La más reciente apuesta de Netflix, Corte en el tiempo, ha escalado rápidamente a los primeros lugares en la plataforma, y no es difícil entender por qué. Esta película de terror psicológico juega con los hilos del destino y revive la nostalgia de los primeros años del 2000. La historia, protagonizada por Madison Bailey (Outer Banks) y Antonia Gentry (Ginny & Georgia), es tan inquietante como conmovedora, explorando hasta dónde llegaríamos para alterar el pasado y proteger a los que amamos. “Una adolescente viaja en el tiempo a principios de los años 2000 para impedir que un despiadado asesino mate a su hermana”, adlanta la sinopsis de este film no para de escalar puestos.
Un reloj de arena que lo cambia todo
Lucy Field (interpretada por Bailey) vive en el 2024, pero un viaje inesperado la transporta de vuelta al 2003, tan solo unos días antes del asesinato de su hermana Summer (Gentry). Al reencontrarse con su hermana mayor, a quien apenas conoció, Lucy se sumerge en un misterio que sacudió su ciudad y dejó una marca imborrable en su familia. Lucy se ve atrapada entre resolver el asesinato que destruyó la vida de sus padres y alterar un pasado que podría desintegrar su propio futuro.
El elemento central de la trama, un antiguo reloj de arena que Lucy y Summer encuentran, es el objeto que permite los viajes en el tiempo. Pero como suele suceder en estas historias, interferir en el pasado tiene sus consecuencias. Lucy descubre rápidamente que cada decisión que toma en el 2003 afecta de alguna manera su vida en el 2024, poniendo en peligro su propia existencia. ¿Podrá salvar a Summer sin alterar el futuro?
Una combinación de géneros que cautiva
Corte en el tiempo no es una película de terror convencional. Su director y creador, James Kline, ha logrado entrelazar horror psicológico y ciencia ficción con un toque de nostalgia. La trama lleva al espectador a una época que muchos recordarán con cariño, con referencias musicales y estéticas que nos trasladan a los días de Avril Lavigne, Hillary Duff y Michelle Branch. Sin embargo, la atmósfera se vuelve cada vez más opresiva, creando una sensación de amenaza constante mientras Lucy intenta salvar a su hermana sin destruir su propia línea temporal.
Una atmósfera que evoca los años 2000
Además del horror, la película ofrece a los espectadores una dosis de nostalgia. La ropa, la música y hasta los teléfonos antiguos son un regreso directo al 2003, haciendo que muchos millennials puedan identificarse con la época. Netflix ha sabido explotar la nostalgia de una manera efectiva, permitiendo que la audiencia más joven explore una era que, aunque reciente, parece lejana en muchos aspectos.
Corte en el tiempo es una combinación exitosa de terror psicológico, ciencia ficción y drama familiar, que juega con el concepto de los viajes en el tiempo de una manera innovadora y refrescante. Con una trama que toca temas universales como la pérdida, el arrepentimiento y el sacrificio, la película se perfila como una de las favoritas para quienes buscan algo más que un simple susto en Halloween. Disponible en Netflix, la película promete seguir dando de qué hablar en las próximas semanas.