En la última reunión entre las cámaras empresarias del transporte del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y los gremios de colectiveros surgió una preocupación poco habitual en este tipo de encuentros y alejada de las negociaciones paritarias: la proliferación de los carnets de discapacidad falsos entre los pasajeros.
Esto encendió una alarma entre los representantes de las compañías que operan el servicio, que comenzaron a investigar el asunto y lograron recolectar varias denuncias vinculadas a este tema para notificar del caso a las autoridades nacionales.
Fue así como se les dio la orden a los inspectores, principalmente de las terminales, de que intensifiquen los controles de los certificados que son presentados por los usuarios, para comprobar en las plataformas digitales de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) si son reales.
De acuerdo con lo que precisaron a Infobae fuentes vinculadas al asunto, algunas de las credenciales detectadas como “truchas” tenían un grado de elaboración alto y eran muy similares a las originales, pero se terminó corroborando que no lo eran porque el supuesto beneficiario no aparecía en los registros oficiales.
Otras, en cambio, eran simples fotocopias plastificadas, muchas veces incluso con las firmas de los funcionarios provinciales o municipales que no son las reales, además de otras irregularidades.
“Que los choferes se hayan dado cuenta de esto ya es de por sí una alerta, porque ellos no suelen preocuparse por estas cuestiones. Su trabajo es el de manejar y poco les importa si el pasajero paga o presenta un carnet”, señaló un integrante de las cámaras empresarias.
Además, las compañías detectaron que muchos de los certificados se comercializaban ilegalmente en páginas de compraventa de objetos, como Market Place, de Facebook, entre otros sitios, donde un pase llegaba a costar hace algunas semanas hasta 18 mil pesos.
Consultado sobre este asunto, la Secretaría de Transporte, a cargo de Franco Mogetta, explicó a este medio que desde esta cartera “no se regula el otorgamiento de los certificados, sino que se controla que las empresas de micros respeten la obligación de ofrecer cupos para las personas con discapacidad”.
“Ante el incumplimiento, desde la CNRT se toman las denuncias de los usuarios, con las que se realizan sanciones a las empresas. Además, se presentó ante la Justicia una medida cautelar para que obligue a las operadoras a rever ese accionar y que cumplan con las normas vigentes”, agregaron.
En tanto, la Agencia Nacional de Discapacidad reconoció que “se están evaluando acciones” para evitar el uso de carnet falsos y, en este sentido, fuentes del organismo anticiparon que “se va a suscribir un convenio con SUBE, a la par de que se está desarrollando un sistema para el control de prestaciones”.
“Además, se está trabajando en una propuesta para modernizar el Certificado Único de Discapacidad (CUD) actual, para que genere un acceso más seguro y menos propenso al fraude, tanto para la persona con discapacidad, como para el sistema prestacional en su conjunto que proviene del mismo: sea salud, transporte, etc”, detallaron.
Actualmente, la entidad tiene varias herramientas de verificación en estos casos, entre las cuales están el escaneo del QR que trae el CUD para comprobar si es válido o no; verificar que la persona tenga su CUD en Mi Argentina y ver la credencial de la app, y la opción de verificación pública de la página web, donde se ingresa el código de barras y los últimos tres números de DNI para verificación.
El mencionado certificado es un documento público válido en todo el país que permite acceder a determinados beneficios -como viajar sin pagar en todos los medios de transporte- y es entregado por la ANDIS luego de que una Junta Evaluadora interdisciplinaria determine si corresponde.
No obstante, las empresas de colectivos advierten que una de las grandes dificultades que enfrentan para corroborar la originalidad de este tipo de documentos es que no siempre son emitidos por la Nación, sino que algunos de ellos son entregados por la provincia e incluso por los municipios, teniendo cada uno de ellos características diferentes y mecanismos de autenticidad distintos.