El presidente de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia, consumó en el predio Lionel Andrés Messi, en Ezeiza, una formidable muestra de poder al conseguir su reelección anticipada por aclamación e imponer una profunda reforma en los torneos de Primera División, pese a las advertencias del gobierno de Javier Milei de avanzar con denuncias penales y la invalidación de todo lo actuado por el líder que surgió del modesto Barracas Central y se convirtió en el hombre fuerte del fútbol.
El gobierno de Javier Milei anticipó que prepara una larga batalla en la Justicia, pero sabe que no podrá impedir los cambios votados de manera unánime por los socios de la entidad madre del fútbol que es campeón del mundo vigente y doble campeón de América. Es que hasta anoche, la idea de una intervención sumaria de la AFA quedó archivada, al confirmarse que ni la Conmebol ni la FIFA tolerarían una avance sobre la institución. Tomar una medida de ese estilo podía implicar la inmediata suspensión de toda participación de la Argentina en competencias internacionales.
“Milei sabe lo que representa el fútbol para los argentinos. No se iba a exponer a que River no pueda jugar la semifinal de la Copa Libertadores o que Messi no pueda seguir metiendo goles en las Eliminatorias”, reconocía anoche una fuente que estuvo involucrada en la disputa entre la Casa Rosada y la Asociación del Fútbol Argentino.
La batalla judicial
“La AFA con su asamblea de violó la ley, el estatuto, el reglamento electoral de la institución, el Código Civil y Comercial de la Nación y la Ley Orgánica de la Inspección General de Justicia. Además desobedeció una resolución de la autoridad de contralor que había declarado ineficaz e irregular a los efectos administrativos la convocatoria para elecciones adelantadas en un año y las reformas del estatuto proyectadas”, explicó a Infobae el titular de la IGJ, Daniel Roque Vítolo.
Y agregó que el Consejo Directivo y los Asambleístas “desoyeron la advertencia que les hicieron los inspectores de IGJ que asistieron al acto asambleario, sosteniendo falsamente que la Justicia los había habilitado a sesionar”, indicó el funcionario. Es que para el Gobierno “la palabra final la tendrá la Cámara Civil”, de acuerdo a lo que establece la normativa vigente referida a las controversias sobre decisiones administrativas. “Lo que se olvidaron de decir los asambleístas es que las dos acciones judiciales que la AFA intentó para que le autorizaran la Asamblea fueron rechazadas”, insistió.
Desde el final de la semana pasada, el equipo jurídico de la AFA que conduce el tesorero Pablo Toviggino, habían planteado que el juez Christian Ricardo Pettis garantizó la realización de la asamblea, una interpretación que fue rechazada por el Gobierno. “Le hacen decir al juzgado cosas que el juzgado no dijo”, insistían en el Ministerio de Justicia, que encabeza Mariano Cúneo Libarona.
“La AFA ni siquiera apeló la resolución de la Inspección General de Justicia y para la IGJ nada cambió. Todo está igual que antes de la Asamblea, porque lo resuelto es inválido, salvo por el hecho de que ahora los directivos y los asambleístas de la AFA han violado la ley”, afirmó el funcionario que está a cargo el Registro Público de Comercio y los Registros de Asociaciones Civiles y Fundaciones.
La pelea política
Más allá de la batalla judicial, “Chiqui” Tapia expuso en vivo y en directo el poder que detenta en el mundo del fútbol, que le permitió resistir la embestida del gobierno nacional para impedir su reelección anticipada un año antes del vencimiento de su actual mandato. Con la aprobación de su revalidación, estará al frente a la entidad madre del fútbol hasta 2028, un año después de la finalización del período por el que fue electo el primer mandatario.
No hay que perder de vista que en la asamblea no sólo se decidió por aclamación la continuidad del líder de Barracas Central, sino que también se puso en marcha la “Liga de los campeones del mundo” de 30 equipos, con apoyo de los clubes chicos pero también de los “grandes”, como River, Boca, Racing, Independiente, San Lorenzo, que no sólo votaron cada uno de los puntos de la orden del día de la Asamblea, sino que formarán parte de la conducción de la entidad. Sólo quedaron fuera -pero no votaron en contra- Estudiantes y Talleres de Córdoba, cuyo presidente Andrés Fassi, fue la punta de lanza contra Tapia.
“¿Candidato? Pero claro que sería un gran candidato. Lo conoce todo el país, lo quiere Leo Messi y encima está peleando con Milei, ¿cómo no lo vamos a querer en las listas? Pero eso depende de él”, decían la semana pasada en el Instituto Patria. Cristina Kirchner ya estaba trabajando para asumir en el PJ y Tapia en su re-reelección. Ayer fue el Día de la Lealtad Peronista.