Japón es un país que ha logrado posicionarse muy bien en la economía mundial, gracias a sus industrias tecnológicas como del entretenimiento. Sin embargo, hay un enorme costo detrás del éxito monetario de las empresas: la explotación laboral que se traduce en largas jornadas de trabajo, maltrato verbal, abuso sexual, entre otras problemáticas que afectan a los empleados actualmente. Zom 100: Bucket List of the Dead es un anime que se inspira en esta realidad para llevarla a terreno ficticio inesperado, el género zombi.
Akira es un joven japonés que está emocionado por dar sus primeros pasos en el sistema laboral. Es un novato inocente sin muchas experiencias de vida y, sobre todo, muy crédulo. Sin embargo, las cosas no salen como esperaba: no puede dejar la oficina hasta terminar todo su trabajo, su jefe le grita constantemente y, en ocasiones, debe dormir en su cubículo para finalizar sus tareas pendientes. Llega a casa a dormir un poco y vive en un estado de agotamiento constante. Su desdicha es tal que incluso contempla la idea de suicidarse en las vías del tren.
Su panorama es más que deprimente y, a tres años de laborar en la misma empresa, lo ve todo en escala de grises. La rutina ha perdido color, alegría y cualquier atisbo de sorpresa; todos los días son monótonos. La serie animada pone el foco en la realidad que viven muchas personas en Japón y en otras partes del mundo debido a la explotación laboral, al mismo tiempo que critica lo que en la realidad se silencia por miedo a ser visto como una simple queja.
Los zombis rescatan a los trabajadores del mundo
Distinto a lo habitual en las historias de muertos vivientes, Zom 100 aprovecha el recurso de los zombis para lanzar un salvavidas a su protagonista. Cuando Akira descubre que nunca más tendrá que ir al trabajo, su esperanza y felicidad regresan en medio del colapso del mundo por la propagación de un virus. Sus ojos no ven la sangre roja, sino extrañamente en paleta de colores. Ahora él podrá hacer lo que finalmente quiere y crea una lista de las 100 cosas que le gustaría cumplir antes de convertirse en un zombi.
Esta perspectiva única que ofrece el anime se asemeja a otros títulos centrados en el ámbito laboral, como Aggretsuko, pero opta por darle a su personaje principal un camino más liberador. Estuvo al borde del abismo, pero un apocalipsis le brindó la oportunidad de reinventarse. Así, con una motocicleta, una mochila y nuevos amigos, Akira se embarca en la aventura de cumplir sus sueños, después de haber vivido como un muerto en vida.
Los cuatro episodios de Zom 100 y su adaptación live-action, Cien cosas que quiero hacer antes de convertirme en zombi, se pueden ver en el catálogo de Netflix.
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