En su plan de ajuste del Estado, el Gobierno decidió avanzar con la venta de un emblemático edificio del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) ubicado en una de las zonas más cotizadas de Palermo, Cerviño y Ortiz de Ocampo, a una cuadra de la Av Libertador. La decisión quedó plasmada en dos resoluciones de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) que salieron publicadas el viernes último en el Boletín Oficial.
La primera - Nro 65/2024 - “desafecta el inmueble propiedad del Estado Nacional en jurisdicción del INTA” y menciona que, el 16 de octubre, la Secretaría de Agricultura puso el inmueble a disposición de la AABE luego de haber analizado “la situación de ocupación y uso”, y determinar su “estado de innecesariedad”. Según los fundamentos, el objetivo es “contribuir a la reducción de costos” y “un mejor aprovechamiento de los recursos disponibles”. La segunda resolución - la Nro 70/2024 - autoriza su subasta pública y publica el pliego de bases y condiciones.
El cierre de inscripción para los interesados será el 9 de diciembre y el remate se concretará un día antes de Navidad, el 23 de diciembre. Con 3.143 m2 de superficie total distribuidos en tres plantas sobre un terreno de 919 m2, el precio base de venta es de USD 6.378.968, según la valuación hecha por el Tribunal de Tasaciones de la Nación en 1ro de noviembre último. El destino previsto para el edificio que ya fue puesto en venta - según figura en la web de la AABE - es el de “desarrollo inmobiliario”.
En esa sede del INTA trabajan 140 personas actualmente. Allí funcionan el Centro de Investigación de Economía y Prospectiva (CIEP); la Fundación ArgenINTA; las Direcciones Nacionales de Vinculación Tecnológica y de Relaciones Institucionales y Cooperación Internacional; y la empresa de capitales mixtos con participación mayoritariamente del INTA Innovaciones Tecnológicas Agropecuarias (INTeA), dedicada a la generación de agronegocios basados en la comercialización de tecnologías, bienes y patentes, que es superavitaria para el Estado.
El edificio de Cerviño 3101/67 ya había sido incluido en el Anexo del decreto 950/2024, publicado el 24 de octubre, con la firma del titular de la AABE, Nicolás Pakgojz, en un extenso listado de inmuebles del Estado plausibles de ser enajenados en todo el país. Cuando se conoció este decreto, desde el Gobierno informaron que la relocalización del INTA obedece a que “se busca un uso más racional y eficiente de los edificios gubernamentales”, por lo que la idea es que el organismo se traslade a un espacio “más adecuado”.
Para que la AABE pudiera avanzar con la convocatoria a subasta pública formalizada el viernes, hubo un paso previo que hoy está siendo cuestionado por los gremios del INTA, que ya adelantaron que irán a la Justicia. La nota del INTA que le dio conformidad a la decisión de la AABE fue firmada por el nuevo presidente del organismo, Nicolás Bronzovich el 12 de noviembre último. En la misiva dirigida - a la que accedió Infobae - Bronzovich afirma que todas las dependencias y organismos del INTA que funcionan en el inmueble de la calle Cerviño “pueden desenvolverse en otras locaciones”. Y argumenta que el inmueble “se ha tornado innecesario para la gestión específica de este Organismo; razón por la cual, la desafectación en trámite conlleva una significativa reducción de los gastos de este Instituto”.
Sin embargo, esa decisión de Bronzovich no fue aprobada- hasta ahora - por el Consejo Directivo del INTA, que integran entidades del sector público y privado. De hecho, debería tratarse en la próxima reunión plenaria que tendrá lugar el jueves próximo 28.
Por este motivo, la Asociación Personal del INTA (APINTA) y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) - los dos gremios en los que están enrolados los trabajadores del Instituto - evalúan una acción conjunta en la Justicia contra las autoridades del INTA para frenar el el remate. “Bronzovich y (Beatriz) Giraudo (la vicepresidenta) han pasado por arriba al Consejo Directivo y han violado normas de funcionamiento del organismo”, sostuvo Mario Romero, secretario general de APINTA.
Según coinciden APINTA y ATE, Bronzovich no tiene la potestad para firmar él solo la enajenación del edificio, sino que tiene que pasar por Consejo. “La escritura está a nombre del INTA, que es una persona jurídica propia y distinta”, señalan.
El otro contra su venta es que el inmueble no entraría dentro de los criterios de venta de edificios públicos, ya que “no está en desuso y no tiene déficit”. De hecho, en esa sede del Instituto funciona la Fundación ArgenINTA, que gestiona fondos y es superavitaria. Según estimó una fuente que trabaja en el INTA, “de concretarse esta operación tan fraudulenta como nula, el daño patrimonial será de unos USD 6 millones, ya que la tasación oficial es de la mitad del valor”.
