Desde su estreno, Joy no ha dejado de escalar posiciones en el ranking global de Netflix, consolidándose como una de las películas más vistas de la plataforma. Inspirada en la historia real de Louise Joy Brown, el primer bebé concebido mediante fecundación in vitro (FIV), esta producción ilumina uno de los hitos más revolucionarios en la medicina reproductiva.
La película, dirigida por Ben Taylor, explora el arduo camino que llevó al nacimiento de Louise en 1978, destacando el trabajo pionero del científico Robert Edwards, el cirujano Patrick Steptoe y la enfermera y embrióloga Jean Purdy. Con un enfoque en los desafíos éticos, sociales y personales de la época, Joy no solo celebra el avance médico, sino que también reivindica la lucha por el reconocimiento de las mujeres en la ciencia, un tema central en la narrativa.
De qué se trata el film
Louise Joy Brown, el primer bebé nacido mediante fecundación in vitro (FIV), representa un hito en la medicina reproductiva que ha permitido que millones de personas en todo el mundo puedan concebir. La película Joy, recientemente estrenada en Netflix, narra la historia detrás de este avance científico, centrándose en los esfuerzos de un trío de pioneros británicos: el científico Robert Edwards, el cirujano Patrick Steptoe y la enfermera y embrióloga Jean Purdy. Esta producción cinematográfica busca arrojar luz sobre el arduo camino que llevó a la concepción de Louise en 1978.
La película, dirigida por Ben Taylor, se centra en la década de los 60 y 70, un período en el que la FIV era vista con escepticismo y enfrentaba una fuerte oposición tanto social como religiosa. Jean Purdy, interpretada por Thomasin McKenzie, desempeñó un papel crucial en el desarrollo de esta técnica, aunque su contribución fue ignorada durante mucho tiempo. Bill Nighy y James Norton completan el elenco principal, interpretando a Steptoe y Edwards, respectivamente.
La historia de la FIV no solo es un relato de innovación científica, sino también de lucha por el reconocimiento de las mujeres en la ciencia. A pesar de su papel fundamental, el nombre de Jean Purdy no fue incluido en la placa conmemorativa del hospital donde se realizó la primera intervención exitosa de FIV, un hecho que el propio Edwards lamentó públicamente.
En sus inicios, la FIV fue objeto de críticas y enfrentó obstáculos legales y financieros. En 1970, se denegaron fondos al proyecto bajo el argumento de la superpoblación mundial, y la iglesia católica expresó su preocupación por las implicaciones éticas de la técnica.
La película también aborda las implicaciones personales y sociales de la FIV, destacando cómo las mujeres que participaron en los ensayos iniciales enfrentaron el estigma y la desesperación. Thomasin McKenzie, quien interpreta a Purdy, ha hablado sobre la presión que sienten las mujeres respecto a la maternidad y cómo la FIV ha sido vista históricamente como un tema tabú.
El reconocimiento de los pioneros de la FIV llegó tarde. El Premio Nobel fue otorgado a Robert Edwards en 2010, cuando Steptoe y Purdy ya habían fallecido.
La historia de Louise Joy Brown y la FIV es un testimonio del poder de la perseverancia y la innovación científica. La película Joy busca no solo contar esta historia, sino también honrar a aquellos que, a pesar de las adversidades, hicieron posible un avance que ha cambiado la vida de millones de personas.