“The Last of Us”: el Cordyceps y 4 claves más del segundo episodio

El pasado 22 de enero, se lanzó el segundo episodio de The Last of Us en HBO y la plataforma HBO Max. Creada por Craig Mazin (Chernobyl) y Neil Druckmann (el director de los videojuegos), la serie sigue a Joel y Ellie –interpretados respectivamente por Pedro Pascal y Bella Ramsey– en un largo viaje por Estados Unidos con el propósito de salvar a la humanidad del virus Cordyceps.

Previamente, la audiencia pudo conocer de cerca el origen de Joel Miller y qué lo llevó a convertirse en un hombre tan frío en un mundo posapocalíptico. Ha pasado cierto tiempo desde que pudo comunicarse con su hermano, Tommy (Gabriel Luna), y esa será la razón por la que buscará la forma de dirigirse hacia donde él está con la ayuda de Tess (Anna Torv), su amiga más cercana. Sin embargo, en el camino deciden hacer un favor a Marlene (Merle Dandridge), la líder de las Luciérnagas, a cambio de todo lo que necesiten. Este encargo será transportar a Ellie, una adolescente de 14 años.

Los primeros minutos del capítulo dos nos ofrece otra perspectiva del origen de la pandemia: la mutación del virus Cordyceps y el alojamiento de este en cuerpos de seres humanos vivos o muertos. En Yakarta (capital de Indonesia), comienza a esparcirse este virus y la profesora de Micología Ibu Ratna es una de las primeras en saber. Ella advierte a las autoridades que no hay una vacuna ni una cura, su consejo final y sin titubeo alguno es que deberían bombardear toda la ciudad.

Durante una conversación, Tess indaga un poco más sobre Ellie y el lugar en el que fue mordida. La mujer pregunta a la adolescente si es que estuvo sola en ese momento y ella responde que sí, sin embargo, se sabe que el DLC The Last of Us: Left Behind será adaptado también dentro de la narrativa de la serie de HBO. Allí se cuenta la historia de cómo Ellie fue mordida en una escapada junto a su mejor amiga Riley (quien será interpretada por Storm Reid en la adaptación), una joven que huyó de la escuela de FEDRA y se unió a las Luciérnagas.

Para quienes jugaron antes The Last of Us, la escena del hotel mantiene la esencia de esta misma que se vio en el título de PlayStation. Ellie bromea e imagina una conversación entre un huésped y la recepción, además de encontrar un muerto entre los escombros. Por otro lado, muchos notaron las referencias a la jugabilidad del juego como ayudarse a trepar el uno al otro por lugares altos o mover objetos pesados frente a las puertas.

Uno de los momentos de más tensión en el nuevo episodio ocurre dentro del museo, lugar donde Joel, Tess y Ellie encontrarán dos chasqueadores (llamados clickers en inglés). Se trata de una forma más evolucionada de un infectado, son ciegos y utilizan la ecolocalización para encontrar a sus posibles víctimas. En cuanto a su apariencia, solo mantienen sus dientes y el resto del rostro es ocupado por el creciente hongo que proviene de sus cerebros.

Dentro del museo, Tess fue mordida y no dijo nada hasta que llegaron al punto donde debían encontrarse con las Luciérnagas (quienes habían sido asesinados por FEDRA antes). Ella decide sacrificarse para lograr que Joel y Ellie escapen a salvo, minutos antes de morir le suplica al hombre que crea en la posibilidad de salvar al mundo con esta misión y siga adelante sin importar el costo.

De esta manera, Joel se convierte en el único que se tendrá que hacer cargo de Ellie de aquí hacia adelante. Antes de que ambos escapen, Tess le recomienda buscar a Bill por ayuda, así que, veremos que los dos sobrevivientes viajarán hacia donde se encuentra este personaje de la misma manera que se vio en el videojuego.

El tercer episodio de The Last of Us se podrá ver el 29 de enero en HBO y HBO Max.

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