¿Qué pasaría si el agua, el fuego, el aire y la tierra cobraran vida? A través de la película animada Elementos (Elemental), el director Peter Sohn asigna características particulares a cada uno de ellos y los humaniza. Así, tenemos a Ember, una muchacha de fuego que es ingeniosa y racional, pero que lucha por controlar su carácter. Por otro lado, aparece Wade, un joven de agua que es emocional al extremo, pero tiene un optimismo contagioso. ¿Qué probabilidades habría de que estos individuos de mundos diferentes se enamoraran? “¡Los elementos no se mezclan!”, repite la propia Ember una y otra vez.
“Los dos personajes tienen vacíos en sus vidas. Algo les falta. Pero para Ember, Wade es como un espejo”, explicó su creador en entrevista con Infobae. “Lo que amé de ello es que Ember comienza a verse de una forma diferente a través de Wade. Eso le mostró a Ember cuánto más tenía por explorar y descubrir sobre sí misma; y amo cuando las relaciones pueden resaltar esas partes de nosotros que no sabíamos que estaban ahí”.
Mucho de la historia está inspirada en la vida de su realizador. Los padres de Sohn emigraron de Corea del Sur a los Estados Unidos en los años setenta y criaron a su familia en tierras norteamericanas. Según relató en medios, lo último que le dijo su abuela antes de morir fue: “Cásate con una coreana”. Su familia quedó sorprendida cuando él terminó enamorándose de una estadounidense. Tal conflicto se replica en la ficción a través del padre de Ember, quien se opone rotundamente a que “el fuego se diluya”.
Sin embargo, el romance es solo una arista de la película animada, pues esta también aborda temas sobre las diferencias culturales, la migración y los sueños reales de sus protagonistas. Para la jovencita de fulgurante cabellera, lo peor que podría pasar sería decepcionar a su progenitor, quien sacrificó años y recursos para establecer un negocio propio en Ciudad Elementos.
¿Qué pasaría si Sohn pudiera hablar con Ember? “Le diría: ‘¡Oh, por Dios, te entiendo completamente! Entiendo lo difícil que fue para nuestros padres y cuán agradecidos y orgullosos estamos por lo que ellos lograron para brindarnos esta vida’”, expresó el director, dibujante y actor de voz que ha trabajado con Pixar desde el año 2000.
“Esta idea de identidad y lo que depara el futuro es una historia clásica, pero yo también tengo hijos y quisiera que ellos sepan que el mundo es rico en diversidad. Tratar de encontrar tu camino y tu propia voz en él siempre será una ventaja. Es una forma poderosa de ver el mundo”, añadió.
El largometraje que llegó a Argentina el 15 de junio y que se estrenará en el resto de América Latina el día 22, es el resultado de casi siete años de trabajo. Denise Ream, productora con créditos en Up, Cars 2 y The Good Dinosaur, contó que el mayor reto del proyecto fue encontrar la apariencia perfecta de los cuatro elementos. “Pensamos que los del fuego serían los más difíciles, pero al final la animación del agua fue realmente compleja de hacer, porque Wade refleja y refracta. Entonces, encontrar el diseño ideal fue un desafío y nos tomó la mayor parte de la película llevarlo a como finalmente quedó”.
A través de Wade y Ember, el relato aspira a que se cuestione el temor a las diferencias que encontramos en la vida cotidiana —no solo en el plano de las culturas o la apariencia— sino también en cuanto a personalidades y sueños. “También se busca reconocer más lo que nuestras familias hacen por nosotros. Sus sacrificios, espero que algo de ello pueda quedar en el público”, enfatizó Ream.
Puedes ver Elementos en cines de América Latina desde el 22 de junio. Ya está en cartelera en Argentina, Uruguay y Puerto Rico.
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