Claudio Omar García, conocido como el Turco García, es un exfutbolista y entrenador que tuvo una destacada trayectoria en el fútbol argentino. Disputó más de 400 partidos en Primera División y es considerado ídolo en Huracán y Racing.
Debutó en Huracán el 17 de agosto de 1980. Después jugó en Vélez Sarsfield hasta 1988, momento en el cual decidió probar suerte en el extranjero, incorporándose en el Olympique de Lyon, en Francia. “Tenga la camiseta que tenga, siempre me brindé y dejé todo”, recordó.
Formó parte de dos grandes planteles de la selección argentina, que ganaron la Copa América en 1991 y en 1993. También alzaron la Copa Rey Fahd en 1992. Entre los amigos que le dejó el fútbol siempre estará primero en su lista Diego Maradona, a quien recuerda no sólo como “el mejor jugador que vio” sino como un “gran compañero” que lo ayudó en su carrera.
Se retiró como jugador profesional en 2001, aunque siguió vinculado al mundo deportivo como director técnico en varios clubes. Un mal paso lo llevó a las adicciones y su vida, tal como la conocía, se derrumbó. Acompañado por su familia, ingresó a rehabilitación y recibió el alta en 2008.
Lejos de pasar de página, esa experiencia lo impulsó a crear una fundación para tratar a personas que sufren adicciones. “No me arrepiento de lo que viví porque de lo malo también se aprende y pude ayudar a un montón de gente”, explicó.
Multifacético y audaz en sus declaraciones, se hizo un lugar en la televisión. Concursó en el programa de cocina MasterChef Celebrity Argentina en 2020, durante la pandemia; fue panelista en Polémica en el bar; y participó del Hotel de los famosos, entre otros proyectos.
Actualmente, se volcó al streaming. Es conductor anfitrión en “Lo del Turco”, una especie de reality show donde reconocidos invitados del ámbito futbolístico y de espectáculos debaten sobre temas de actualidad, cuentan anécdotas y suceden situaciones insólitas.
Su mejor momento
El Turco recordó como el punto más álgido de su carrera su paso por Racing y la convocatoria para integrar la Selección entre los años 1991 y 1993.
“Vine de Francia en diciembre del ‘90 y en marzo del ‘91 me convoca el ‘Coco’ Basile para el combinado nacional. Fue el punto máximo que tuve como jugador cuando ganamos las dos Copa América en Chile y en Ecuador. También ganamos la Copa en Arabia Saudita en el ‘92″, relató.
“Era la selección del pueblo, del fútbol local. La gente nos conocía”, sostuvo. También, en su rol de ex integrante del combinado nacional, elogió al equipo actual. “Me pone feliz todo lo que pasó con esta Selección porque más allá de ser campeones, hicieron volver a las familias a las canchas y eso es maravilloso”.
Su peor momento
El consumo de cocaína se llevó cuatro años de su vida, pero el ex futbolista contó que hace 15 años que está rehabilitado y que nunca tuvo recaídas. “En las drogas entra mucha gente y salen muy pocos, lamentablemente”.
“Consumía lo suficiente para morirme”, afirmó el Turco y agradeció haber contado con el apoyo de su mujer, Mariela,y de sus seis hijos. Su paso inicial fue como el de muchos: “para probar”. Sin embargo, reconoce que antes de eso “nunca había tomado ni alcohol”.
“Con dos gramos de cocaína a diario estás al borde de un ACV, estás jugando con una bala a la ruleta rusa y te puede agarrar cualquier cosa. Lo más difícil es tomar la decisión de dejarla”, explicó.
En este contexto de ayudar a otros que están pasando actualmente por lo mismo, García remarcó que las drogas hacen que una persona “pierda los valores y la dignidad”. “A la cocaína la odio. Es cementerio, hospital o cárcel, pero yo elegí la vida”, reconoció.
Dejando todo ese dolor atrás, se siente feliz y en paz con la persona que es hoy. “Llegar a mi casa, apoyar la cabeza en la almohada y poder dormir es una alegría. Antes le decía a mi mujer: ‘Andá que yo me quedo mirando la pelea’y lo hacía para consumir”, recordó.
Maradona
Habiéndose cumplido tres años de la muerte de Diego Armando Maradona, el Turco lo recordó con cariño y lamentó las condiciones en las que el astro del fútbol se despidió de este mundo.
