“Maradona: sueño bendito” es la serie sobre el astro del fútbol argentino que recorre toda la vida de uno de los mejores deportistas argentinos. Desde aquellos orígenes muy humildes en Villa Fiorito, donde vivía en la precariedad con sus padres, doña Tota y don Diego, y todos sus hermanos, hasta el primer sueldo y la llegada a Argentinos Juniors que le permitió tener la primera casa para su familia. La vida de Diego Maradona la conocimos bastante por sus desbordes y esa necesidad de estar siempre en el límite. Las fiestas, los excesos, el consumo de drogas y las constantes relaciones extramatrimoniales, opacaban de alguna manera la genialidad en las piernas de este hombre surgido de los cebollitas.
En los siete primeros episodios los espectadores fueron testigos de todo el proceso que llevó Maradona hasta su estadía en el Napoli: los inicios en el semillero de los cebollitas, su paso por Argentinos Juniors, Boca, el Mundial juvenil de Japón, el Mundial del 82 y el Barcelona. Su llegada a Nápoles se genera en la cumbre de su habilidad futbolística pero lo que veremos en el octavo episodio es la relación que tuvo con Cristiana Sinagra. Se trataba de una italiana amiga de una de las hermanas de Diego que vendía ropa interior. De hecho, en la serie se muestra cómo Claudia la conoció un día en su propia casa, cuando va para ofrecerles todo tipo de prendas a la familia Maradona para que las compre. Con complicidad de doña Tota y de la hermana de Diego, la relación se “gesta” de alguna manera con el aval de ellas, dejando una vez más de lado a Claudia Villafañe, mujer “oficial” de Diego.
Las eliminatorias para lo que será el Mundial consagratorio de Maradona, México 86, fueron reflejadas en el séptimo capítulo y se introdujo el papel de Cristiana, que en la serie es interpretada por la actriz Teresa Falsone (conocida en el ambiente como Tea Falco). Consultada por un medio de Argentina, la verdadera Cristiana afirmó que no iba a ver la serie porque “en este momento no me siento preparada para verla.”
De esta relación con Sinagra nació un hijo varón, Diego Jr., que nació apenas unos meses antes que su hermana Dalma. Maradona se negó durante años a reconocerlo a pesar de que en el momento posterior al parto, Sinagra en una entrevista televisiva mostró a su hijo y dijo que era de Diego Maradona. Tuvieron que pasar muchos años y muchos reclamos por parte de Diego Junior para que el jugador le diera finalmente su apellido y lo aceptara. Muchos otros hijos e hijas reclamaron el apellido del ‘Diez’. Algunos fueron reconocidos y otros aún aguardan que se expida la justicia.
El episodio ocho comienza con la escena del preparador físico, quien lleva a Maradona a un lugar de alto rendimiento para que llegue en óptimas condiciones al Mundial 86, mientras que el resto de los compañeros entrena en condiciones precarias. A su vez, la relación amorosa entre Diego y Cristiana se concreta finalmente, pero el anuncio de la mujer sobre su estado de gravidad es el determinante para que Diego rompa la relación. El guion lo muestra como un hombre que está viviendo con mucha furia la abstinencia sexual (por el entrenamiento para el mundial), y de qué manera estalla cuando recibe la carta de Sinagra en la que le avisa que está embarazada de él. Una vez más Claudia, su mujer, será quien afronte esta situación en medio de su propio embarazo. Diego Junior nació en Nápoles el 20 de septiembre de 1986 y Dalma el 2 mayo de 1987, por lo tanto, las mujeres estuvieron algunos meses embarazadas al mismo tiempo.
La serie contará con dos episodios más y completará así los 10 capítulos previstos para contar la vida de Diego Armando Maradona.
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