Disney+ ha anunciado que LET IT BE, la emblemática película original de 1970 que documenta los últimos días de The Beatles, será reestrenada el 8 de mayo de 2024, marcando la primera ocasión en más de cinco décadas en que el filme está disponible para el público. Este lanzamiento se espera con gran anticipación, tras el renovado interés en la banda y su historia a raíz de la exitosa docuserie The Beatles: Get Back, también disponible en Disney+ desde 2021.
La película, dirigida por Michael Lindsay-Hogg y estelarizada por John Lennon, Paul McCartney, George Harrison y Ringo Starr, con la participación especial de Billy Preston, ofrece una perspectiva íntima y sin precedentes del proceso creativo del grupo británico, su último concierto en vivo sobre la azotea de Apple Corps en Londres, así como el desarrollo y grabación de su álbum final. La banda sonora del filme incluye temas icónicos que han dejado una huella indeleble en la historia de la música, como la canción que le da nombre al documental, “LET IT BE”, ganadora de un Oscar.
“Es justo que su película original tenga la última palabra... con una imagen y un sonido muchísimo mejor de los que tenía en 1970″, expresó Peter Jackson, responsable de la restauración del metraje y reconocido director de la reciente docuserie que ha iluminado con nueva luz los lazos de amistad y colaboración entre los miembros de la banda. La restauración se llevó a cabo por Park Road Post Production, usando tecnologías avanzadas para rescatar el negativo original de 16mm y remasterizar el sonido con técnicas de vanguardia, garantizando una experiencia inigualable para las nuevas generaciones y los fans de siempre.
Reflexionando sobre el impacto original de la película, Michael Lindsay-Hogg compartió: “La gente fue a ver la película con tristeza, pensando ‘Nunca más voy a ver a The Beatles actuar juntos’. Eso ensombreció mucho la percepción de la película”. Sin embargo, la revalorización de esta obra se ve potenciada por los testimonios retrospectivos y un entendimiento más profundo del significado que The Beatles tienen en el panorama cultural global, evidenciando la relevancia perdurable de su legado.
La colaboración entre Lindsay-Hogg y Peter Jackson se señala como un puente generacional que une dos visiones artísticas, ambas dedicadas a preservar y celebrar el fenómeno cultural que The Beatles representa. “LET IT BE es el clímax de Get Back y Get Back, a su vez, brinda un contexto vital que no estaba en LET IT BE”, afirmó Jackson, subrayando la interconexión entre ambos proyectos y el valor agregado que sus aportes colectivos otorgan a la narrativa histórica de la banda.
El estreno en los 70
La película Let It Be se estrenó el 20 de mayo de 1970 en el Reino Unido y el 13 de mayo de 1970 en Estados Unidos. Este documental musical fue dirigido por Michael Lindsay-Hogg y ofrece una mirada íntima a la grabación del último álbum de estudios de The Beatles, también titulado Let It Be. La película destaca por capturar las tensiones y desacuerdos entre los miembros de la banda durante las sesiones de grabación, así como por incluir el icónico concierto improvisado en la azotea de Apple Corps en Londres, que sería la última actuación pública de The Beatles juntos. A pesar de las críticas mixtas recibidas en su momento, Let It Be es hoy valorada por su crudo vistazo detrás de las escenas de una de las bandas más influyentes del siglo XX.
La producción de LET IT BE contó con Neil Aspinall como productor y The Beatles en la función de productores ejecutivos, sellando el proyecto con su visión creativa inigualable. La dirección de fotografía estuvo a cargo de Anthony B Richmond, asegurando que cada detalle visual contribuyera a la autenticidad y el impacto emocional del filme.
Con su lanzamiento exclusivo en Disney+, LET IT BE no solo promete ser un evento cinematográfico de gran relevancia para los seguidores de The Beatles en todo el mundo, sino que también se posiciona como un documento histórico esencial que ofrece una nueva perspectiva sobre una de las bandas más influyentes de todos los tiempos. Este reestreno es testamento del poder del arte para trascender generaciones, conectando con audiencias de toda edad y procedencia a través de la música universal de The Beatles.