El Gobierno formalizó la salida de Yanina Nano Lembo, quien era secretaria nacional de Niñez, Adolescencia y Familia, en el marco de un proceso de reestructuración ministerial. La renuncia de Lembo quedó oficializada mediante el Decreto 1007/2024, publicado en el Boletín Oficial y firmado por el presidente Javier Milei junto con la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello.
En este decreto, se estableció el fin de su función a partir del 8 de noviembre y la designación de Juan Bautista Ordóñez como su sucesor a partir del 11 del mismo mes.
En relación con los motivos del cambio, fuentes oficiales detallaron que la reorganización apunta a optimizar la gestión del ministerio, al alinearla con las metas de la nueva administración.
En este contexto, Ordóñez asumirá como titular de la ex cartera de Desarrollo Social, mientras que Lembo ocupará un nuevo rol en la estructura. Desde el ministerio aclararon que “el equipo liderado por la ministra Sandra Pettovello responde a las necesidades de esta nueva etapa de gestión” y afirmaron que seguirán avanzando bajo los principios de un “Estado más pequeño y mucho más eficaz”, en línea con el planteo presidencial.
Ordóñez, quien hasta ahora era Director de Planeamiento Estratégico en el Ministerio de Capital Humano, cuenta con una larga trayectoria en el sector privado. Algunos de sus cargos incluyen su paso como Country Manager de Codere, Director Ejecutivo para Argentina en Barrick Gold Corporation, Director de Asuntos Corporativos en YPF S.A. y Director de Comunicaciones en el Grupo Roggio.
La nueva estructura ministerial responde, según Capital Humano, a la necesidad de revisar y auditar cada área para hacerlas “más eficientes”. Con este objetivo, desde el gabinete de La Libertad Avanza se plantearon como desafío “atacar las capas geológicas marcadas por el kirchnerismo”, anticiparon fuentes del ministerio.
La gestión de Nano Lembo había enfrentado cuestionamientos recientes, como la adquisición de una cafetera con un valor cercano a los dos millones de pesos, un hecho que generó polémica y provocó la renuncia de Constanza Cassinola, subsecretaria de Gestión Administrativa y número dos en la estructura de Lembo. Cassinola, además, había sido funcionaria en la administración porteña de Horacio Rodríguez Larreta.
Nano Lembo había asumido el cargo en mayo, en reemplazo de Pablo de la Torre, quien dejó el puesto en medio de una serie de críticas. Las demoras en la entrega de alimentos almacenados en depósitos de Tafi Viejo y Villa Martelli lo colocaron en el centro de la controversia. Sin embargo, lo que terminó de eyectarlo de su puesto fue una investigación interna en la cartera ministerial por sospechas en torno al sistema de contrataciones de personal en el área a su cargo.
La auditoría realizada por el ministerio sugirió la existencia de un posible esquema de recaudación política ilegal asociado a contratos gestionados con la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI). Esta organización internacional de cooperación mantiene convenios marco vigentes con el gobierno argentino desde administraciones anteriores, orientados al asesoramiento y la provisión de servicios.
Desde Capital Humano subrayaron que la renuncia de Nano Lembo responde a razones distintas a las de De la Torre. Según afirmaron, Lembo se ha desempeñado como una funcionaria “intachable” y destacaron que su perfil técnico no se alinea completamente con las metas de la reestructuración en curso, encabezada por Pettovello, quien mantiene una relación de extrema confianza con el presidente Milei.
“La decisión es que Yanina Nano Lembo, quien forma parte del equipo y posee un perfil técnico, asuma otro rol. En su lugar, Juan Ordóñez, también miembro del equipo, tomará la dirección de la Secretaría, dado que en esta etapa se adapta perfectamente a las necesidades actuales”, explicó un colaborador de Pettovello a Infobae. “Trabajamos como un equipo dinámico, adaptándonos según las circunstancias y las necesidades de la estructura”, añadió.
Fuentes ministeriales también destacaron que el equipo actual cubre la implementación de políticas sociales a través del Consejo de Coordinación de Políticas Sociales, un organismo encargado de la generación de datos y análisis para coordinar las políticas del área. La intención, remarcan, es seguir en la dirección de “un estado pequeño y eficiente”, como propone el presidente Milei.