Luego de la masiva marcha y, poco antes de la publicación del decreto que veta la Ley de Financiamiento Universitario, el vicerrector de la UBA, Emiliano Yacobitti, y el subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, mantuvieron un acalorado debate por la situación presupuestaria de la educación pública superior. “Dejen de decir que las universidades no son auditables”, expresó Yacobitti.
Durante la tarde de este miércoles se llevó a cabo la segunda Marcha Federal Universitaria. Si bien el acto central fue frente al Congreso, la movilización se replicó en varios puntos del país en rechazo al veto del presidente Javier Milei y con el objetivo de exigir una recomposición salarial para los trabajadores docentes y no docentes de las casas de altos estudios. El Gobierno, por su parte, percibió a la marcha como un acto político y garantizó el financiamiento de las instituciones.
En este contexto, Yacobitti y Álvarez se cruzaron en un debate en el programa A Dos Voces, al aire de TN. Así, el vicerrector de la UBA sostuvo que lo que el Gobierno está decidiendo es “desfinanciar una de las pocas cosas que en el Estado funciona bien”, por lo que mencionó los rankings internacionales en donde la Universidad de Buenos Aires y otras instituciones a nivel nacional destacan.
Por su parte, el subsecretario de Políticas Universitarias de Milei aclaró: “Que se quede tranquila la población que vamos a financiar la universidad, lo que o vamos a permitir es que sean usadas para fines que no fueron creadas, se crearon para dar clases, tener investigación, no para sostener un armado político y que quedó demostrado en la marcha”. Por esto mismo, reiteró el reclamo del Presidente, que exige que las universidades sean sometidas a una fiscalización de sus cuentas. “Defenderla es auditar, queremos una universidad auditable porque cada peso que le sacan a un trabajador, nosotros lo tenemos que auditar”, aseguró el funcionario.
Al respecto, Yacobitti mencionó que la Ley de Administración Financiera establece que las universidades tienen que rendir cuentas hasta dos veces por año a la Contaduría General de la Nación. “El 90% de los gastos que tienen las universidades públicas es en docentes y que el Ministerio de Educación tiene Nombre, DNI, y demás. El 100% está rendido, el resto es para pagar tarifas y el resto para pagar proyectos de conectividad, becas y todos los meses te llegan las rendiciones y vos las firmás”, sostuvo al cruzar a Álvarez.
De esta manera, el vicerrector de la UBA pidió: “Dejen de decir que las universidades no son auditables porque están más auditadas que el Ministerio de Educación donde vos trabajás porque la auditoría está publicada en la Auditoría General de la Nación”. En consecuencia, el subsecretario se quejó: “La UBA debe años sin cargar ninguna factura, a tal punto que está esta nota del 5 de diciembre de 2023 de la gestión anterior, reclamándole los años de 2015-2021 porque simplemente informar no es rendir cuentas”. “¿Nunca van a mostrar una factura? ¿Te tenemos que creer sin ver las facturas?. Ustedes tienen que cumplir igual que el resto de las universidades”, indicó.
Otro de los puntos más acalorados del debate fue cuando se tocó el tema de los salarios docentes. El ex diputado nacional señaló que los profesores y trabajadores universitarios “perdieron 4 de cada 10 pesos de sus salarios, el 40% del poder adquisitivo”. “Ustedes a esos trabajadores universitarios les reconocieron 0 por el 45% de inflación de los dos primeros meses del año”, reclamó y, si bien reconoció que el Gobierno cubre los gastos de funcionamiento de las instituciones, planteó que “no sirve de nada abrir y cerrar las puertas si no se les puede garantizar un salario básico a los docentes para que se queden dando clases en las universidades”.
“Yo te propongo, lo que tenés que hacer es candidatearte como secretario general de los docentes, sos mejor dirigente sindical que político”, lanzó Álvarez y sumó: “Es cierto que no está en el Presupuesto 2025 la actualización salarial, pero no la tenés que discutir vos, la tienen que discutir los secretarios de los sindicatos en la institución que corresponde, porque si no no sé si es vicerrector o secretario general del sindicato”.
En ese sentido, señaló que no es solo una cuestión específica de los trabajadores de la educación; por el contrario, es algo que afecta a todos los ciudadanos en Argentina, debido al estado en el que se encontraban las cuentas públicas al momento en el que Javier Milei asumió la gestión. “Hay que entender que nosotros hacemos esto porque nos gusta, no queremos hacer sufrir a los docentes, el problema es sino pedir flan después del incendio de la casa”, señaló.
Sobre este punto, en la etapa de las preguntas cara a carra, Álvarez aprovechó la oportunidad para consultarle a Yacobitti “por qué, en lugar de aprobar un proyecto que claramente está mal redactado y se entromete en la paritaria, no esperaron hasta octubre para cambiar los montos dentro del Presupuesto Nacional, ya que tienen mayoría legislativa”.
“Calculaba que lo sabías, pero en las paritarias hay dos partes hasta ahora, por lo que yo tengo entendido, nunca hubo ningún acuerdo”, contestó Yacobitti y señaló que “lo único que hubo fue aumentos que el Gobierno le dio a los trabajadores universitarios, muy por debajo de la inflación que en algunos casos los deja por debajo de la línea de la pobreza por eso el Poder Legislativo sancionó la ley para darle certeza a todos los sectores porque las universidades no saben si van a terminar el año o si van a arrancar el año que viene”. Álvarez, por otro lado, garantizó el inicio del próximo cuatrimestre en todas las universidades del país.
A pesar de los reclamos, el Gobierno nacional publicó el decreto con el veto a la Ley de Financiamiento Universitario. Ahora, el Congreso deberá decidir si insiste con la iniciativa o si mantiene el rechazo del Poder Ejecutivo, tal como sucedió con la legislación sobre la nueva fórmula de movilidad jubilatoria.