A su vez, desde ATE advirtieron sobre el futuro de los empleados que trabajan en ese edificio. “Si cierran un edificio, hay que reubicar a la gente o despidirla. El peligro de cerrar lugares es que la gente se quede sin tareas. Esa es la alarma que tenemos como trabajadores”, le dijo a Infobae Julieta Boedo delegada de ATE e integrante de la Coordinación Nacional ATE-INTA.
Carta documento
El día anterior a la salida de las dos resoluciones de la AABE, y justo antes de que venciera el plazo para las impugnaciones, APINTA, le envió una carta documento al titular de la Agencia advirtiéndole que el predio de la calle Cerviño es “propiedad del INTA en dominio pleno”, según la escritura del 2 de agosto de 1967. “Al ser el INTA una entidad autárquica, no puede ser enajenado por decreto del Poder Ejecutivo”. La carta documento destaca que el inmueble está “afectado al uso del INTA” y que “no se coordinó” con el Instituto “ni con organismo alguno”, por lo que pide se eleve un “recurso de consideración” al Poder Ejecutivo, y se lo excluya de las subastas previstas en el decreto 950/2024, que incluía más de 300 inmuebles del Estado a ser subastados.
“La carta documento fue enviada antes de la publicación de la resolución que lo ponía a la venta en el Boletín Oficial. Había tiempo hasta hoy (por el viernes pasado) para presentar objeciones, y desde APINTA presentamos la carta documento justo antes de que venciera el plazo”, advirtió Romero. Si bien ATE no la firmó - por “una cuestión de tiempos”, según explicaron - ambos gremios están alineados con el reclamo y convocaron a la movilización del jueves 28 a las 10, frente a la sede central del INTA, en Rivadavia al 1400, en el barrio de Congreso. Los dos sindicatos planean avanzar juntos con una posible presentación judicial, si no hay marcha atrás con la venta del edificio del Instituto.
Desde la AABE confirmaron a Infobae la recepción de la carta documento. “Hoy (por el viernes) nos enteramos. La están viendo”, señalaron fuentes de la Agencia. Y señalaron que “el inmueble sí está desafectado” y que “se habló con el INTA”.
Además del presidente y la vicepresidenta, el Consejo Directivo del INTA - al ser un órgano colegiado - está conformado por representantes de las Facultades de Agronomía y de Veterinaria de universidades nacionales, y por la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, en representación del sector público. Por el sector privado, lo integran la Sociedad Rural Argentina, Coninagro, la Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (AACREA), Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y la Federación Agraria Argentina (FAA). “La pregunta del momento es cómo reaccionarán las entidades agropecuarias ante esta intentona que los está pasando por encima”, advirtió la fuente del Instituto que habló con Infobae.
Bronzovich asumió en el INTA el 6 de noviembre último, después de la renuncia de Juan Cruz Molina Hafford, quien provenía del organismo y se habría negado a llevar a cabo el ajuste del INTA y la venta de inmuebles y tierras que le requería del Ministerio de Economía. El nuevo titular era, hasta asumir, Director Nacional de Agricultura bajo la órbita de esa cartera. Bronzovich es miembro de la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid), una organización que no integra el Consejo Directivo del INTA, y a la que pertenece también la segunda del organismo, María Beatriz Pilu Giraudo, que permaneció tras la salida de Molina Hafford.
Venta de terrenos
El edificio de Cerviño y Ortiz de Ocampo no es el único inmueble del organismo que saldrá a la venta. Otro documento interno del INTA se refiere al “Plan de Acción Comercial propuesto según superficies a disponibilizar”, a desarrollar a partir del segundo semestre del 2024 y hasta primer semestre del 2027. Incluye tierras productivas que suman unas 27.000 hectáreas en todo el país, y que alojan 20 Estaciones Experimentales y otra docena de campos para su venta, o concesión por un año y posterior subasta pública. “Le hacen un recorte a cada estación experimental de casi de un 90% de las tierras que ofrecen para la venta. Si tiene 1.000 hectáreas, le dejan 100 hectáreas”, advirtió Romero.
Boedo, delegada de ATE, agregó que en esos campos “hay investigaciones que llevan tiempo, no es que están sin usar. No está claro bajo qué conceptos hicieron ese listado de tierras que quieren vender en todas las provincias”.
La propuesta de ajuste
Bronzovich buscará el aval del Consejo del INTA para aprobar las ventas de estos inmuebles, así como de un plan de ajuste cuyo borrador estuvo circulando internamente y puso en alerta a APINTA y ATE. El borrador - al que accedió Infobae - prevé concretar, entre noviembre y 2025, una reducción de personal de 1.734 puestos de trabajo, entre técnicos, profesionales, personal de apoyo y becarios, sobre una plantilla de 6.466 trabajadores.
Ya comenzó a ejecutarse a través de retiros voluntarios (se acogieron 300 desde diciembre pasado), jubilaciones anticipadas, y la no renovación de contratos. También una prevé la venta de vehículos, la eliminación de la flota de celulares y reducción de viáticos.
