Martín Pérez Disalvo, más conocido como Coscu, es un streamer, jugador de videojuegos y youtuber. Cuenta con más de 3.9 millones de seguidores en Twitch y 4.7 millones de suscriptores en YouTube con más de 1.34 mil millones de visualizaciones.
Es el fundador y líder de la Coscu Army, una comunidad de jugadores de esports y streamers; y creador y presentador del evento Coscu Army Awards, que premia a los usuarios más destacados de Twitch en Argentina.
En 2020 este evento obtuvo el récord de la transmisión más vista de Latinoamérica y entró en el ranking de las diez más visitadas en la historia de la plataforma. En 2021, estrenó el evento Coscu Army Got Talent, que se basa en premiar al mejor talento del concurso.
Actualmente, junto a otros streamers, trabajan en nuevos proyectos y una migración hacia otras plataformas para seguir potenciando el fuerte el avance de este tipo de espacios de comunicación virtual.
“Cuando no había nada, nosotros empezamos todos juntos y siempre nos manejamos en grupo y yo medio que quedé como una figura importante a la hora de tomar las decisiones. Soy como el que pelea con el árbitro para que todos les vaya bien”, explicó Coscu y remarcó que para muchos jóvenes estos ámbitos no son sólo de entretenimiento o de expresión sino “herramientas de trabajo”.
El juego del millón
Con una valija llena de dinero, el Pollo invitó a Coscu a comprar todo lo que desee. El único requisito es que el dinero no puede ser guardado o donado, sino que tiene que utilizarlo por completo en una sola compra o en varias. ¿Qué eligió el streamer?
Pollo: — ¿En qué lo gastamos?
Coscu: — Le compro una casa a mi mamá, de una. Uso todo para comprarle una casa buena, buena.
Pollo: — ¿Vos tenés casa propia?
Coscu: — Yo tengo para comprármela, pero voy a tener una casa cuando encuentre con quién. Soltero no me quiero ir a vivir a una casa mía, prefiero alquilar.
Pollo: — ¿Vos estás esperando comprarte una casa cuando estés enamorado?
Coscu: — No, yo estoy esperando enamorarme para proyectar toda mi vida con esa persona. Mi sueño es enamorarme. La gente piensa que nosotros salimos todos los días, estamos en cualquiera.
Pollo: — ¿Hace cuánto que no estás en pareja?
Coscu: — Cuatro años, cuatro años y medio.
Pollo: — ¿Vos buscas el amor de tu vida?
Coscu: — Sí, ya estoy grande para boludear.
Pollo: — ¿Qué edad tenés?
Coscu: — 32 años. Pero de chico era un tiro al aire con las mujeres de 17 a los 24.
Pollo: — ¿Sabés qué buscas?
Coscu: — Estabilidad.
Pollo: — ¿Te importa que sea conocida?
Coscu: — Me da igual. Siento que una conocida es mucho más fácil que entienda mi vida, una desconocida capaz va a tener que adaptarse a un montón de cosas y puede costarle.
Pollo: — Sabés que si vos mañana conoces a alguien, te ponés de novio y al toque le decís: “Vamos a comprar la casa”, se va a asustar…
Coscu: — No, no (risas). Tengo un plan.
Pollo: — ¿Vos querés construir una familia?
Coscu: — Sí, quiero tener hijos. Es mi sueño más que la casa. Quiero tener tres hijos. Yo quiero construir una relación y, a partir de eso, construir proyectos. Lo que aprendí después de mi última relación es que para construir necesito tener una confianza absoluta en la persona porque no puedo desperdiciar más tiempo en mi vida. Yo quiero que esta etapa sea compartida, para mi es un desperdicio no poder compartir tantas ganas, tanta energía con alguien. Me cuesta mucho encontrar ese alguien porque soy también muy raro, no me gusta salir, me invitan a conocer gente y me quedo en mi casa. Hago mucho deporte, pero solo salgo de mi casa para eso. Soy raro. Es culpa mía.
