Luego de que el Congreso Nacional dejara firme el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario, hubo incidentes en la puerta de la Universidad Nacional de La Matanza (UNLAM), cuando los estudiantes tomaron el establecimiento por la fuerza.
La tensión comenzó luego de la votación en la Cámara de Diputados. Minutos después, el Frente Sindical de Universidades Nacionales convocó a un paro nacional para este jueves en todas las casas de estudio.
Fue entonces que desde el rectorado de la UNLAM avisaron por redes sociales que la institución iba a permanecer cerrada desde hoy a las 18, en adhesión a esa medida. Desde las agrupaciones estudiantiles lo tomaron como una jugada para evitar que se desarrolle una toma, como está pasando en varias facultades.
Ante la intención de los alumnos de realizar una asamblea dentro de la universidad, la seguridad cerró todas las entradas y les negaron el paso. Los estudiantes denunciaron que cuando pasó esto todavía había gente dentro de las aulas.
Frente a la resistencia de los uniformados, quienes estaban afuera de la UNLAM empezaron a saltar las rejas e ingresar por la fuerza, según puede verse en videos que grabaron testigos de la escena. Durante todo el día habían estado en ese lugar manifestándose para que el Congreso rechace el veto presidencial.
Finalmente, se decidieron avanzar con la toma y pasarán la noche dentro de la universidad.
Cada vez más universidades tomadas en rechazo al veto
La situación de la UNLAM se repetirá esta noche en la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP), la Universidad de Salta (UNSa) y la Universidad Nacional de Tucumán (UNT). Son las cuatro instituciones con tomas vigentes al cierre de este artículo, y no se descarta que con el correr de las horas se sumen más.
Ayer ya habían hecho tomas en facultades de la Universidad Nacional de las Artes (UNA), la Universidad de San Martín (Unsam), la Universidad de José C. Paz (Unpaz), la Universidad de Tres de Febrero (Untref), la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), la Universidad Nacional de Rosario (UNR), la Universidad Nacional de Jujuy (UNJu), la Universidad Nacional de la Patagonia Austral (UNPa), la Universidad Nacional de La Pampa (UNLPam), la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), la Universidad Nacional del Litoral (UNL), la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo)y la Universidad de Buenos Aires (UBA).
Mañana, paro total en las universidades nacionales
La medida fue informada a través de un comunicado por el Frente Sindical de Universidades Nacionales, el cual llamó a consolidar del plan de lucha en defensa del salario y el presupuesto para las casas de altos estudios.
“La voluntad popular ha sido defraudada y la democracia ha cedido al manejo antirrepublicano de gobernar por decreto del Gobierno Nacional”, comienza el texto difundido apenas unos minutos después de que los legisladores efectúen su voto en el recinto.
Y continúa: “Se conformó una alianza política que es incapaz de conmoverse ante el sufrimiento de las grandes mayorías, ante el reclamo de todos los sectores por sostener aquello que es fundamental: la universidad pública, la educación pública”.
Ante la decisión mayoritaria del parlamento de mantener la decisión del Presidente frente a la norma que aumentaba los salarios por inflación de forma retroactiva a enero, los gremios docentes enfatizaron: “Este Frente Sindical manifiesta nuevamente la voluntad de luchar para defender la universidad pública, la salud y la educación pública, las jubilaciones dignas, por niñeces protegidas y por un país igualitario. Universidad pública de calidad para nuestro pueblo y salarios dignos para docentes y no-docentes que la sostienen”.
El veto de Milei logró sostén en el Congreso tras varias semanas de tensiones con sus aliados y negociaciones frenéticas con gremios y gobernadores. Este miércoles, los libertarios finalmente consiguieron 84 votos en defensa del veto, mientras que la oposición apenas pudo sumar 164 para insistir con el proyecto original. Dado que la Cámara de Diputados necesita dos tercios de los presentes para rechazar un veto presidencial, las ausencias y las abstenciones jugaron un papel clave.