Cuatro series que puedes ver si te gustó “Emily in Paris”

Con dos semanas en el Top 10 de las series de Netflix —casi 92 millones de horas de visualización, lo cual la ubica en el tercer puesto—, la segunda temporada de la serie creada por Darren Star (Sex and the City) vuelve a mostrar a Emily (Lily Collins) en sus aventuras por París, mientras trata de darle una perspectiva americana a Savoir, una empresa de marketing de lujo.

El choque cultural entre una muchacha criada en el Midwest de los Estados Unidos y una de las ciudades del mundo más sofisticadas en lo cultural y más complejas en lo social ha hecho que, luego de críticas (sobre todo de los franceses), Emily in Paris se convirtiera en un fenómeno de popularidad. Pero con 10 episodios en una temporada y otros 10 en la segunda, muchos fans han agotado rápidamente la comedia en la que también trabajan Philippine Leroy-Beaulieu, Ashley Park, Lucas Bravo, Samuel Arnold, Bruno Gouery, Camille Razat y William Abadie. Estas opciones son un buen match para llenar el vacío que deja el final de esta ficción.

Zoey’s Extraordinary Playlist - HBO Max

Zoey es una de las muchas programadoras que trabaja en San Francisco. Pero se convierte en una persona fuera de lo común cuando algo sale mal en una resonancia magnética. Para hacer el proceso menos desagradable, los médicos le pasan música; pero en pleno escaneo del cerebro de Zoey un terremoto sacude la costa oeste de los Estados Unidos. El sistema se sobrecarga y Zoey recibe un alud de música; pronto se da cuenta que ha quedado con el poder de conocer los pensamientos íntimos de las personas. Con una particularidad: como números musicales que sólo ella ve y escucha.

Si te gustó la frescura de Emily in Paris, Zoey’s Extraordinary Playlist te va a enamorar. Junto a Jane Levy en el papel protagónico, el elenco abunda en actuaciones celebradas por la crítica: Alex Newell (Glee) es la persona a la que Zoey confía su secreto, Mo, de género fluido; Skylar Astin (Crazy Ex-Girlfriend) es el mejor amigo y compañero de trabajo de ella, Max; Lauren Graham (Gilmore Girls) es su helada jefa y Peter Gallagher (Grace and Frankie, Grey’s Anatomy) y Mary Steenburgen son sus padres.

Los números musicales son sencillos y encantadores, y compensan de algún modo la densidad de algunos temas de esta dramedia, como el ambiente laboral en tecnología, el racismo y la enfermedad. Por ejemplo, Mitch, el padre de Zoey, tiene una enfermedad neurológica por la cual está atrapado en su propio cuerpo, pero desde el accidente en el resonador Zoey puede verlo bailando en la sala, y entender sus emociones.

Flack - Amazon Prime Video

El primer episodio de la serie muestra a un hombre desnudo e inconsciente en el suelo, al que Robyn (Anna Paquin) le practica resucitación cardio-vascular mientras una estrella del equipo de fútbol Chelsea se desespera a un lado: ha guardado su homosexualidad como un secreto. Así se presenta, brutalmente, el oficio de Robyn: trabaja en una firma de relaciones públicas que se dedica a arreglar los desastres que dejan a su paso algunos atletas, artistas y otras figuras públicas. Su código de ética es flexible: hay que hacer lo que sea necesario para que el cliente ofrezca una buena imagen.

Como en Emily en Paris, Robyn es una expatriada: nació y creció en Filadelfia, Estados Unidos, pero vive y desarrolla su carrera en Londres. Su especialidad son las celebridades: nadie la supera en el manejo de crisis. La acompañan una jefa (Caroline, interpretada por Sophie Okonedo) que recuerda a Miranda Priestly, el personaje de Meryl Streep en El diablo se viste a la moda, y su compañera Eve (Lydia Wilson), su socia malhablada e incondicional en operaciones como crear un video sexual falso. El compás moral queda a cargo de Melody (Rebecca Benson), la pasante que, además de sufrir todo lo que sufre una pasante, funciona como un espejo de Robyn antes de que años de su trabajo la cubrieran de cinismo.

“Eres complicada”, le dice una celebridad de la gastronomía, que quiere ocultar su adicción al sexo: en efecto, Robyn tiene una relación compleja con su madre, con la que ha querido poner un océano de por medio. Ella, que es capaz de enseñar expresiones de agrado y emoción a actores que probablemente perderán un premio y no pueden mostrar frustración o envidia, lo arregla todo, excepto a sí misma.

Jane by Design - Disney+

Si te interesan las historias de mujeres jóvenes que se abren camino en el mundo, Jane by Design es un título imprescindible. Cuenta la historia de una adolescente, Jane Quimby (Erica Dasher), que desde la muerte de sus padres vive con su hermano Ben (David Clayton Rogers) y necesita conseguir un empleo para ayudar a pagar la hipoteca de la casa. Se postula para un pasantía en una empresa de diseño de moda y por accidente, ya que la confunden con una adulta, la contratan como asistente ejecutiva de Gray Chandler Murray (Andie MacDowell), famoso nombre de la alta costura británica.

Jane se aferra a la oportunidad que le ha dado este malentendido: a la vez evitar la ejecución hipotecaria de su casa y trabajar en lo que ama. Se dispone entonces a hacer una suerte de inmersión en la edad de las responsabilidades al mismo tiempo que termina sus estudios secundarios. Lo mínimo que se puede decir es que esta doble vida, que además es secreta, le resulta muy trabajoso.

La vida de oficina le resulta muy entretenida, acaso demasiado, gracias a la diseñadora en ascenso India Jourdain (India de Beaufort), entrometida y envidiosa de Gray; también la atrae otro diseñador, Jeremy Jones (Rowly Dennis), que le ve mucho potencial en el mundo de la moda.

Call My Agent - Netflix

Y si lo que te sucede es que te has quedado con ganas de más París, esta dramedia francesa (Dix pour cent es su título original) es lo que necesitas. Las estrellas invitadas, además, son una eficaz introducción al cine francés: Isabelle Huppert, Juliette Binoche, Charlotte Gainsbourg, Isabelle Adjani, Jean Reno, Monica Bellucci, Jean Dujardin entre muchos otros.

Samuel Kerr, el fundador de la agencia de talento que lleva su nombre (ASK) ha muerto y sus cuatro colaboradores principales, Andréa (Camille Cottin), Gabriel (Grégory Montel), Mathias (Thibault de Montalembert) y Arlette (Liliane Rovère) harán lo necesario para mantener la oficina en funcionamiento: además de su trabajo de representantes se los verá como choferes, entrenadores, confesores y baby sitters de las celebridades.

Si bien suelen competir entre ellos, en general están unidos por la voluntad de salir adelante en el espacio inestable que tienen en común la fama y las artes. Siempre agotados de trabajo, los agentes y sus empleados tienen también vidas privadas que se alternan en la narrativa principal con los tormentos que pasan 24/7 para mantener a los actores, los directores y los productores felices, esquivando los golpes del esnobismo y la competencia feroz.

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