Una comedia romántica de menos de dos horas para resignificar el amor verdadero

A pocos días de haberse estrenado, Felicidad para principiantes (Happiness for Beginners) se convirtió en uno de los títulos más vistos en la plataforma. La historia se centra en el personaje de Helen (interpretada por Ellie Kemper), quien decide adentrarse en la naturaleza con un grupo de desconocidos, como una manera de terminar con el duelo de su reciente divorcio. A pesar de que se trata de una comedia impregnada de clichés, la película brinda al espectador una cómoda sensación de bienestar.

La llegada de Helen a este grupo de senderismo tiene una cuota de sorpresa ya que se encuentra Jake (Luke Grimes), el mejor amigo de su hermano. Le parece un tanto extraño que este muchacho haya dado en el mismo lugar que ella. Pero enseguida el espectador entenderá que el interés del joven es meramente amoroso, ya que hace años que ama en secreto a la protagonista. Esta última tardará mucho en darse cuenta de ello. Jake es el antídoto perfecto para el carácter a veces agrio de Helen, convirtiéndose en su perfecto complemento.

Dentro de la trama, la evolución de Helen es una montaña rusa. Aunque el personaje tiene momentos que rozan con lo desagradable, el talento de Kemper logra que el público le de una segunda oportunidad. Sin embargo, la narrativa no brinda mucho trasfondo para entenderla. Es como si el film se apresurara a barrer debajo de la alfombra cualquier trauma para dar paso a algo más ameno, más feel-good.

El grupo de excursionistas es quizá el mayor acierto de Felicidad para principiantes. Cada uno con sus propias peculiaridades, estos personajes logran arrancar carcajadas y también reflexiones, mostrando que las primeras impresiones pueden ser engañosas.

Un detalle a destacar es cómo la película se enfrenta a esos estereotipos con una secuencia en la que los personajes eligen nombres basados en sus personalidades. Es un guiño simpático que muestra que todos llevamos etiquetas, pero que hay mucho más bajo la superficie.

Además, se beneficia de una estética visual y sonora que evoca calidez. La fotografía de Daniel Vecchione destila sencillez y encanto, y la banda sonora acompaña de manera alegre cada paso que da Helen en su travesía. Sin pretensiones de ser un peso pesado en el cine, Felicidad para principiantes cumple su propósito de entretener y provocar sonrisas.

Se trata de una actriz y comediante estadounidense conocida principalmente por su papel de Erin Hannon en la serie de televisión The Office y por protagonizar Unbreakable Kimmy Schmidt, una comedia original de Netflix. Nacida en Kansas City y graduada de la Universidad de Princeton, Kemper inició su carrera en la comedia antes de conseguir roles en televisión y cine, consolidándose como una de las actrices cómicas más destacadas de su generación.

Seguir leyendo: