ex futbolista Ramiro Arias, y madre de dos hijos, habla abiertamente sobre su experiencia como madre y su equilibrio entre su carrera y su vida familiar.
Actualmente, estrenó su obra Bloody Tango en la cual es protagonista junto a Lourdes Sánchez, Jonathan Lazarte, Ana Devin y gran elenco. Pero además de estar sobre las tablas, también ejerce el rol de productora.
“Estoy produciendo por primera vez así que fue todo un desafío ponerle el cuerpo y producir fue un montón. Ahora me doy cuenta todo el trayecto. Todo el mundo me veía como una mujer desesperada y me decían: ‘Vos confía en el proceso’. Realmente fue bastante agotador, pero finalmente el producto está buenísimo. Estoy super contenta”, contó Noelia. La obra se realiza en el teatro Politeama los viernes y doble función los sábados.
Rulo: — ¿Puede ser que Rami tu marido sea uno de los tipos menos celosos de la Argentina?
Noelia: — Sí, puede ser. Está chequeado (risas). Pero yo también soy tranqui. Nunca nos celamos el uno al otro porque tampoco nos damos motivos. Estamos en buena sintonía el uno con el otro.
Rulo: — Él te conoce en sex, que es una obra que he ido a ver y la verdad que es fuerte. Hay pocas obras tan fuertes desde lo sexual porque es explícito, están desnudos, pero a él no le jode.
Noelia: — No, él entendió perfecto que eso tiene que ver con un personaje. Yo tampoco es que voy por la vida haciéndome la sex simbol. Obvio que en ese ámbito no me voy a quedar a medias, si estoy haciendo de mujer sexy, lo doy todo. Pero eso no implica que yo el resto del día esté beboteando. De hecho, me ve levantarme a la mañana y soy el ying y el yang.
Rulo: — Es tu personaje, pero tal vez en tu casa sos tranquila y le puede molestar que vayas a la obra y otros te vean así.
Noelia: — No. Lo sexual todavía es muy tabú, pero es parte de la vida, es algo muy natural. Yo lo tomo como algo muy natural. Recibí una educación sexual de parte de mi familia siempre naturalizando el hecho de que la acción, el sexo, es parte de la vida. Todos para reproducirnos tenemos sexo. Llevarlo a un lugar tan tabú, tan prohibido me parece una situación rara eso. Es mucho más natural de lo que se plantea. Todos tenemos sexo, tuvimos o tendremos.
Rulo: — Rami es ex futbolista y ahora representa jugadores, no es de lo que podría llamarse el medio artístico, ¿te ha preguntado algo de tu pasado? ¿Qué te dice cuando sale alguna historia de un viejo romance?
Noelia: — No, pero el me seguía la carrera desde hace mucho (risas). De hecho, creo que yo estaba en pareja cuando yo estaba haciendo la obra sex y cuando se enteró que se terminó esa relación vino a conocerme. Tenía todo planificado.
Rulo: — Viste que hubo un “escandalete” que Flor Vigna contó algo de vos y él estaba ahí en el programa. Cuando llegó a casa, ¿te preguntó algo sobre tus historias anteriores?
Noelia: — No, Rami sabe todo. Ya lo sabía porque yo todo el tiempo me cruzo con gente con quien por ahí tuve una relación porque trabamos en el mismo ámbito y se lo blanqueo. No pasa nada. Fue parte del pasado. Es lo mismo que cuando volvemos al pueblo de Rami yo sé si estuvo con alguna chica del pueblo o no. ¿Qué me voy a poner celosa por algo que ya sucedió?
Rulo: — Todo lo ponés como algo tranquilo, pero no para todos lo es.
Noelia: — Es que sí. Hay que naturalizarlo más.
Rulo: — Vos dijiste públicamente que te gustaría tener un tercer hijo, pero él comentó que le gustaría hacerse una vasectomía, ¿es correcto? ¿Cómo lo ves esto?
Noelia: — Hoy día sería la mujer más feliz si se hace la vasectomía porque ya…
Rulo: — ¿Se te fueron las ganas del tercero?
Noelia: — Y… se fue una semana de viaje Rami, me dejó con los dos sola en vacaciones de invierno (risas). Fueron días muy jodidos. Así que hoy te diría que estamos bien con dos. Es el cuerpo de él, tiene que decidirlo él. Puede hacer lo que quiera.
Rulo: — ¿Cuánto decidiste que Rami iba a ser el papá de tus hijos?
Noelia: — Yo tenía muchas ganas de ser madre y cuando lo conocí a Rami el primer día le dije que yo tenía ganas de ser madre pronto. Soy bastante determinarte. Se lo dije el primer día, después era decisión de él si tenía ganas de seguir conociéndonos, enamorarnos y el día de mañana ser padres juntos o si simplemente estábamos para un par de salidas, noches y nada más. Creo que cuando él se dio cuenta que no era un anhelo sino un deseo concreto, nos terminamos separando en pandemia porque a él le agarró un poco de miedo porque no sabía si estaba listo. Lo más sano que pensamos los dos era tomar distancia y que cada uno piense qué es lo que necesita para su vida. Obviamente, tener un hijo tener una elección que te cambia la vida y es una decisión muy responsable. Tampoco iba a dejar que lo tome a la ligera porque me parecía un montón.