Al trascender el plan los últimos días, los gremios de APINTA y ATE se declararon en “estado de alerta” y convocaron a la movilización del jueves próximo, en rechazo a los “despidos, el ajuste presupuestario y la enajenación de bienes”.
“En esa reunión se van a definir los destinos de los trabajadores y trabajadoras de que están bajo la situación de contratación de plantas no permanentes. Por eso, antes de que salga lo del BO, ya habíamos convocado a una movilización para que el Consejo Directivo nos escuche y voten en contra de este plan que quieren presentar en presidente del organismo en esa sesión”, señaló Boedo. “Es un plan en tres etapas que termina como una suerte de intervención, no formal. Porque el presidente y la vice son de Aapresid que no son parte históricamente de INTA”, agregó.
La propuesta que llevará Bronzovich al Consejo Directivo y que, de ser aprobada, sería elevada a los Ministerios de Economía y de Desregulación que vienen reclamando un ajuste, contempla tres etapas.
La primera etapa, prevista para noviembre y diciembre, incluye el inicio de la reducción de puestos de trabajos; un fuerte control de gastos; un plan de “desregulación, transformación, simplificación, desburocratización”; la venta del inmueble de Cerviño, de hectáreas en Salta, y de tierras que el INTA “no utiliza”.
“Dentro de esas plantas de no permanentes de las que prescindirían, hay técnicos y profesionales, gente con doctorado. También van a revisar las becas”, señaló Boedo, delegada de ATE. Desde APINTA también rechazan “los recortes que están planteando, que es que no es solamente el edificio de Cerviño, sino que hay recursos humanos en juego. Además de 300 retiros voluntarios, fueron intimadas a jubilarse 149 personas hasta ahora, desde diciembre. Además, prevén un ajuste en la planta no permanente del organismo”. En este último grupo, la propuesta pone el foco en los 227 designados en 2023 de forma transitoria, y que entrarían “en revisión” con el recorte que pretende la actual gestión.
La segunda etapa de la propuesta, a implementar en el primer trimestre del 2025, contempla una “revisión de la estructura y reasignación de personal”, la “selección de hectáreas” de 20 Estaciones Experimentales que “se podrían ceder”. Respecto de INTeA, una empresa mixta superavitaria, el borrador propone mantener su razón social para “comercializar desarrollos tecnológicos”, y a la vez, “reducir” su estructura y “liderar desde INTA”.
En la tercera etapa, para el período 2025-2027, se contempla una organización institucional que podría incluir el cierre de Direcciones, Centros regionales, Centros de investigación, Estaciones Experimentales, Agencias de extensión, Gerencias, Coordinaciones y Cooperadoras.
Carta por los 70 años
El 4 de diciembre próximo, el INTA cumplirá 70 años. Por esta fecha, Bronzovich y la vicepresidenta Giraudo enviaron una carta el jueves pasado a los trabajadores del organismo. “Ratificamos como siempre nuestro total compromiso con el crecimiento y el desarrollo del país. Tenemos un rol estratégico en un contexto desafiante que requiere del esfuerzo de todos los argentinos. Desde nuestra creación hemos puesto el foco en una meta irrenunciable: aumentar la competitividad y la sostenibilidad del sector agropecuario, agroalimentario y agroindustrial, contribuyendo a la producción de alimentos y a la generación de divisas a través de su inserción en los mercados internacionales. Además, nos hemos abocado a promover el agregado de valor, generando innovación en los eslabones de las cadenas productivas en todo el territorio nacional”.
“A lo largo de nuestra historia hemos acompañado el esfuerzo y dedicación de los productores y empresarios agropecuarios de todas las escalas, promoviendo permanentemente la integración público-privada, algo de lo cual pueden dar cuenta todas las entidades del sector. (...) Esto nos ha posicionado como una institución referente a nivel global en el desarrollo científico y tecnológico del sector agropecuario”, continúa la misiva que destaca la importancia estratégica del INTA para el agro.
“El presente nos encuentra frente a nuevos desafíos y por eso nos comprometemos más que nunca con el conjunto de la sociedad en realizar los aportes estratégicos que le permitan al sector agropecuario alcanzar nuevos techos productivos, mejorar su competitividad con sostenibilidad, y generar trabajo y divisas que nuestro país necesita. Como siempre, lo haremos con la eficacia y la eficiencia que nos caracteriza, y con presencia en todo el territorio nacional”, continúa sin hacer referencia a los recortes que se prevén hacer.
“Para lograr este cometido necesitamos más que nunca el capital más preciado y rentable del INTA: nuestros equipos, integrados por personal con formación de excelencia y vocación de servicio, que contribuyen diariamente a la generación de riqueza de nuestra nación”, concluye la carta enviada a los empleados.