El Gobierno designó a María Ángeles Mira como directora de Planificación y Programación del Palacio Libertad, Centro Cultural Domingo Faustino Sarmiento, antes conocido como Centro Cultural Kirchner (CCK), cuya dirección general sigue a cargo de Valeria Ambrosio.
La designación, de carácter transitorio -por 180 días hábiles, contados a partir del 1 de abril de 2024-, se formalizó mediante la Decisión Administrativa 958/2024, publicada en el Boletín Oficial y firmada por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello. Según lo establecido, el Palacio Libertad se considera un “organismo desconcentrado de la Subsecretaría de Gestión y Desarrollo Cultural de la Secretaría de Cultura del Ministerio de Capital Humano”.
Mira, quien se ha dedicado principalmente a la producción audiovisual, tuvo previamente el cargo de delegada técnico-administrativa de la Subsecretaría de Gestión de Espacios y Proyectos Especiales del Ministerio de Cultura, en 2021, bajo la gestión de Alberto Fernández. Ahora, asume la dirección de un centro cultural con historia y cambios recientes en su denominación y estructura.
La nueva medida también responde a lo dispuesto en el Decreto N° 355/17, que estipula que “toda designación transitoria de personal en cargos de planta permanente y extraescalafonarios con rango y jerarquía inferior a Subsecretario, vacantes y financiados presupuestariamente, será efectuada por el Jefe de Gabinete de Ministros, a propuesta de la jurisdicción o entidad correspondiente”, según el Boletín.
La transformación del Centro Cultural Kirchner en el actual Palacio Libertad, Centro Cultural Domingo Faustino Sarmiento, se oficializó mediante el Decreto de Necesidad y Urgencia N° 897/24, que modificó el artículo 1º de la Ley N° 26.794. Esta normativa “denominó Palacio Libertad, Centro Cultural Domingo Faustino Sarmiento al ex-Centro Cultural del Bicentenario ‘Presidente Dr. Néstor Carlos Kirchner’”.
La cronología y el cambio de nombre del CCK
Días atrás, el presidente Javier Milei encabezó el acto de oficialización del nuevo nombre del lugar, en el cual destacó la importancia simbólica del cambio. “Bienvenidos a uno de los primeros pasos para cambiar la historia. Historia que quisieron prostituir cambiando los nombres, ensuciando a los grandes héroes de esta patria. Es un placer estar aquí con todos ustedes inaugurando el Palacio de Libertad, Domingo Faustino Sarmiento”, expresó en su discurso.
Además, subrayó que la elección de la fecha de inauguración buscó conmemorar el 156° aniversario de la asunción de Sarmiento como presidente. “Su presidencia se encuadra dentro de las más importantes de nuestra historia, porque fue fundamental para la consolidación de nuestra nación”, añadió.
La historia del ex CCK se remonta a su inauguración el 21 de mayo de 2015, durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner. En ese momento, la mandataria resaltó que la remodelación del edificio era un “sueño” de su esposo, el expresidente Néstor Kirchner. El edificio, que ha sido Monumento Histórico Nacional desde 1997, se convirtió en un referente cultural desde su apertura.
Durante el gobierno de Mauricio Macri, el CCK también fue un escenario relevante. En 2018, albergó la cumbre del G-20 realizada en Buenos Aires. El entonces titular del Sistema Federal de Medios Públicos, Hernán Lombardi, fue un promotor de cambios en la denominación del centro cultural. En una entrevista en “Almorzando con Mirtha Legrand”, Lombardi mencionó: “A mí me gusta Centro Independencia, le sacaría la palabra Cultural, (sería) un centro de contenidos públicos”.
El nuevo Centro Cultural Palacio Libertad, ubicado en Sarmiento 151, tiene una rica historia arquitectónica. Su construcción comenzó con la aprobación en 1888 de un proyecto presentado por el expresidente Miguel Juárez Celman. El diseño, a cargo del arquitecto francés Norbert Maillart, tenía como objetivo inicial convertirlo en la sede del Correo Central. Sin embargo, tras una reformulación en 1908, el edificio abrió sus puertas en 1928, bajo la presidencia de Marcelo T. de Alvear.
El edificio cuenta con más de 100 mil metros cuadrados de superficie y una infraestructura “a la altura de los centros culturales más importantes del mundo”, según se menciona en su web oficial. Se presentaron más de 340 estudios de arquitectura de más de 20 países para su renovación. Sus espacios combinan el valor patrimonial del edificio histórico con tecnología moderna.
Entre sus principales atracciones se encuentra el Auditorio Nacional, con capacidad para 1.750 espectadores y un escenario de 250 metros cuadrados. La Sala Argentina, pensada para conciertos acústicos, puede recibir a 534 personas. La Cúpula, con una superficie de 500 metros cuadrados y una estructura vidriada, ofrece una vista panorámica de la ciudad. Además, La Gran Lámpara, con 2.000 metros cuadrados, se destina a exposiciones y actividades culturales.
La medida administrativa que designa a María Ángeles Mira también establece que el financiamiento necesario para su implementación provendrá de las partidas específicas del Ministerio de Capital Humano.