Entrevistas para conocer la ‘Gente que cuenta’

La periodista e historiadora del arte Anatxu Zabalbeascoa presenta una colección de 27 entrevistas con personajes como la cantante Patti Smith, la directora de cine Isabel Coixet y la arquitecta Zaha Hadid. Aquí, un fragmento de este libro para que conozca más de la obra de esta autora

Guardar

Nuevo

Anatxu Zabalbeascoa es periodista e historiadora del arte con títulos por la Universidad Autónoma de Bellaterra (Barcelona) y The School of the Art Institute of Chicago, desde hace tiempo escribe sobre arquitectura y diseño en el diario El País de España
Anatxu Zabalbeascoa es periodista e historiadora del arte con títulos por la Universidad Autónoma de Bellaterra (Barcelona) y The School of the Art Institute of Chicago, desde hace tiempo escribe sobre arquitectura y diseño en el diario El País de España

La entrevista es uno de los géneros más exigentes del periodismo, no solo por el nivel de responsabilidad al enfrentar un personaje en nombre de un medio o proyecto, también porque requiere de un alto nivel de preparación y conciencia de variadas temáticas, actualidad, contextos, capacidad de interpelación, pero sobre todo porque pone a prueba las habilidades sociales de un periodista para, en medio de una conversación, lograr obtener la información que desea o requiere. Anatxu Zabalbeascoa es un referente en este campo, lleva toda una vida entrevistando a algunas de las personalidades más relevantes de la actualidad y que se destacan notablemente en sus campos de acción, ‘Gente que cuenta’, su más reciente lanzamiento literario es una muestra de eso.

Anatxu Zabalbeascoa, periodista y autora de 'Gente que cuenta' (2022)
Anatxu Zabalbeascoa, periodista y autora de 'Gente que cuenta' (2022)

Ya sea arte, literatura, diseño, deporte o música, Anatxu posee la experiencia para contar entre sus entrevistas más recordadas sus encuentros con la legendaria estrella de rock, escritora, activista e intelectual Patty Smith, el novelista Ian McEwan, la cineasta española Isabel Coixe, la escritora francesa Delphine de Vigan o el diseñador Miguel Milá, entre muchos otros, que quedan, como comenta la sinopsis de su libro, “retratados en su vulnerabilidad y en su grandeza”, en un compendio de veintisiete nombres destacados que se lee en clave de novela “para contar esa Gente que cuenta que, en realidad, somos todos”.

Portada de 'Gente que cuenta' (2022), Anatxu Zabalbeascoa,
Portada de 'Gente que cuenta' (2022), Anatxu Zabalbeascoa,

La barcelonesa Anatxu Zabalbeascoa es periodista e historiadora del arte con títulos por la Universidad Autónoma de Bellaterra (Barcelona) y The School of the Art Institute of Chicago, desde hace tiempo escribe sobre arquitectura y diseño en el diario El País de España y cada día se posiciona en el ámbito tanto periodístico, como artístico y editorial como un referente cultural. Esta autora ha escrito una amplia gama de libros tales como The new Spanish architecture (1992), su primer libro de arquitectura, una de sus grandes pasiones, la novela ‘En otros ojos’ (1995), la colección de relatos ‘Lo que piensan los perros’ (1999), pero no todo ha sido arte, diseño y cultura popular, ya que en el año 2007 publica algunos cuentos infantiles sobre ciudades: ‘Valentina en París’, ‘Valentina en Nueva York’, ‘Valentina en Barcelona’, ‘Valentina en Madrid’ (2009). Anatxu brilla además por ser la autora de la serie de títulos ‘El Maletín del Doctor Quitamiedos’: ‘Miedo a ser el primero’, ‘Miedo a Todo’, ‘Miedo a la oscuridad’ y ‘Miedo a los perros’ (2008). También del cuento Jaime y las gafas mágicas (2010).

‘Gente que cuenta’ reúne entrevistas caracterizadas por su marca personal, la aproximación a lo que los entrevistados nunca cuentan en entrevistas rutinarias, intimidad, revelaciones personales, tan oscuras, como luminosas, que conforman un emocionante relato del ser humano, más como persona que como personalidad.

Fragmento

‘Gente que cuenta’

Anatxu Zabalbeascoa

(Cortesía Editorial Círculo de tiza)

Patti Smith

«Hay que dar muchos pasos para conseguir ser libre».

