La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) realizará, desde las 13 de este jueves, una protesta frente a la Casa de la Moneda, luego del anuncio por parte del Gobierno de disolver el organismo, en el marco de un plan para reducir el Estado, como lo hizo con Trenes Argentinos.
Infobae anticipó el martes que las tareas que cumple la entidad pasarán a ser realizadas por compañías privadas a las cuales se les adjudicará el trabajo mediante una licitación, o incluso se analiza “importar los billetes” que necesite el Banco Central.
“El anunciado cierre de la Casa de la Moneda por parte del Gobierno de Javier Milei, más allá que es el cierre de otra empresa pública, es una pérdida de soberanía enorme. Presidencia hasta anunció la posibilidad de importar billetes”, aseguró Mercedes Cabezas, secretaria general adjunta de ATE, ante la consulta de este medio.
La medida de fuerza original iba a ser un “acampe” frente al Ministerio de Capital Humano, a cargo de Sandra Pettovello, ubicado en Carlos Pellegrini y Juncal, en el barrio porteño de Recoleta. Pero la apertura de una mesa de diálogo con funcionarios nacionales sobre el futuro de los trabajadores aplazó la decisión, al menos hasta conocer el rumbo de las negociaciones. Fue el propio Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE Nacional, quien anunció la novedad.
“Si en las reuniones con los funcionarios no existen avances, inmediatamente vamos a retomar esta acción”, dijo el también delegado del PAMI.
“La Asociación Trabajadores del Estado logró la apertura de distintas mesas de diálogo sectoriales en organismos para abordar el tratamiento de despidos y suspendió el acampe previsto para este jueves en Capital Humano. En tanto, el sindicato realizará una protesta a partir de las 13 en la Casa de la Moneda a partir del anuncio de su cierre”, difundió el propio ATE Nacional a través de la red social X.
Para Aguiar, las respuestas del Poder Ejecutivo hasta aquí “no alcanzan para que suspendamos el resto de las medidas y, por lo tanto, vamos a continuar con las protestas en todas las carteras. Rechazamos el cierre de organismos y por eso vamos a defender la Casa de la Moneda, ya que su cierre afectaría las fuentes laborales y lesionaría gravemente la soberanía de nuestro país”, agregó.
Aguiar también sostuvo: “Todavía no podemos comprender cómo contando con el personal altamente capacitado para emitir billetes y con máquinas de última tecnología, estos billetes se tengan que estar fabricando en China. Para estos funcionarios primero están los negocios y después la patria”.
La institución, que en estos momentos preside Daniel Méndez, es una empresa pública, industrial y comercial, dependiente del Ministerio de Economía, que encabeza Luis “Toto” Caputo, y fue creada en 1875, año a partir del cual comenzó a funcionar de manera ininterrumpida hasta esta fecha.
Entre las múltiples tareas que tiene a su mando, esta institución produce sellos postales, estampillas fiscales y otros objetos de valor esenciales para el funcionamiento del Estado, operando bajo estrictos estándares de control de calidad.
También se ocupa de la fabricación de especies valoradas, instrumentos de control, documentos de seguridad, diseño y desarrollo de software y procesos de digitalización.
Cuenta con dos plantas, una en retiro, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la otra en Don Torcuato, provincia de Buenos Aires. Frente a la primera se desarrollará la marcha de los trabajadores de ATE.
Al igual que como ocurrió el martes 1 de octubre, con la empresa Trenes Argentinos Capital Humano, que fue eliminada, hasta ahora la decisión de la Casa Rosada es que “todos los trabajadores que actualmente cumplen funciones en la Casa de la Moneda serán despedidos”.
Ayer, en la Marcha Federal Universitaria, un nutrido grupo de trabajadores de ATE, y más precisamente de la Casa de la Moneda, difundían, con sus chalecos verdes característicos, el conflicto al que se enfrentaban.
“La emisión de moneda es un atributo del estado que está asociado a la soberanía, como la territorialidad y a la defensa. Además, es un trabajo muy calificado y de una responsabilidad enorme”, precisó Cabezas, una de las dirigentes de ATE que motoriza la medida en la Retiro, frente a la Casa de la Moneda. Y Agregó: “Más allá de la pérdida de fuentes de empleo, y el riesgo de la pérdida de políticas públicas en general, nunca es una opción renunciar a los atributos de soberanía que emanan de los Estados Nación. Todos los países tienen su casa de moneda porque justamente no renuncian a los atributos de soberanía”.
El sindicato reclama “el inmediato cese de los despidos, la reincorporación de todos los cesanteados ilegítimamente, y que se ponga fin al cierre de programas que garantizan derechos para los sectores más vulnerables de la sociedad”.
El Gobierno está decidido a avanzar a fondo en el proceso privatizador de las empresas públicas, en simultáneo a la determinación de la Casa Rosada de deshacerse de Aerolíneas Argentinas, que también ayer se hicieron presentes sus trabajadores y dirigentes a la marcha frente al Congreso de la Nación.
“El estado no tiene que seguir siendo empresario. Vamos a tratar de hacer todo rápido. La idea es vender todo”, difunden desde casa Rosada para reafirmar la decisión de Milei de avanzar en la disolución o privatización de empresas estatales. El trazo grueso de estas medidas es monitoreada por Diego Chaher, el titular de la Agencia de Transformación de las Empresas Públicas.