Otra obra maestra de cómo llevar un videojuego a la pantalla chica que puede verse en Netflix

En las últimas semanas, The Last of Us ha llamado la atención de espectadores por ser una brillante adaptación del videojuego homónimo a la televisión. Cyberpunk: Edgerunners es una prueba más de que este tipo de proyectos pueden ver la luz con una notable calidad y respeto a su material base. Aunque, a diferencia del título posapocalíptico, esta ficción futurista contiene una historia puramente original creada en forma de un anime para Netflix.

Cyberpunk 2077 es un videojuego de ciencia ficción y primera persona desarrollado por CD Projekt RED que no tuvo un gran éxito en su lanzamiento a finales de 2020. Incluso hasta la actualidad, no deja de ser complejo pensar en grande para soltar al mundo una producción de mundo abierto sin encontrar fallas en el camino (hasta la fecha, ni The Elder Scrolls VI ni Grand Theft Auto 6 ven la luz tras varios años de sus primeros anuncios).

Sin embargo, es el propio estilo de “escoge tu propia aventura” que permite que los proyectos derivados convertidos en series sean relatos independientes. Ocurrió algo similar con Arcane, una serie inspirada en el multijugador League of Legends que se compone de sus personajes originales, pero los hace más profundos en una trama que enganchó a más de uno en la plataforma de la “N”.

¿Qué hace diferente y tan especial Cyberpunk: Edgerunners ante estas otras propuestas? Principalmente, el mayor desafío que encuentra en el camino –y que logra superar– es ser clasificada dentro del abarrotado género de anime japonés. Se pensaría que el 2D no es suficiente para plasmar la misma estética del mundo ciberpunk que encontramos en una consola de video, pero la animación termina por convencer con su multiplicidad de colores vibrantes y escenas de acción que recuerdan mucho a las clásicas Akira y Ghost in the Shell.

Por otro lado, conocemos a un protagonista que no aparece en el canon (solo es mencionado): David Martínez, un adolescente pobre que se ve obligado a abandonar la escuela luego de quedar huérfano. Lo encantador de seguir la aventura de David es que él mismo va madurando frente a nuestros ojos, de un niño engreído y poco interesado en ser alguien importante a un ciberpunk que quiere ganar el respeto otros mercenarios y proteger a Lucy, su gran amor.

La primera forma de ganar dinero que encuentra el joven es vender el Sandevistan, un artefacto que su madre, quien trabajaba como enfermera, trajo a casa antes de morir. Pese a nunca haber modificado su cuerpo como la mayoría de las personas en este universo, él opta por someterse a una cirugía que adapte esta potente arma a su cuerpo y vengarse del chico abusivo que le dio una paliza en la escuela. Lo logra y allí comienza su travesía por las calles.

El anime se ambienta en un mundo futurista donde los seres humanos tienen incorporadas partes robóticas, ya sean armas u otros accesorios útiles que les otorgan habilidades especiales. Los primeros planos de David saliendo de casa muestran la decadencia misma de la sociedad a causa de la tecnología y el capitalismo. Sobre este último, la serie animada hace una enorme crítica desde el episodio uno.

Cuando David y su madre, Gloria, se ven involucrados en un ataque entre dos bandas criminales en la autopista, ella pierde el control del auto y chocan. Al ver llegar al equipo de emergencias, él respira tranquilo porque podrán salvarla; pero, los agentes se retiran cuando caen en cuenta que ella no cuenta con un plan completo de seguro de salud. La mujer termina siendo atendida por una especie de hospital público para usuarios de bajos recursos.

De la forma más fría, se le comunica a David que su madre falleció por la falta de atención médica calificada y aún tiene que pagar los costos de atención. El protagonista no tiene ni una pausa para llorar hasta el momento en que decide cambiar por completo su vida gracias al Sandevistan. La tristeza no se asoma ni un poco hasta que avancemos un poco más en la historia y aterricemos en un emotivo punto final, todo ello en compañía de la fantástica banda sonora de Akira Yamaoka (Silent Hill).

Los diez capítulos de Cyberpunk: Edgerunners, producida por CD Projekt RED y animada por Studio Trigger (Kill la Kill), están disponibles para ver en Netflix.

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