Narradora, poeta y cantante underground, su historia viaja de la América rural al Nueva York de los años setenta. Sus libros, como su vida, están escritos con recuerdos de Robert Mapplethorpe —Éramos unos niños, que ganó el National Book Award, cuenta su relación antes de que el fotógrafo hiciera pública su homosexualidad— o Sam Shepard, dos de sus grandes amores. También Janis Joplin, Andy Warhol, Bob Dylan, Bruce Springsteen, con quien compuso Because the night, o William Burroughs, que le enseñó el secreto del arte: mantener un nombre limpio y no fingir.

La legendaria estrella de rock, escritora, activista e intelectual Patty Smith también está incluída en este libro que acompaña los diálogos con fotografías de los personajes. Foto: Editorial Círculo de tiza
La legendaria estrella de rock, escritora, activista e intelectual Patty Smith también está incluída en este libro que acompaña los diálogos con fotografías de los personajes. Foto: Editorial Círculo de tiza

Escritora, cantante, artista de la performance y pintora, si a Patti Smith (Chicago, setenta y tres años) se le pregunta cuántas Pattis coexisten, contesta con palabras de Walt Whitman: «Contenemos multitudes». Testigo de una Nueva York de alquileres baratos y «drogas que acabaron con mucha gente», entró en el mundo beat y el entorno warholiano cuando la fábrica de bicicletas de Nueva Jersey en la que trabajaba cerró y, con diecinueve años, se mudó al bajo Manhattan. Corría 1971 cuando el fotógrafo Robert Mapplethorpe la empujó a cantar sus poemas. Él, que terminaría convirtiéndose en un icono gay, fue uno de sus grandes amores. El dramaturgo Sam Shepard fue otro. Y por su marido, el guitarrista Fred Sonic Smith, abandonaría ese mundo para retirarse a criar a sus hijos en Detroit. Pero Sonic murió y «para alimentarlos» Smith regresó a los escenarios.

Tenía cuarenta y cuatro años. Con cincuenta y cinco comenzó a publicar sus memorias. Éramos unos niños (Lumen) narra con ternura y crudeza —explica que Mapplethorpe hacía de chapero para pagar el alquiler— la historia de amor entre ambos que, en su lecho de muerte, el fotógrafo le rogó que escribiera. Consiguió hacerlo en 2010, veintiún años después de que él muriera de sida. Vestida con ropa de hombre, representa la independencia y la sabiduría de saber vivir con poco. La conversación es telefónica. Habla desde su piso de Nueva York. En un recuento agónico, Joe Biden se ha confirmado como el nuevo presidente de su país. Le pregunto si tiene al lado un café, su «único vicio» aparece continuamente en sus libros y la marca Lavazza la ha nombrado embajadora cultural 175. Contesta que sí: «Negro, sin azúcar y con un poco de canela». Salió a la calle a cantar para animar a la gente a votar. En 2016 escribió que quienes callaron habían ganado las elecciones. ¿Quién ha ganado estas? La gente ha hablado. Nunca había votado tanta. Que la gente se movilice es el triunfo. Somos una sociedad que a veces tiene que despertar.

El amor a sus parejas, a su perro o a la memoria de sus padres define su escritura. ¿Necesitó subirse a un escenario y dar patadas para compensar tanto amor? Uno difícilmente puede mostrar su amor si no muestra su enfado. El enfado suele ser fruto de la búsqueda de la verdad, por eso la gente protesta en la calle. La música que hacemos comunica esas emociones. Entre sus amores pone a la misma altura a su perro Bambi y al dramaturgo Sam Shepard. Son dos de mis favoritos. Bambi se dejó atropellar cuando íbamos a darlo en adopción porque mi hermana pequeña era alérgica.

Cogí comida y salí con él. Durante un día recorrimos todos los lugares donde habíamos sido felices. Luego se puso delante del camión de quien lo iba a adoptar. Sam y yo fuimos una pareja salvaje. Siempre pude contar con él. Al final, cuando tenía ELA, fui a ayudarlo. Estábamos en la cocina. Bebíamos café. Le hice un bocadillo y él dijo: «Patti Lee, nos hemos convertido en una obra de Beckett». Siempre me llamaba con mi segundo nombre. Solo lo hacían mi madre, Johnny Depp y él. Es inclasificable, pero no ha sido cuestionada como artista. Como me aconsejó William Burroughs, he tratado de proteger mi nombre y no he mentido. Sin embargo, sí la cuestionaron personalmente cuando fue pareja de Mapplethorpe, cierta prensa publicó que era lesbiana. También me criticaron algunas feministas cuando me mudé a Detroit con mi marido para cuidar a mis hijos.

Guardar

Nuevo