En números
Martín se atrevió al cuestionario y reveló sus intimidades en relación al sexo, el dinero y las emociones.
Pollo: — ¿Hace cuántos días no tenés sexo?
Coscu: — Es imposible saberlo. Pasó mucho tiempo. Octubre. Pero porque no quiero. O sea tengo ganas, pero con alguien que pueda tener más que solo sexo.
Pollo: — ¿Cuánto te costó lo más caro que te compraste?
Coscu: — Un auto. 120 mil dólares, un poquito más.
Pollo: — ¿Cuántas veces lloraste en los últimos 30 días?
Coscu: — Lloré hace poco. Me estaban bardeando un motón en redes sociales.
Pollo: — ¿Por qué te bardeaban?
Coscu: — Por cualquier cosa. Me estaba bardeando mucho, yo estaba sensible, entré al streaming de Luquitas Rodríguez y él estaba reaccionando a un video que se filtró hace poco de Camiseta Nani contra el Turco y yo leía todos los comentarios: “No puedo creer lo buena persona que es Coscu, cómo se la bancó o lo buen tipo que es”. Y me puse a llorar, de emoción.
Pollo: — ¿Cuántos boxers tenés?
Coscu: — ¿25? Me gustan los boxers, o sea, me gusta tener distintos. Para mí el calzoncillo es fundamental. El detalle del calzón es importantísimo a la hora de la intimidad. Uno de mis amigos es re fachero, pero tiene calzoncillos del Capitán América…(risas) y para mí es un tarado. Yo uso Calvin Klein blanco, el blanco agranda, suma como loco.
Messi
Declarado fanático de Lionel Messi en sus redes sociales, transmisiones y entrevistas, Coscu contó en detalle la anécdota de cómo fue conocer a su máximo ídolo y cuáles fueron sus sensaciones.
El encuentro se produjo en agosto del 2021 con ayuda del Kun Agüero y es un recuerdo que el streamer atesora como el mejor día de su vida. Hasta hoy, mantiene diálogo con el astro del fútbol a través de las redes sociales aunque admitió que intenta “no molestarlo mucho”.
Pollo: — ¿Cómo conocés a Messi? ¿Cómo te llega esa propuesta?
Coscu: — Conocer a Messi fue una sorpresa muy especial. Fue el mejor día de mi vida. Messi empieza a seguir a Bizarrap. Ibai me hace un freestyle y me dice rapeando: “Coscu, tú eres un fracasado porque no te sigue Messi, pero a Bizarrap sí” o algo así. Jodiendo, somos amigos, estábamos juntos. Messi, de causalidad, ve eso y, bien argentino, me empieza a seguir. Agarro el celular rápido y le digo Ibai: “No puede ser, no puede ser”. Empiezo a temblar. El primer mensaje fue: “Ahora Ibai no te puede decir más nada” (risas).
Pollo: — Un genio (risas). Te reaccionó.
Coscu: — Me manda un audio y me dice: “Para que sepas que soy yo, te mando un audio” y yo ahí temblando. Me dice: “Yo estoy acá en Barcelona, cuando estés libre si no podemos ver, nos vemos” y suelta un: “Te lo prometo”. Yo con eso solo no podía ser más feliz, era mi sueño. Pero era el último día, ya había pasado un tiempo de que habíamos hablado, y el Kun Agüero, que tenía todo pensado, nos dice de llevarnos a un restaurante a mí y a Ibai.
Pollo: — ¿Todo eso en Barcelona?
Coscu: — Sí, si en Barcelona. Nadie sospechaba nada. El viaje fue muy largo en el auto, entra en una calle sin salida y nos empiezan a sacar fotos un montón de paparazis. Yo re mal porque sentí que lo estábamos exponiendo a él por ir a comer juntos. Con Ibai no entendíamos nada hasta que entramos. Yo digo: “Re picante estos restaurantes que conoce. Acá nadie lo puede joder porque es una casa privada”. Yo una parte de la casa la conocía por una entrevista. Ahí no lo podía creer. Ibai me decía: “Oye, ¿dónde estamos? ¿dónde estamos? ¿por qué estás así, dónde estamos?”. “Estamos en la casa de Messi”, le digo. No podíamos más de la emoción y nos viene a recibir Leo en patas. Se acercó para darnos un beso y de la torpeza y los nervios lo pisé en la zurda (risas).
