La carrera de Tom Hanks no podría resumirse en un par de películas. Resulta una tarea imposible determinar cuál es su mejor actuación. ¿Es Forrest Gump?¿Filadelfia? ¿O tal vez Naufrago o Rescatando al soldado Ryan? Hanks es cada uno de sus roles y todos a la vez. Y la industria no hace más que llenarlo de elogios (todos merecidos) y nominarlo cada vez que puede a alguna premiación.
Lo cierto es que Netflix acaba de sumar a su gran biblioteca de películas un film que el actor de Sintonía de amor realizó en 2019 y por el que recibió una nueva nominación a los Oscar. Se trata de la biopic de Fred Rogers (una figura ya mítica de la televisión estadounidense) llamada Un buen día en el vecindario (A Beautiful Day in the Neighborhood) en la que Hanks asume el rol del conductor.
Rogers condujo durante una gran cantidad de años (desde 1968 a 2001) el show Mister Rogers’ Neighborhood que iba dirigido a una audiencia infantil y también familiar. Esta biopic dirigida por Marielle Heller (¿Podrás perdonarme?) contaba también la historia de un periodista de la revista Esquire llamado Lloyd Vogel (interpretado por Matthew Rhys, The Americans, Perry Mason) que decide armar un perfil de Rogers.
Mientras el conductor es un hombre sensible, empático y tierno con todos, Vogel está enfrentando los desafíos de su reciente paternidad ya que acaba de tener un bebé con su mujer Andrea (interpretada por Susan Kelechi Watson, Beth en la serie This is Us) y un sentimiento tenso irresuelto con su padre padre (Chris Cooper) del que está alejado, luego de que los abandonara cuando era un pequeño. Esta tarea periodística va a ir más allá de un simple retrato de una estrella televisiva que se escriba en una revista, sino que empujará Lloyd a conectarse con aquellas cosas que lo hacen un verdadero ser humano.
Un buen día en el vecindario es de aquellas películas que podrían denominarse como un canto a la vida y a la idea de disfrutar cada segundo de nuestra existencia sin generarse tanto problema. Tom Hanks vuelve a dar una clase magistral de actuación eligiendo cada gesto y mirada de manera precisa. Seguramente cada espectador se quede tarareando y cantando la canción que identificaba al show (It´s a beautiful day in the neigborhood, a beautiful in the neigborghood...) durante varias horas.
Fred Rogers estuvo casado con Joanne Rogers (en el film es encarnada por la actriz Maryann Plunkett) la misma mujer desde 1952 quien lo acompañó hasta su muerte en 2003 y con quien tuvieron dos hijos. Es la historia de un hombre simple que les hablaba a todos de igual a igual y supo conquistar el corazón de aquellos que deseaban encontrar un buen amigo en la pantalla. Esta película funciona como un homenaje a la figura de este hombre que habitó de alguna manera los hogares de millones de estadounidenses sin distinción de edad ni clase social.
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