“Como el escorpión que mata a la rana que lo está ayudando a cruzar el río, no pueden resistirse, está en su naturaleza”, escribió este viernes en sus redes sociales Fernando de Andreis, el ex secretario general de la presidencia del gobierno de Mauricio Macri. No fue un posteo sin sentido. Por el contrario, se trató de un mensaje del ex presidente para la gestión de Javier Milei, quien acumula cierto malestar por su manera de gobernar, según confirmaron desde su entorno a Infobae.
El principal reclamo del fundador del PRO y su núcleo más cercano sigue siendo que el jefe de Estado no se deja ayudar. Una queja que, con el paso del tiempo y los intentos de la administración libertaria con aprobar leyes en el Congreso, se acrecentó.
La votación de la ley por el presupuesto universitario fue uno de los últimos escenarios que despertó enojos en el entorno de Macri. En este sentido, aseguran que el Gobierno prefirió enfrentarse al tenso clima que enmarcó los debates en las cámaras en vez de aceptar ayuda y lograr acuerdos. También cuestionan que desde la gestión de Milei esperan que “el PRO vote todo a libro cerrado”.
El veto del Presidente a la norma por los fondos de las universidades públicas aumentó el enojo del líder del partido amarillo y su gente, quienes admiten que están cansados de su manera de gobernar y de los golpes que ellos mismos se están dando.
Sin embargo, ese no es el único motivo que genera el malestar. También reclaman que el Gobierno no les dé la suficiente inclusión y que encima se encarguen de criticarlos con dureza cada vez que pueden. Desde el PRO remarcan que son al partido que más le pegan, a pesar de su intento por ayudarlos en diferentes cuestiones.
“El asesor estrella del gobierno (por Santiago Caputo) se dedica todo el tiempo a contestar y abrir cuentas anónimas y no pone la cara para criticar al PRO”, dijo a este medio una fuente cercana a Mauricio Macri.
El tuit que este viernes posteó Fernando de Andreis también tuvo la intención de mostrarse diferentes a los libertarios en este sentido: buscan destacar que ellos no se esconden para hacer críticas y que deslizan sus cuestionamientos libremente, sin problema de hacerlo con nombre y apellido.
En las últimas horas, Mauricio Macri volvió de su periplo fugaz por Montevideo y reactivó su agenda política. Continúa activo, en un momento de alto perfil y con un rol clave. Su relación sinuosa con Javier Milei es determinante para las decisiones del Gobierno que exigen consensos en el Congreso. La fragilidad institucional de La Libertad Avanza requiere de aliados para sostener su agenda política. El ex presidente lo sabe y busca hacer valer ese atributo del PRO.
En este contexto, el líder del PRO recibió este jueves a los senadores nacionales del partido para analizar la agenda parlamentaria y los pasos a seguir en el Congreso. Se reunió en su casa de Acassuso, San Isidro, con los legisladores Luis Alfredo Juez (Córdoba), Carmen Álvarez Rivero (Córdoba), Beatriz Ávila (PJ Tucumán), Martin Goerling Lara (Misiones), Victoria Huala (La Pampa), Andrea Marcela Cristina (Chubut), Alfredo Luis De Angeli (Entre Ríos). La larretista Guadalupe Tagliaferri (CABA) estuvo invitada, pero había avisado que no podía asistir por compromisos de agenda. La legisladora respalda la Ley de Fondos Universitarios, participó de la marcha universitaria y votará para rechazar el veto de Milei.
Este encuentro fue en el marco de una serie de reuniones que Macri viene desarrollando con gobernadores, intendentes y legisladores del PRO. Lo hace habitualmente desde que asumió la presidencia del partido en abril de este año. Busca generar orden político, disciplina partidaria y obtener información de la situación política en cada uno de los distritos que gobierna su espacio, así como también el pulso en el Congreso.