Enfocado en la gestión de su provincia, Maximiliano Pullaro desoye el clamor de un sector de la UCR para que lidere el proyecto nacional en el 2027. Durante una entrevista con Infobae, aseguró que sus planes a futuro están en Santa Fe, provincia que gobierna desde el 2023 tras haber cosechado un triunfo histórico ante el peronismo. Para las elecciones legislativas enfrenta el mismo desafío que el resto del país: la irrupción de La Libertad Avanza. No descarta sumar a su coalición al partido de Javier Milei, pero entiende que debe ser una decisión que debe resolver Unidos, la coalición de gobierno provincial.
Tras haber bajado la tasa de violencia a un 70%, Pullaro promete que Rosario — la ciudad que fue protagonista el último tiempo por las disputas sangrientas de las bandas narco — “va a ser la ciudad más segura de Argentina”. Sin embargo, asegura que para lograr sus objetivos necesita tiempo para construir más de 4 mil celdas carcelarias, estaciones policiales, instalar más cámaras de seguridad y finalizar el nombramiento de 52 fiscales. “Si seguimos así, vamos a tener datos similares al siglo pasado”, aseguró.
— El santafesino Mario Barletta se reunió con usted después de conformar un monobloque en la Cámara de Diputados. ¿Cómo ve la ruptura de la bancada que preside Rodrigo de Loredo?
— Las dificultades que tiene hoy el bloque para sintetizar una posición política tienen que ver también con las dificultades que tiene el radicalismo para sintetizar una posición política y la realidad de diferentes provincias. Espero que con diálogo el año que viene el bloque se pueda sintetizar y volver a unir. Pero para eso necesita no tener posiciones extremas y mucho diálogo político. La Unión Cívica Radical y los bloques hace años que no votan de manera unánime o unidos. Y no lo hacen porque desde la caída del Gobierno en el 2001 estuvo en la oposición, salvo en el gobierno de Mauricio Macri. A su vez, venía con una tradición política distinta con el Frente UNEN hasta que el radicalismo define ir a Juntos por el Cambio. Desde allí el radicalismo no tiene posiciones unificadas en los bloques legislativos, con lo cual, lo que necesitamos es mucho diálogo para poder resolver por lo menos una forma de gestionar juntos el bloque hasta que encuentre liderazgos nacionales que confluyan en un proyecto nacional.
— ¿Con qué sensación se fue de la reunión con Javier Milei con el resto de los gobernadores radicales?
— La sensación fue muy buena. Me encontré con una persona cercana en el diálogo personal. Una persona que tiene un plan para resolver los problemas económicos de Argentina muy claro y que lo está transitando. Sí se pudieron agendar los problemas que tenemos en las provincias, pero no nos vinimos con una respuesta. La charla se centró en el modelo económico que está llevando adelante el Presidente para Argentina. Obviamente, muchos tenemos algunas miradas distintas. Es verdad que lo financiero ordena primero para que luego venga la inversión y fortalezca la producción. Para nosotros la producción es central. Tal vez lo productivo es más importante que lo financiero y el crecimiento y el equilibrio viene en función del crecimiento económico. Pero es nuestra matriz. El trabajo para nosotros es fundamental, no la estructura financiera de los recursos. Entonces ahí sí hay miradas distintas desde el interior. Para nosotros Argentina sale adelante si produce más, no solo si logra achicar. Pero bueno, ganó el presidente y tiene un plan muy claro que en principio puede mostrar resultados: caída de tasa de interés, caída del riesgo país, caída abrupta de la inflación en diez u once meses. Se puede mostrar que Argentina hoy tiene un rumbo económico, cosa que antes era muy difícil de que eso suceda.
— ¿Tocaron temas y necesidades particulares para Santa Fe?
— Sí. Hablamos de la deuda que tiene Nación con ANSES, la deuda de la diferencia del saldo del consenso fiscal y las obras que habíamos acordado con el Gobierno que tenía que empezar a intervenir y terminar. El Presidente planteó que los quiere resolver, pero te diría que es más difícil. El tema hidrovía fue lo único que sí nos trajimos, en donde el Presidente se comprometió a que los seis gobernadores de la Región Litoral podamos opinar sobre la construcción del pliego de licitación sobre el calado y el balizamiento de la hidrovía. Se le planteó también que debería ser un modelo de desarrollo y que la Presidencia y las seis provincias también tienen que tener una mirada del desarrollo de Argentina.
— Hay dos miradas para el 2025: una es que puede haber una revisión de Juntos por el Cambio en las provincias y, otra mirada, que es que va a haber una alianza con La Libertad Avanza. ¿Cuál crees que es la decisión que va a tomar la UCR en Santa Fe?
— Somos un frente político muy amplio en la provincia de Santa Fe que logró sacar por primera vez casi el 60% de los votos y que logró perforar el techo del millón de votos que ningún gobernador lo había logrado. Y eso no se logró por el candidato o por los candidatos. Se logró por la amplitud del frente político. En un extremo está la UCeDé y en el otro extremo está el GEN y en el medio está el socialismo y el PRO. Esa amplitud a nosotros nos permite mostrar un programa de gobierno y todos quienes crean en ese programa de gobierno se pueden sumar al tren. Logramos ordenar el Estado, tener equilibrio fiscal, mejorar la seguridad pública y bajar los niveles de violencia, tener una inversión en infraestructura vial y productiva y energética única en este momento del país, porque invertimos 500 millones de dólares y el año que viene y vamos a invertir 1.500.000.000 de dólares. Ninguna provincia está invirtiendo tanto en obra pública. Quien crea en eso nosotros estamos de acuerdo en que se pueda sumar. Si es La Libertad Avanza o es un sector del peronismo se irá definiendo.
