La Administración de Parques Nacionales recuperó esta mañana la posesión de la seccional de guardaparques que en 2020 usurpó la comunidad autoproclamada mapuche Lof Paillako en Los Alerces. Además tomó posesión de otros espacios públicos sobre los cuales el grupo avanzó en los últimos años.
En agosto pasado, el Juez Federal de Esquel, Guido Otranto, ordenó la expulsión de los líderes del grupo, Ernesto Cruz Cárdenas y su pareja María Belén Salinas y de los demás integrantes de esa comunidad, luego de certificar que el ingreso a las tierras públicas se produjo de forma ilegal, a través de métodos violentos, amenazas y atentados.
Este jueves expiró el plazo que otorgó el magistrado para que los usurpadores abandonaran las tierras de forma voluntaria, tras lo cual se procedería a desalojarlas con el uso de la fuerza pública. Por eso, el Ministerio de Seguridad de la Nación desplegó un imponente operativo con más de 100 efectivos y movilizó a los grupos antitumulto de la Policía Federal Argentina. Sin embargo, el lugar estaba deshabitado. Fue el propio Otranto quien confirmó que “no había ninguna persona en el predio por desalojar”.
De inmediato, los oficiales de Justicia iniciaron el proceso de restitución de las tierras, mientras que guardaparques lijaron el mástil principal de la seccional e izaron la bandera argentina, en reemplazo de la insignia mapuche que aún flameaba allí.
“Acabamos de recuperar la seccional El Maitenal del Parque Nacional Los Alerces que Cruz Cárdenas y su séquito autoproclamado mapuche usurpaban desde 2020″, posteó el presidente de Parques Nacionales, Cristian Larsen, en la red social X. “Dentro de la ley, todo; fuera de la ley, nada”, agregó.
Días atrás, cuando el desalojo era inminente, el funcionario dijo que se estaba “cerrando un capítulo de injusticia y abriendo uno nuevo, donde la ley se respeta y las cosas se ponen en su lugar. Es un cambio de era en la que se hace justicia”.
El gobernador de Chubut, Ignacio Torres, arribó el martes pasado a la zona de conflicto para seguir de cerca el proceso de recuperación de las tierras. En diálogo con Infobae, dijo que “pasó lo que tendría que haber pasado hace mucho tiempo” y adelantó que en los próximos días comenzará un proceso de diálogo con “las comunidades mapuches que sí están registradas, con los mapuches de verdad”.
En relación con la Lof Paillako, dijo que “tenían vinculación con la RAM y contactos con Chile, desde donde incluso los habrían financiado”. Son de los “falsos mapuches que se autoperciben originarios para tomar tierras públicas y privadas, pero siempre ajenas”. El operativo de seguridad no solo se desplegó dentro del Parque Nacional, sino también en varios puntos estratégicos de la ciudad de Esquel, donde algunos grupos expresaron su malestar con la medida judicial a través de pancartas.
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, aterrizará este jueves a la tarde en el Sur para acompañar el “primer desalojo de tierras usurpadas luego del fin de la Ley 26.160″. Los abogados de la comunidad cuestionaron la medida judicial debido a que “aún existen recursos judiciales en trámite, como un planteo en queja ante la Corte Suprema de Justicia”.
“Es anticonstitucional e injusto”, aseveraron desde la Gremial de Abogados y Abogadas de la República Argentina.
El avance mapuche
La causa es de 2020, aunque antes de ese momento, de acuerdo a la aseveración de Parques Nacionales, Cruz Cárdenas y varios cómplices anticiparon la usurpación e ingresaron animales al predio. Tanto el líder de la lof Paillako como su pareja se adjudicaron la ocupación de la zona del Arroyo Cascada. Luego avanzaron a la ex Población Felidor Salina, a la Seccional El Maitenal y finalmente al valle del arroyo Rañinto. En todos los casos, el grupo se adjudicó la recuperación de tierras.
En la fundamentación de su fallo, Otranto aseguró que se pudo acreditar que desde el inicio de la ocupación tuvieron lugar distintos actos de vandalismo y de violencia contra guardaparques, así como conductas que significaron el daño de distintos elementos y construcciones del parque.
Mencionó el desmalezamiento y vulneración de la vegetación nativa para utilizarla como obstáculo en los caminos, la destrucción de una obra de madera instalada por los pobladores denominada “El Cristo”, pintadas con símbolos mapuches y de la comunidad en carteles de señalización, rutas, en la vivienda oficial de la Seccional El Maitenal y en la iglesia de Villa Futalaufquen.
Los intrusos atacaron con piedras y otros elementos a funcionarios de Parques Nacionales, provocando incluso la dimisión de uno de ellos por el hostigamiento constante.
En el listado de antecedentes, el magistrado mencionó un ataque ocurrido el 9 de septiembre de 2020, ocasión en la que encapuchados atacaron con piedras al personal de Parques Nacionales que se trasladaba en una camioneta oficial por la zona de la Seccional El Maitenal. Al día siguiente, la Comunidad Paillako publicó un comunicado en el que alude a esa situación como su control territorial.
Con esas pruebas, Cruz Cárdenas fue procesado como coautor del delito de usurpación en concurso ideal con los delitos de daño agravado y atentado a la autoridad agravado por dos hechos distintos, uno de ellos con lesiones leves en grado de tentativa.
Su pareja fue considerada coautora de los delitos de daño agravado en concurso real, con atentado a la autoridad agravado en concurso ideal con lesiones leves en grado de tentativa.
Ex brigadista devenido en mapuche
Cruz Cárdenas fue capacitado como brigadista por la Administración de Parques Nacionales, organismo al que renunció en 2019. Es que algunos años antes, en 2016, comenzó a manifestarse como integrante del pueblo mapuche y a desconocer la autoridad de la APN. Poco antes de la irrupción en el territorio, confirmó que adscribía al pueblo mapuche y desconocía al Estado Argentino. Fue señalado tanto por Parques Nacionales como por el gobierno provincial como “principal sospechoso de los incendios forestales que devastaron los bosques nativos de la zona”.