Facundo Ventura en Segunda Generación: “Sentí que estaba a la sombra de mi papá, por eso me alejé del medio y trabajé de chofer”

El productor, panelista y conductor pasó por el ciclo de Infobae. Contó por qué eligió esta profesión, recordó las amenazas de muerte que sufrió su familia y se refirió a los códigos de la televisión.

Facundo Ventura, heredero de la pasión y entusiasmo por la radio y televisión, es el hijo mayor de Luis Ventura, uno de los periodistas íconos del espectáculo, y Estelita Muñoz, histórica secretaria del programa de Roberto Galán “Si lo sabe cante”. Ellos estuvieron casados durante 20 años y tuvieron dos hijos. Nahuel, el hijo menor, también trabaja en el medio, es fotógrafo profesional y productor.

Con una voz tranquila y serena, Facundo se describe a sí mismo como “un chico normal”, arraigado a su barrio, apasionado por su familia, sus perros, el fútbol, y se reconoce como un hincha fanático del club Lanús.

Sobre su padre afirma: “Decidí que tenía que alejarme un poquito de su figura para empezar a hacer mi propio camino. Sentí que estaba muy a la sombra de lo que era mi papá, algo inevitable porque mi viejo es una de las figuras más importantes del mundo del espectáculo, pero laburando con él no me podía despegar”, confesó.

Durante este periodo de distanciamiento de su padre y de los medios, trabajó como chofer en reconocidas aplicaciones de autos. Pero no pasó mucho tiempo hasta que la llegada de nuevos proyectos lo tentaron a regresar a su verdadera vocación. Esta vez, con una identidad propia.

En la actualidad, Facundo despliega su versatilidad como panelista en “Empezar el día”, conducido por Yuyito González, y como productor en “Mañanísima” en Canal 13. Además, conduce el ciclo “5 de Copas” en radio Zónica. Siguiendo los pasos de su padre, también forma parte de APTRA; se desempeña como agente de prensa y es Community Manager de jugadores de fútbol.

Con una historia que combina momentos de alejamiento y reencuentro con su profesión, Facundo demuestra que supo construir su propio camino en el exigente mundo de la radio y televisión, como una figura multifacética con sello propio.

Luis Ventura y Estelita Muñoz estuvieron casados durante 20 años y tuvieron dos hijos: Facundo y Nahuel.

— ¿Cómo fue tu infancia?

— Fantástica porque mis viejos me demostraron que con poquitas cosas se puede ser muy feliz. Con ir a jugar a las cartas con mis amigos, jugar un partidito de fútbol, una comida, un mate… A mí esas cosas me alcanzan para ser feliz. Si con tan poco puedo ser feliz, cuando vienen cosas que por ahí uno no espera, son un plus. El mensaje que tuve siempre en mi casa fue ese: que lo lindo está en lo sencillo de las cosas.

— ¿Qué es lo que tenés más parecido a tu papá y a tu mamá?

— El barrio. A mí no me sacan del barrio. Es algo que me inculcó mi papá. Nos criamos en Lanús y no podría irme a vivir a otro lado. Me acuerdo que una vez a mi papá le habían sugerido que se mudara a un barrio privado y tuvimos una reunión familiar para hablar de eso y le dijimos que no. “A mí de Lanús no me movés”, le dije. Tengo a mis amigos de toda la vida, al club de mis amores. No me podría ir a otro lado. Mi papá se crió en Lanús y ese amor por el barrio me lo transmitió. De mi vieja tengo parecido el carácter. Soy de dar todo por quienes tengo alrededor, pero si me fallan les hago la cruz.

— ¿Por qué elegiste la carrera de tu papá?

— En realdad no la elegí. Me la impuso. Yo quería ser actor o fotógrafo y mi papá vio que tenía facilidad con el tema del periodismo, de la escritura y me sugirió que siguiera esta carrera. Al principio no me gustaba, pero a medida que fueron pasando los años le fui tomando el gustito. Es una carrera que me permitió hacerle entrevistas a gente que yo admiraba, conocer lugares que pensaba que no iba a conocer nunca y moverme en un ambiente que me terminó gustando muchísimo.

