Luego del anuncio del Gobierno sobre la restricción en el acceso a medicamentos gratuitos a través del PAMI, jubilados realizaron este miércoles una marcha a las oficinas centrales de la obra social en la Ciudad de Buenos Aires (CABA) para exigir su “inmediata restitución”. En medio de la protesta, hubo incidentes menores con personal de la Policía Federal Argentina (PFA). Pasadas las 14, la columna se dirigió al Congreso de la Nación para continuar con el reclamo, que finalizó a las 16.
Apenas pasadas las 13, mientras el grupo reclamaba frente a la sede del organismo público sobre la vereda, se hizo presente un grupo de alrededor de un centenar de efectivos de la fuerza de seguridad con la intención de arrinconarlos más sobre la acera. Hubo empujones e insultos, aunque de todos modos la situación violenta no pasó a mayores.
Esta vez, un asesor del PAMI recibió a una delegación del grupo de jubilados que se manifestaba, luego de más de dos meses de la entrega de un petitorio que habían presentado. La respuesta fue que puede haber una mejora para el sector pasivo “si mejora la recaudación en 2025″.
Por otro lado, además de los reclamos al Gobierno, se escucharon numerosos insultos contra la CGT, a la que los jubilados consideran extremadamente pasiva, por no movilizarse.
La protesta se inició en la esquina de Corrientes y Florida. Los manifestantes cortaron la calle y después se fueron custodiados por la policía por Florida hasta Avenida de Mayo para continuar camino hacia el Congreso. Pasados los incidentes del comienzo, esta vez los uniformados tan solo les pidieron a los jubilados que circularan hacia el palacio legislativo, donde continuaron los reclamos.
Los jubilados cortaron intermitentemente el tránsito de las avenidas Rivadavia y Entre Ríos, moviéndose al cambiar las luces de los semáforos, por lo que, si bien el tránsito fluía, lo hacía lentamente. Con más gente que se sumó a la manifestación al llegar al Congreso, la situación entre quienes protestaban y la policía se mantuvo tensa, aunque sin nuevos incidentes.
A las 16, como todos los miércoles, la protesta se dio por concluida y los manifestantes comenzaron a retirarse de manera pacífica de la zona, ante la atenta vigilancia de los policías que se plantaron frente al Congreso.
Jubilados Insurgentes es la organización detrás de la medida y la movilización comenzó en Avenida Corrientes 655, barrio de San Nicolás. “Por la inmediata restitución de todos los medicamentos anulados por este gobierno, que condena al hambre y la miseria a toda la clase obrera, y al genocidio de los jubilados”, reza el comunicado de la agrupación, publicado en redes sociales.
La protesta ocurrió dos días después de que el PAMI comunicó su decisión de restringir la cantidad de afiliados que acceden a cinco medicamentos gratis por mes. A partir de ahora, los jubilados que requieran una cobertura del 100% en los remedios deberán gestionar el “subsidio social”, un trámite que impone requisitos que hasta el momento no eran exigidos.
En la práctica el nuevo esquema significa una restricción ya que muchas personas que hasta el momento accedían a medicamentos gratis ya no lo podrán hacer. Entre los requerimientos para tramitar el nuevo “subsidio social”, se exige que el beneficiario no perciba más de $390.000 mensuales, no esté afiliado a una prepaga y no tenga un automóvil de menos de 10 años.
Uno de los dirigentes oficialistas que salió a apoyar la medida fue Manuel Quintar, diputado nacional de Jujuy por La Libertad Avanza (LLA), quien opinó que en el PAMI hubo una “fiesta de repartir medicamentos a diestra y siniestra a gente que no lo necesitaba”.
El abogado aseguró esta mañana que familiares de afiliados usaban el carnet de los jubilados para retirar fármacos de forma gratuita. “Soy de Jujuy, una provincia pobre en donde había una fiesta con el tema de los medicamentos. Había dispensarios que sacaban los familiares y los ponían a vender en los barrios”, agregó, en declaraciones a El Destape Radio.
Este martes el legislador oficialista Julio Moreno Ovalle justificó también las nuevas restricciones implementadas por la obra social, argumentando que los recortes buscan priorizar el “déficit fiscal cero”.
En cuanto a la posibilidad de que los nuevos requisitos obstaculicen el acceso a medicamentos vitales, el diputado dio una llamativa declaración y negó que pueda llegar a afectar la salud de las personas mayores. “No creo que tenemos que apuntar a ese tipo de sensibilidades. Esa persona puede tener parientes, o gente que le pueda ayudar. No creo que sea para tanto”, afirmó.
Y definió, en una entrevista con el mismo medio: “Los que cobran un poco más van a tener que pagar, y los que cobran menos van a tener más beneficios”.
Con los cambios dispuestos por el Poder Ejecutivo, se termina el plan “Vivir Mejor”, creado por el gobierno Alberto Fernández, que garantizaba el acceso gratuito a medicamentos a los afiliados del PAMI.
La decisión fue adoptada en el contexto de un reordenamiento de la cobertura de medicamentos de PAMI a más de 5,3 millones de personas. La obra social difundió un comunicado en el que aclaró que, como parte de una “gestión planificada y eficiente”, el organismo se vio “en la necesidad de llevar a cabo readecuaciones en las coberturas de medicamentos a lo largo de este año en distintas etapas.
Las autoridades explicaron que se garantizará que el costo del medicamento esté “cubierto por el subsidio social para todas aquellas personas que realmente lo necesitan, priorizando el equilibrio financiero de la institución y garantizando el acceso a medicamentos para quienes no puedan pagarlos”.