Una miniserie sólida de seis episodios puede ser un poco larga para resolver un caso que se ve desde un principio que no es tan complejo, pero pronto Niebla de invierno muestra que su intención va mucho más allá del misterio y su deseo es hacer un retrato demoledor de la sociedad en la que se desarrolla la historia. Vale la pena seguir cada capítulo para encontrarse con un relato descarnado de un grupo de personajes atrapados en un mundo de violencia, mentiras y tensiones sociales.
En una mañana de invierno con niebla, un chico y una chica que tienen sexo clandestino en un campo terminan descubriendo un cadáver al seguir los ladridos insistentes de un perro. Paul, el joven muerto, estaba a punto de casarse y su violento fallecimiento se produce dos días antes de la boda. Ahora dos policías deberán averiguar qué fue lo que pasó. El mejor amigo de Paul, Liam, también ha desaparecido. Las sospechas recaen sobre él y sobre el bohemio ex novio de la prometida de Paul. La investigación es más complicada de lo que parece y desenmascara la cara oculta de un lugar lleno de secretos.
La ficción es uno de esos sólidos productos de la India, donde lo policial se combina con lo dramático y expone una construcción social no tan conocida en occidente. La acción transcurre en Punjab y eso condiciona las reglas de comportamiento, la moral y la forma en la cual se investiga un caso. Para un espectador no acostumbrado a estas historias, resultará sorprendente la violencia que ejercen los policías, en particular el más joven, a lo largo de toda la trama. Sin que signifique nada para sus colegas, es tomado -sin ser festejado tampoco- como una forma de investigación más.
También gana mucho Niebla en invierno al retratar de forma minuciosa a sus dos policías. La vida atormentada, su ambigüedad y sus traumas son parte esencial para que la miniserie funcione. Todos los personajes centrales tienen esa complejidad, lo que arma un retrato social y psicológico que pocas producciones televisivas tienen. No es una serie para encontrar un héroe con quién identificarse, pero queda claro que los dos agentes intentan llegar a la verdad aunque no sea agradable para nadie.
Niebla de invierno es una serie ideal para los que disfrutaron, por ejemplo, de Delhi Crime. La India se atreve cada día más a cuestionar sus instituciones y mostrar sin concesiones el lado más oscuro de sus ciudades y culturas. En seis episodios no sólo se puede disfrutar de un misterio policial, sino también conocer más cómo está armado un lugar del que gracias al streaming hoy podemos conocer mejor que nunca a través de sus ficciones y documentales.
Está disponible para ver en la plataforma Netflix.
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