— ¿La Libertad Avanza se puede sumar a la coalición oficialista pero no armar una coalición en la que esté La Libertad Avanza encabezando esa lista?
— Nos llevó mucho tiempo construir el programa de gobierno que juntó desde la centroderecha hasta la centroizquierda. Hay un programa de gobierno que se viene respetando, que tiene que ver con la palabra empeñada en los problemas que tenía la provincia. Desde ese lugar, quien crea en eso puede venir y discutir en términos políticos ahí adentro. Pero es un frente político que por más que yo sea el gobernador, los partidos políticos lo conducen. La coalición política tiene peso político en Santa Fe. Mi partido (UCR) pesa. Y las decisiones que toman los partidos políticos en la coalición también pesan. Entonces no es algo que yo pueda decir “hago una alianza con La Libertad Avanza” porque mi partido político es el que hace el diseño electoral y el frente político hace el diseño electoral. Lo que sí tenemos un acuerdo es que todos quienes coincidan con el programa de Gobierno de Santa Fe pueden sumarse y hacer un aporte. Eso va para sectores del PJ o para intendentes que no fueron por nuestro frente político.
— En la provincia los números de violencia bajaron. ¿Cuánto ayudó el Gobierno de Milei?
— Solos no nos quedamos nunca. El pilar de la construcción y de la mejora en seguridad pública y de la caída de violencia fue el discurso incólume de los tres niveles del Estado y de los tres poderes del Estado. Cuando hay confusión en el norte de seguridad, los sectores criminales avanzan y cuando hay un discurso cerrado en materia del plan de seguridad los sectores criminales retroceden. De ahí viene la caída tan importante de la violencia y del delito. Si seguimos así, vamos a tener datos similares al siglo pasado. No es que vamos a tener datos mejores que los últimos diez años o 15 años. Nos vamos a ir a menos violencia que todo el siglo en estos 24 años del siglo XXI. Digo esto con mucha prudencia porque podríamos estar batiendo la bandera de que es una batalla ganada. Y no lo es. Primero por el tiempo. Parece mucho tiempo que en 11 meses haya habido una caída tan abrupta. Pero es poco tiempo. Es una política pública que no es estable porque necesito desplegar todo el plan de seguridad y el plan de seguridad hoy tiene que ver con el reordenamiento de los recursos humanos, no con la estructura y la infraestructura que tenemos que tener.
Nosotros tenemos un plan de obra pública carcelaria porque tenemos superpoblación carcelaria. Yo voy a construir en cuatro años 4260 celdas. Hasta ahora no logré terminar ningún pabellón. Lo voy a terminar a principios del año que viene. Pero en 40 años se construyeron 4340. O sea, yo en cuatro años voy a construir lo que se construyó en 40 años en la provincia de Santa Fe. Pero eso lleva tiempo. Rosario va a tener más cámaras que Capital Federal, que en todos lados, pero en el 2026 va a estar eso a pleno. Los recursos de los fiscales. Yo tengo un concurso para nombrar 52 fiscales. La construcción de estaciones policiales para cerrar todas las comisarías en la provincia de Santa Fe lleva tiempo porque yo tengo que construir edificios de 5000 metros cuadrados que van a ser edificios netamente operativos. La política de seguridad hoy es más física y de reordenamiento de recursos humanos y de trabajo intelectual en lo que es el análisis criminal y la inteligencia criminal y la investigación criminal que estructural. Cuando yo tenga el pleno despliegue del plan de seguridad, que va a ser a mediados del 2027, yo te digo lo de Rosario no vuelve nunca más atrás. Rosario va a ser la ciudad más segura de la República Argentina, pero en el 2027.
— ¿Y cuál es su plan después del 2027? ¿Pelear por un proyecto nacional o provincial?
— Yo estoy muy concentrado en la gestión de provincial. Me cuesta mucho a mí decodificar la política nacional, me cuesta muchísimo y nunca me motivó demasiado. A mí siempre me motivó mucho lo provincial. Yo nunca fui legislador nacional porque estuve muy motivado por la construcción de poder en la provincia de Santa Fe.
— ¿Seguirías en Santa Fe?
— Es que yo no tengo reelección.
— ¿Y si la Legislatura avanza con la Reforma Constitucional?
— No lo estamos pensando. Sí, me gustaría seguir en Santa Fe o como legislador de la provincia o colaborando. No soy una persona que diga “fui gobernador, no puedo estar en otro lugar”. Donde más le aporte al programa de gobierno que estamos llevando adelante, sea en la Legislatura para mantener mayoría legislativa, será ahí. Si es colaborando como asesor, será ahí. Si puedo tener un rol partidario en Santa Fe, será ahí, pero pero a mí me cuesta pensar la política nacional. No obstante, es que yo pertenezco a un grupo político nacional que es Evolución, que lo lidera Martín Lousteau y me siento cómodo en ese lugar.
— No estás incómodo como De Loredo
— Yo creo que Martín Lousteau es la persona más honesta intelectualmente que hay hoy en la Unión Cívica Radical o uno de los más honestos, porque sabiendo que pone capital político en juego, da debates que muchos no quieren dar o se hacen los zonzos. Yo creo que lo de Martín Lousteau le va a pagar él a largo plazo, porque la coherencia paga a largo plazo, no paga la coyuntura y va a ganarse el respeto de muchas personas, porque él hoy hace planteos políticos de fondo, porque no coincide con el modelo. Yo a veces tengo diferencias con él, como todos tenemos diferencias con muchas personas, pero es importante encontrar dirigentes así, con lo cual yo me siento contenido en el partido y también me siento contenido en el rol, en el espacio que hemos construido los gobernadores radicales, porque tenemos otra responsabilidad.