Ventura: “Soy un pibe sencillo, de barrio, amiguero, familiero, amante de los perros, del fútbol y fanático del club Lanús”.

— ¿Qué era lo que no te gustaba al principio?

— Que por el apellido que llevo se me relacionaba mucho con el periodismo de espectáculos y a mí sinceramente no me gusta meterme en la vida privada de la gente. Primero, porque no le veo interés y segundo porque me parece muy invasivo. Yo trato de desenvolverme en este ambiente apuntando más la lado artístico, lo que es el show y no la vida privada.

— ¿Y cómo fue vivir en ese ambiente cuando tu papá es uno de los iconos del periodismo de espectáculo?

— Y al principio he discutido mucho con mi papá por esto. Después lo fui normalizando. Era su trabajo y yo empecé también a meterme un poco en el mundo de él. Pero siempre desde mi manera de trabajar. Si alguno de los protagonistas tiene ganas de hablar, obviamente le doy libertad, pero si algún entrevistado, como me ha pasado que me dicen: “Facu, no me toques este tema, de esto no quiero hablar”, yo eso se lo respeto al 100 por ciento.

“Mis viejos me demostraron que con poquitas cosas se puede ser muy feliz”

En varias ocasiones, por el trabajo de su papá debieron soportar como familia fuertes críticas y hasta a ser víctimas de amenazas anónimas. Desdramatizando esa etapa de su vida, Facundo asegura que aprendieron a convivir con esos malos tragos entendiendo que “son las reglas del juego”.

—¿Alguna vez te molestó un tema personal que fue tocado en los medios?

— Mi papá se ha metido muchas veces con gente importante y cuando mi viejo se mandaba algún moco había que bancarse el vuelto. Me crie con eso.

— Cuando decís “bancarse el vuelto”, ¿corrió riesgo de vida tu papá alguna vez?

— Corrió riesgo porque le han pegado en la calle, lo han amenazado. Nosotros en casa hemos tenido amenazas a las 4 de la mañana. Me acuerdo de uno que nos llamaba siempre de madrugada y nos recitaba poemas que hablaban sobre la muerte, pero había que bancarlo.

Facundo sobre Luis: "La pelea más grosa que tuvimos fue hace un año y medio. Estuvimos un tiempo sin hablarnos, pero después de ese lapso la relación se fortaleció".

— ¿Cómo te manejas con las amistades cuando se enojan con tu padre?

— Si mi papá se lleva mal con alguien es un tema de mi papá. Yo sé separar. De todas maneras, siempre trato de juntar a mi viejo con la gente que se pelea. Pasó con “Beto” Casella que estuvieron diez años peleados. Se han dicho de todo y yo desde un primer momento supe que ese distanciamiento, esa pelea, no estaba buena porque había sido un mal entendido que se hubiese solucionado enseguida. Pero como los dos son orgullosos no se dieron ni cinco minutos para resolverlo en el momento y la estiraron. En el medio había otros canales metiendo fichas, picando, para engrandecer ese pleito. Por eso, tomé cartas en el asunto. Hablé con “Beto” y con mi papá. Les dije: “Déjense de embromar, júntense, arreglen las cosas”. Y se amigaron en el programa de radio que tengo en radio Zónica. Ahora mi intención es amigarlo con Rial. El tema es que hay que ver si Jorge me atiende el teléfono. Yo sé que mi papá se sentaría con él a tomar un café, a hablar, falta Jorge.

— ¿Por qué se pelearon?

—Por roces que venían teniendo en lo laboral. No quiero ser muy detallista porque es un tema de ellos. No es mi responsabilidad contarlo, pero sé que fue un tema laboral.

— ¿Cómo son los códigos en la televisión hoy?

— Son muy pocas las personas que tienen códigos. Creo que uno de los pocos que quedan es mi viejo. Igual a veces se le va un poco la lengua, pero creo que -conociendo las cosas que se calla- es un tipo que tiene mucho código.