“La gente que lo rodeaba no era del fútbol y le prohibían hablar. Los pibes del ‘86 no lo podían llamar. A mí me cambiaron el teléfono 10 veces para que no lo pudiera ubicar”-
García recuerda que “la gente que estaba con él pensaba que era inmortal que no le iba a pasar nada”, pero que al verlo en declaraciones que realizaba en televisión o en la cancha, todos podían ver el deterioro en su salud.
“Todos decían en cualquier momento se muere. Y después cuando pasó: ‘No, no puede ser. ¿Cómo se va a morir?’”, explicó el ex jugador.
“Maradona tenía un baño ecológico, una casa que decían que valía tanto y no valía lo que pasaban de alquiler. Tenía que estar en un lugar digno y no había una ambulancia, un desfibrilador. Fue descuidado totalmente”.
En su deseo de poder compartir una vez más una charla con el Diez, el Turco relató lo que le hubiera gustado decirle. “Que esté con la gente del fútbol, con la gente que a él le hacía bien y con quienes pudiera hablar de fútbol. ¿Qué podía hablar con los que estaban con él en ese momento? De nada”, expresó decepcionado.
El fútbol y la política
Las internas de la AFA, las elecciones en Boca y las noticias que surgen casi a diario sobre los distintos clubes del país, evidencian un vínculo entre la política y el fútbol que muchas veces genera fuertes fricciones. ¿Qué opina el Turco de eso?
“Las cosas siempre se tiene que arreglar puertas adentro o callarlas; y es importante tener memoria cuando uno se porta bien con alguien”, remarcó.
En este contexto, el ex entrenador advirtió que la forma de ser una persona se refleja en todas las áreas de la vida y que se manifiesta en las buenas acciones que pueda realizar o en sus miserias.
“Cuando se habla de los códigos de vestuario es una mentira. Son los códigos de la vida no del vestuario. Vos sos en la vida como sos en todos lados”, sentenció.
Es que, precisamente, la vida es la sumatoria de aquellas experiencias, recuerdos y momentos tanto buenos como malos y el Turco es consciente de ese vaivén. Según explica, él decide aprender de todo y enfocarse en alcanzar el equilibrio y la felicidad en cada paso que da. Es por eso que, a sus 60 años, sigue reinventándose y abriéndose nuevos caminos, siempre atento a escuchar sus deseos.
Cuestionario Random
Leo: —¿El gol que te hubiera gustado hacer?
Turco: —El de Maradona a los ingleses.
Leo: —¿Pizza o pastas?
Turco: —Ninguna de las dos cosas.
Leo: —¿Asado o hamburguesas?
Turco: —Hamburguesas.
Leo: —¿Película favorita?
Turco: — Expreso de medianoche.
Leo: —¿Preferirías tener tres brazos o tres piernas?
Turco: —Tres piernas (risas).
Leo: —Tener sexo todos los días hasta los 70 años o una vez por semana hasta los 90.
Turco: —Tres veces por semana hasta los 80.
Leo: —El mejor jugador que viste en tu vida y el mejor jugador con el que compartiste cancha.
Turco: —Diego Armando Maradona el mejor que vi. Con el que más compartí cancha fue con Rubén Paz.
Leo: —Serías mejor DT o dirigente.
Turco: —DT.
Leo: —Además de Argentina, ¿Cuál es tu otro lugar en el mundo?
Turco: —En Francia viví muchas cosas, pero es un país muy frío. Colombia es hermoso. Cali me encanta, tiene montaña y mar.
Leo: —¿Arriba o abajo?
Turco: —Según la edad. Si estás jovencito siempre arriba.
Leo: —¿Preferís mentir o que te mientan?
Turco: —Que me mientan.
Leo: —¿Qué es peor ser infiel o que te sean infiel?
Turco: —Son dos preguntas jodidas. Ser infiel es muy de machista y que te sean infiel cuando estás enamorado es muy doloroso. Nunca me pasó que sepa. Ninguna de las dos cosas preferiría.
Leo: —¿En qué otra posición podrías haber sido bueno?
Turco: —En el arco.
Leo: —Imaginemos que acabás de perder todo lo que tenés, y quedas en la ruina. Y te regalan la posibilidad de jugar un partido para Independiente que te devuelve todo eso que perdiste. ¿Jugas o seguís en la ruina?
Turco: —Sigo en la ruina. Tengo dignidad.