La sorpresiva protesta sindical de este miércoles mantuvo a miles de pasajeros varados y angustiados en los aeropuertos, a la espera de una solución. “No nos pueden joder así. Nos tienen de rehenes. Los sindicatos piensan que tienen más derechos”, señaló una damnificada desde Aeroparque.
Durante esta tarde, la desesperación escaló a medida que pasaron las horas. Familias enteras y grupos de amigos que tenían viajes planeados se vieron afectados y sin respuesta alguna.
“Estoy con un bebito de 2 años en el aeropuerto. Honestamente, es inhumano. Nos comentaron que hay gente arriba de los aviones, y también hay gente que está durmiendo en el piso”, describió a Infobae Carolina, una madre que debía viajar a Las Cataratas.
Su vuelo estaba programado desde Aeroparque. En poco tiempo, el lugar colapsó de gente sin saber qué hacer y de valijas en cada rincón.
Y continuó: “La situación es bastante crítica. Nosotros teníamos vuelo 11.30, pero a las 16.30 seguíamos esperando. Estamos de rehenes en el aeropuerto, esperando que alguien defina algo. La compañía aérea tiene nuestras valijas. Nosotros no tenemos ni el vuelo reprogramado. En los mostradores, están las personas de las aerolíneas que no tienen idea de lo que está pasando y no pueden hacer nada. Yo me acerqué a los mostradores de todas las compañías y todos tienen la misma respuesta. Nadie da la cara. La gente aplaude a modo de protesta pero nadie hace nada”.
“Los sindicatos piensan que tienen más derechos que cualquier otra persona. Como si los derechos de ellos fueron más importantes que los nuestros y como si nuestro tiempo no valiera. Esto es un desastre y una desconsideración absoluta. También pusieron cuatro policías para contenernos a nosotros, que estamos esperando nuestro vuelo, y el sindicato está haciendo lo que se le canta”, agregó Carolina, con bronca.
Y profundizó su situación: “El problema es que el servicio de carga está sindicalizado. Los vuelos de Aerolíneas Argentinas están saliendo porque tienen su propia logística de carga. En nuestro caso, compramos por esta compañía, pero nos pasaron el vuelo a la aerolínea Gol. Así que ahora estamos esperando sentados porque la empresa depende de Intercargo, que está sindicalizada”.
Por su parte, un empleado de la empresa encargada del servicio de rampas respondió a las quejas de la pasajera que exigía una respuesta. “La medida nos perjudicó a todos. No solo a ustedes, a nosotros también. Yo ya me tendría que haber ido. Yo entiendo lo que decís. Lamentablemente, yo recibo órdenes y tenemos que cumplir las normas que están en el aeropuerto. Nosotros somos los que ponemos la cara. Ustedes se enojan con nosotros”, subrayó el hombre junto a otro compañero Intercargo. Además, aseguraron: “El sindicato está negociando, pero dicen que si sigue así, a la noche vuelven a cortar”.
Otra pasajera que estaba haciendo la extensa fila afuera de Aeroparque para poder ingresar a hacer su consulta, señaló en diálogo con TN: “Ya no sé cuántas horas llevamos, entre cinco y seis. Esto es una vergüenza. Que echen a todos y que vengan las personas que realmente tienen ganas de trabajar. Me siento rehén”.
“Estoy con un ataque de pánico. Desde la una y media que estamos detenidas, prisioneras. Viajamos desde San Martín de los Andes y ahora no podemos retirar las maletas. Tenemos que ir a trabajar y tenemos que dejarlas acá. Esta gente quiere parar el país. Nos cortaron la libertad y acá hay abandono de persona”, contó otra mujer, furiosa.
“Todo el mundo colapsa. Es el segundo año que me pasa esto. El año pasado, mi vuelo salía 6.30 de la mañana y estuvimos hasta las once de la noche para poder salir. Es la segunda vez que salgo y me pasa lo mismo. Esto no puede seguir pasando. Libertad, más compañías, más aires libres, basta de esto”, manifestó otra pasajera que estaba junto a su grupo de amigas.
“Mientras no cambien las cosas en este país, esto no va a cambiar. Los ciudadanos estamos a merced de cuatro o cinco hijos de puta que nos quieren joder la vida a nosotros y a toda la gente que trabaja y estudia porque quiere salir adelante”, se quejó otra señora. “Está todo muy mal organizado. Nadie sabe nada. Estoy muy enojada. Hay mucha incertidumbre”, añadió otra señora.
“Estoy muy cansada y no puedo hacer nada. Soy extranjera y ni siquiera puedo llamar por teléfono a ningún lado”, contó una joven turista, muy preocupada. Y una mujer que también aguardaba en la fila sobre la vereda, expresó: “No nos dan asistencia, agua, nada. No sé hasta qué hora tenemos que hacer esta cola”.
En medio del caos, la compañía de LATAM reprogramó sus vuelos para mañana con salida desde Ezeiza.
Finalmente, recién a las 16.45, fuentes consultadas por este medio aseguraron que ya había comenzado la entrega de equipaje a los pasajeros. “Ya se normalizó todo”, indicaron desde Asociación del Personal Aeronáutico (APA).