Rulo: — ¿Cuánto tiempo estuvieron separados?
Noelia: — Uno o dos meses. Él estuvo en su pueblo con su familia y después volvió y me dijo que sí, que quería formar una familia conmigo.
Rulo: — Y fue bastante rápido, ¿no? Se casaron, primer hijo, todo junto.
Noelia: — Sí, en realidad él me propuso casamiento y al otro día me enteré que estaba embarazada. No nos casamos porque estaba embarazada sino que se dio todo junto.
Rulo: — Vamos ahora con una pregunta de pareja, ¿abrirías la pareja?
Noelia: — No, hoy no. En el futuro no sé qué nos depara el destino, pero en la actualidad no. Estoy muy bien con Rami, nos llevamos muy bien.
Por sí o por no
El conductor invitó a Noelia a contestar el cuestionario levantando los carteles de Sí o No, según corresponda. Las decisiones que tomó en su carrera, qué opina su familia sobre su profesión y cómo administra su economía. ¿Es ahorradora o derrocha?
Rulo: — ¿Sentís que la cagaste en algo en tu carrera?
Noelia: — No, todas las decisiones que tomo generalmente son muy meditadas y racionales. Soy una persona muy racional, que por ahí me juega en contra eso porque a veces uno tiene que dejar llevarse un poco más por lo emocional y no pensar tanto. Creo que dentro de las posibilidades que tenía fueron las decisiones más acertadas.
Rulo: — ¿Tus viejos te apoyaron en tu carrera?
Noelia: — No. Mi mamá sí. Mi papá no tanto.
Rulo: — ¿Quería que seas abogada, contadora?
Noelia: — Mi papá quería que sea arquitecta y yo era muy buena alumna. Medalla de oro me gané.
Rulo: — En el Colegio Alemán
Noelia: — Sí (risas). Se tres idiomas. Bueno, en realidad Alemán e Inglés. Fui becada por la Bolsa de Comercio, abanderada. Hubo un año que me dijeron: “¿Qué querés ser abanderada de castellano o alemán? Porque tenés el mejor promedio de los dos”. Era muy nerd, no inteligente. Porque es diferente. Demasiado aplicada, pero no inteligente.
Rulo: — ¿Por qué tu viejo no te apoyaba en la carrera? Porque además te fue bárbaro y tenés una trayectoria.
Noelia: — Mi papá es una persona que viene del interior del país, que las personas son mucho más reservadas y también es como que él esperaba que después de toda la educación alemana que me dio yo iba a terminar siendo algo como mucho más formal: arquitecta, abogada o vaya a saber uno qué proyectó en mí. Llegué un día y le dije: “Yo quiero ser bailarina”. Mi papá se quería matar (risas). Después encima también le jugó en contra que empecé haciendo teatro de revista con Carmen Barbieri, con Jorge Lanata en el Maipo y, obviamente, era una revista y estaba con poca ropa. Así que se quería morir.
Rulo: — ¿Qué te dijo la primera vez que te vio ahí?
Noelia: — Una vez me acuerdo patente que me dijo: “¿Tanto invertí en el Colegio Alemán para que vos termines en la revista?” (risas).
Rulo: — Pero no tenía mucho que ver una cosa con la otra.
Noelia: — No, yo siempre le digo que la educación que me dio me sirvió. Tengo un montón de información en la cabeza y la inquietud esta de querer producir, hacer mi propio productor tiene que ver con la educación que él me dio, saber administrarme, que me lo dio la educación.
Rulo: — ¿Cómo te llevas con el dinero? ¿Te administras vos?
Noelia: — Me administro yo y lo reto bastante a Rami porque no le gusta ahorrar, no le encuentra la vuelta. Soy de la idea de que si ganaste un peso, hace el esfuerzo y guárdate 50 centavos. Me han inculcado eso. Se que no siempre se puede el 50%, pero hay que hacer el esfuerzo de ahorrar algo. Lo que se pueda. Separarlo.
Rulo: — ¿Y cómo te das tus gustitos?
Noelia: — Trato de hacerlo con lo que ahorro. A partir de que soy madre me persigue mucho la idea de ¿qué pasa si a mí me llega a pasar algo el día de mañana? Entonces yo siempre ahorro para que mis hijos tengan aunque sea unos meses o unos años de vivir tranquilos por lo menos económicamente sin que esté yo presente.
Rulo: — Sos cuidadosa con el dinero
Noelia: — Sí, soy ahorrativa. Nunca derroché, no vivo una vida de lujos. Tengo una vida normal y trato de ahorrar para el futuro.
Rulo: — ¿Sabés algo del Bitcoin, de las criptomonedas?
Noelia: — Traté de meterme en ese mundillo, pero justo entré en un momento que bajó mucho y me deprimí. Tengo ahí mis moneditas dando vueltas. Me lo maneja alguien. Lo hice para probar, para ver qué onda y no quedarme afuera. Soy muy de investigar.