Política
Con un crecimiento imparable de las redes sociales y un nicho bien marcado en Twitch y YouTube, en los últimos años las campañas electorales intentaron volcarse a las plataformas para llevar su mensaje y sobre todo buscar posicionar a los candidatos en ámbitos que no les eran orgánicos.
“La política es un negoción, pero la odio, no me traigas nada de política”, advirtió Coscu.
Pollo: — ¿Te han ofrecido guita por política?
Coscu: — Sí, 100 por ciento.
Pollo: — ¿Cómo sería? ¿Viene un político o partido político y te dice que hables bien de ellos y ahí aparece una plata?
Coscu: — Es el famoso: “¿Cómo andas Soku?”. No saben ni tu nombre. “Sabemos que te siguen todos los jóvenes, nosotros no tenemos alcance a ellos, nos gustaría que vos…”, te la camuflan. Te dicen: “Te prestamos un lugar para hacer algo”, tal herramienta o lo que sea. Pero siempreque hay poder hay cadenas de favores. Yo a la primera que empiezan con la cadena de favores, les digo: “Mirá, no me sos imprescindible, no te necesito. Voy a hacerlo a mi manera”. Y quizás te bajan los recursos, pero seguís alejado de un ambiente que para mí es muy nocivo.
Pollo: — ¿Cuál fue la más pesada que te ofrecieron?
Coscu: — Nunca llegué a hablar de números porque nunca cedí en ningún aspecto. Yo cortaba menos diez al principio. “Nada de lo que venís a buscar es lo que yo hago”, les decía. Yo he ido a eventos muy importantes entre comillas y me ha pasado de cruzarme gente que me ha dicho: “Por favor, una foto”. Y era un político, ¿y qué carajo hacés? También me pasó que un día no me saqué una foto y aparecí cancelado al otro día, literal. Cancelado por trolls de Internet. Yo no me quiero sacar fotos con ningún político, no quiero estar con nadie.
Lenguaje streamer
El nacimiento y desarrollo de una nueva comunidad virtual trajo aparejado un vocabulario para compartir y referirse a las acciones que suceden a diario en las transmisiones en vivo.
Algunas palabras se filtran en redes sociales y se convierten en populares, pero otras son tan propias del espacio del streaming y los videojuegos que se desconoce qué son y qué significan. El Pollo invitó a Coscu a revelar sus significados con un breve ping-pong.
Pollo: — Funado
Coscu: — Es cancelado, por ejemplo, clip de Cristiano Ronaldo que no le da su camiseta a un nene, funado. ¿Por qué? Porque es malo. Te exponen en redes sociales como algo malo.
Pollo: — Pedilo
Coscu: — Esta es fácil. Es con entonación. Todo nace de la costumbre, de todos los días. Empezó porque Valdu, un streamer, en vez de decir: “No, por lo que acabas de hacer pedir perdón”. Lo resumió a: “Pedilo” y quedó.
Pollo: — Ido
Coscu: — Se dice con mucha i. Por ejemplo, vas a una heladería, te dan de probar un gusto que está muy bueno, decís: “Está ido”.
Pollo: — God
Coscu: — Dios. Messi es God. Se dice con mucha o. Gooood.
Pollo: — Factos
Coscu: — Hacen una publicación diciendo: “Cristiano debería haber ganado por esto, esto y esto”. Y él se equivoca, no me acuerdo como era bien la historia, pero me parece que lo borró; y el chabón comenta: “Factos”. Que en portugués es traducido como hechos, la realidad. Así que se suele decir: “Voy a soltar unos factos o me voy a calentar unas facturas”. Eso quiere decir que vas a decir unas verdades.