Al Pacino es para varias generaciones de espectadores uno de los más grandes actores de todos los tiempos. Su esplendor indiscutible en la década del setenta le hubiera alcanzado para mantener para siempre ese estatus, pero luego de algunos tropiezos en su carrera se pudo reinventar, incluso más de una vez. Ahora, a los 82 años, sigue siendo una estrella respetada y querida, logrando en la actualidad varios roles de primer nivel que permiten que lo conozcan las nuevas generaciones.
Pacino es de los actores que se hizo solo. Trabajó mucho antes de lograr vivir de la actuación, desde ser acomodador de cine a tener una empresa de mudanzas, vivió en carne propia el camino difícil hasta lo más alto.
Padres divorciados, una infancia con limitaciones económicas, la pérdida de su madre y su abuelo, sus familiares más importantes, cuando recién comenzaba su carrera: todo eso le enseñó al actor lo difícil que era el mundo. Lo que aprendió en las calles y las profesiones que tuvo, también le sirvió para construir muchos de sus personajes.
Una vez que comenzó su trabajo en teatro las cosas empezaron a encaminarse y fue en 1972 cuando su rol de Michael Corleone en El Padrino lo cambiaría todo.
Al Pacino sería el rey en la década del setenta, junto a Robert De Niro, con quien parecían tener una silenciosa competencia a lo largo de los años. Sus mejores títulos de esa década incluyen: Pánico en el parque (1971), El padrino (1972), Serpico (1973), El padrino II (1974), Tarde de perros (1975) y Justicia para todos (1979). Mejor imposible.
En los ochenta hizo algunos proyectos arriesgados que fracasaron en la taquilla o con la crítica, como es el caso de Cruising (1980), Scarface (1983) y Revolución (1984), y aunque algunos de ellas hoy son películas de culto, el actor decidió suspender su carrera cinematográfica durante un lustro. Regresó con una película aparentemente menor, Prohibida obsesión (Sea of Love, 1989) y su carrera volvió a lo más alto sin problemas. A pesar de sus nominaciones nunca había ganado un Oscar y fue justamente en ese regreso que ganó el premio por su trabajo en una remake, Perfume de mujer (1992).
De esa época también son El padrino III (1990), Frankie & Johnny (1991), Carlito’s Way (1993) y Fuego contra fuego (1995). Enumerar todos sus trabajos sería mucho, porque además descubrió, en la era del cable y ahora en el streaming, un nuevo lugar para lucirse como actor, a veces protagónico, a veces secundario. Venerado por los nuevos directores y también por los veteranos, sus trabajos más recientes incluyen Había una vez… en Hollywood (2018) de Quentin Tarantino y El irlandés (2019) de Martin Scorsese.
Pero la mejor manera de festejar a un actor es ver su trabajo, por eso a continuación te ofrecemos una selección de lo mejor que hay de Al Pacino para ver en streaming. Algunos clásicos no siempre están disponibles, otros están en varios servicios a la vez.
HBO Max: Scarface, Tarde de perros, Un domingo cualquiera, El abogado del diablo. También tres películas hechas para televisión: Paterno, You Don’t Know Jack y Phil Spector.
Netflix: Fuego contra fuego, Scarface y El irlandés.
Star Plus: Fuego contra fuego, Serpico.
Prime Video: Perfume de mujer, El abogado del diablo, Scarface, Fuego contra fuego y la serie Hunters.
QubitTV: Revolución.
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