La conducción de la CGT dio a conocer este martes un duro mensaje respecto de la interna que atraviesa el peronismo, que se encamina a un proceso eleccionario para elegir nuevas autoridades, que culminará el 17 de noviembre. Desde los sindicatos reclaman un proceso de renovación partidaria, piden reconocer errores internos y el fin de los personalismos, en un claro cuestionamiento al estilo que supo desplegar el kirchnerismo en los últimos años.
De esta manera tomaron distancia de la postulación de la ex presidenta Cristina Kirchner, quien ya se lanzó para ser una de las candidatas a presidir el PJ, mientras Ricardo Quintela -gobernador de La Rioja- se perfila como otra de las alternativas a manejar los destinos del partido. El cierre de nóminas será el sábado que viene, 19 de octubre, y hacia el final de esta semana se reunirán con ambos con la idea de negociar una lista de unidad.
Luego de reseñar el panorama que viven la clase trabajadora con el gobierno libertario llamaron a la participación de “todos los sectores afines, sin alentar divisiones, con la humildad de reconocer errores y recogiendo las enseñanzas del pasado reciente”. Y agregan que “no es con personalismos que vamos a encaminar la recuperación de la confianza ciudadana. Es preciso iniciar un proceso de genuina renovación, sumiendo que solo con nombres propios no alcanza”.
El mensaje que se titula “Recuperar lo mejor de la tradición justicialista” fue consensuado por el ala más dialoguista de la central obrera encabezada por Héctor Daer y Carlos Acuña, ya que Pablo Moyano y los gremios más cercanos al kirchnerismo no adhieren a este diagnóstico. El lunes, como una muestra de las disidencias que se viven dentro de la CGT, el titular de SMATA -uno de los sindicatos de mayor envergadura-, Mario Manrique, anunció que renunciaba a su puesto en el consejo directivo.
“Las y los trabajadores organizados tenemos legitimidad y vocación para participar en la recuperación política de un Justicialismo con voluntad transformadora hacia un país justo y soberano, y de la que el movimiento obrero, como afirmara el General Perón, constituye su columna vertebral”, comienza el texto que se difundió un día después de una reunión de los principales jefes gremiales en la sede de sindicato de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), en la calle Moreno al 1300, en la que los sectores más duros eligieron no participar. Además de Moyano, quien está volviendo de Marruecos tras haber participado de un congreso sindical internacional, no estuvo tampoco Sergio Palazzo, de La Bancaria.
“Así es que, desde la CGT, proponemos revalorizar el histórico contrato social, justicialista, integrador, con eje en tres pilares fundamentales: desarrollo, producción y trabajo”, continúa.
“Necesitamos avanzar hacia un programa común, innovador y sustentable”, sostiene el documento en su párrafo final. Y agrega que se debe hacer “manteniendo los fundamentos históricos de la justicia social, la independencia económica y la soberanía política; incorporando también las novedades que la época, el desarrollo tecnológico, las nuevas formas de vida y las nuevas demandas. Ideas que inspiren, entusiasmen y movilicen, con el interés nacional como prioridad, pero también recuperando lo mejor de nuestra tradición justicialista que permanece en la memoria colectiva”.
Al referirse a la gestión de Javier Milei también la describe con dureza. “El gobierno nacional lleva adelante un modelo que ajusta gravemente los ingresos de los que menos tienen, transfiere beneficios a sectores concentrados de la economía, habilita tarifas de servicios impagables para los hogares y las pymes, posterga la atención de los jubilados y desfinancia la salud y la educación pública; todo esto en medio de un cuadro recesivo con aumento de la desocupación y la pobreza, sin un horizonte de salida”, consignaron.