— ¿Cuál es el ranking de periodistas de espectáculos más prestigiosos? Si es que los hay…

— Para mí el número uno es mi viejo. Después me parece que Ángel De Brito. Jorge Rial en su momento fue número uno y sigue siendo para mí el número uno de la conducción, al margen de sus diferencias con mi papá. Siempre fue el mejor, lo he visto hacer programas con nada.

“Mi intención es amigarlo con Jorge Rial. Yo sé que mi papá se sentaría a tomar un café con él. El tema es ver si Jorge me atiende el teléfono”

— ¿Te genera algún prejuicio o algún malestar ser “el hijo de…”?

— Llevo con mucho orgullo el apellido de mi viejo, pero estoy intentado hacer mi camino. Tengo fe que en algún momento toda la gente me va a reconocer por Facundo Ventura y no por ser “hijo de”.

— ¿Qué es lo que más te cuesta en ese proceso de crecimiento?

— Decidí que tenía que alejarme un poquito de su figura para empezar a hacer mi propio camino. Sentí que estaba muy a la sombra de lo que era mi papá. Me parece que es algo que era inevitable porque mi viejo es una de las figuras más importantes del mundo del espectáculo, pero laburando con él era no me podía despegar. Me alejé del medio también y empecé a trabajar de chofer. Después volví.

— ¿Cuál fue la mayor pelea con tu padre?

— Soy de discutir mucho con mi papá. No sólo por trabajo, por temas de futbol, de la vida cotidiana, pero siempre con respeto. La pelea más grosa fue hace un año y medio que estuvimos un tiempo sin hablarnos. Después de ese lapso que estuvimos distanciados volvimos y la relación se fortaleció. Ahora no discutimos tanto como antes (risas).

“Tengo fe que en algún momento toda la gente me va a reconocer por Facundo Ventura y no por ser el ‘hijo de’”

Facundo: "Mi viejo es una de las figuras más importantes del mundo del espectáculo, pero laburando con él era no me podía" despegar". (Gutavo Gavotti)

Con una historia familiar atravesada por los medios y con sus propias experiencias a cuestas, Facundo mira para adelante con la convicción de seguir avanzando a paso firme en sus objetivos profesionales.

— ¿Qué te falta?

— Tengo todo lo que me hace feliz. Creo que uno llega al mundo con la finalidad de encontrar la receta de la felicidad y yo la encontré. Tengo a mi familia bien, tengo trabajo y salud. Tengo a mi novia que es una mujer increíble y me banca en todas. Hemos armado un equipo increíble juntos y me llevo excelente con su familia. Estoy laburando de algo que me gusta, lo disfruto, veo a mis amigos… Estoy muy feliz, Obviamente, siempre aspiro a seguir creciendo, perfeccionándome, pero estoy en un buen momento.

— ¿Te gustaría ser padre?

— Tengo muchísimas ganas. De hecho lo vengo hablando con mi novia hace tiempo. El día que tomemos la decisión quiero estar seguro de poder darle lo mejor, desde lo económico, el amor y el tiempo. Tener a cargo la vida de una persona es una responsabilidad enorme y quiero estar 100 por ciento preparado para afrontar una situación así.

— ¿Qué legado o mensaje te gustaría dejar en la próxima generación?

— Que no se vuelvan locos por la cámara, que la felicidad está en lo simple de las cosas. Que no hagan cualquier cosa para tener cuatro o cinco minutos de fama. Me parece que no lo vale la pena.

“Mi consejo es que no hagan cualquier cosa para tener unos minutos de fama”

Rodearse de los seres queridos y mantener la intimidad puertas adentro son las dos premisas que Facundo cumple a rajatabla, luego de las experiencias vividas con su familia. Aprendió a descifrar los códigos de la televisión, a alejarse cuando fue necesario y a forjar su propio camino aún con los beneficios y desventajas de llevar un apellido reconocido en el medio. La sencillez, para él, es la clave del éxito.

Mirá la entrevista completa:

Más Noticias