Sabrina Ouazani y Ramzy Bedia en los papeles de Zohra y Omar, respectivamente, son los protagonistas de la nueva película de Mabrouk El Mechri (JCVD y La fría luz del día), un largometraje escrito por el propio cineasta en el que realiza una especie de reinterpretación moderna del filme clásico Karate Kid. Esta historia gira en torno a una ama de casa (interpretada por Sabrina), quien aprenderá kung-fu para defenderse de los abusos de su marido (Ramzy). El encargado de entrenarla será Chang Sue, quien se convertirá en una especie de señor Miyagi.
Zohra es el personaje principal y ella está convencida de que la ruptura de su matrimonio le rompería el corazón a su nieta. Por esta razón no logra dejar a su esposo, Omar, a pesar de la violencia a la que es sometida casi a diario. Pero cuando conoce a un maestro de kung-fu, ella decide aprender este arte marcial para defenderse y luchar a partir de ese momento para no seguir siendo maltratada. La química entre los actores hacen que en las imágenes se vea reflejado el trabajo tan detallado que realizan en cada puesta en escena.
Los protagonistas de este largometraje cuentan con una amplia trayectoria cinematográfica. Por ejemplo, Sabrina Ouazani empezó su carrera a la edad de 16 años al protagonizar La escurridiza. También ha participado en películas como París, Tangerine, La Source des femmes, Incompatibles, Escuadrón de élite, Historias de una indecisa y Enemigos íntimos. Por su parte, Ramzy Bedia es un actor, guionista y director de cine francés de ascendencia argelina. Comenzó su carrera como comediante en 1994 y ha participado en filmes como ¿Queda jamón?, Policía estatal Halal, Taxi 5, Brutus vs Caesar y Zaï zaï zaï zaï.
La trama de esta historia es narrada con mucho humor, y sobre todo, las escenas con peleas están bien logradas. Esta película se presentó en preestreno en el festival Cinemed de Montpellier el año pasado.
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